Solo hay que echar un vistazo a algunos de los títulos más esperados de los próximos años, ya que muchos de estos están siendo realizados en China: Black Myth Wukong, Lost Soul Aside, Where Winds Meet… Sin duda, los tráilers mostrados de estos juegos demuestran que hay tanto calidad como un potencial. Sin embargo… ¿Está el desarrollo de videojuegos chino a la altura del japonés o el occidental? Esta es, sin lugar a dudas, una pregunta difícil de responder, pues aunque el país está demostrando ser un buen lugar para desarrollar grandes productos triple A y doble A, así como juegos-servicio (solo hay que ver el caso de Genshin Impact o Pokémon Unite), es en el aspecto independiente donde más problemas encontramos. El apoyo a los estudios independientes es minúsculo, y aunque estos suelen presentar muy buenas ideas, siempre adolecen del mismo problema: falta de experiencia. Así, muchos juegos independientes chinos adolecen de enormes problemas gráficos, técnicos o de diseño, empañando productos que podrían ser revolucionarios con algo más de cuidado y trabajo. A pesar de tener esto en mente, no pude dejar de ver con emoción el primer tráiler del juego del que hoy vengo a hablaros, Wandering Sword, un RPG por turnos desarrollado por el pequeño equipo de The Swordman Studios y que presenta una clarísima influencia por el JRPG de mediados de los 90. ¿Por qué atrapó toda mi atención? Bueno, solo hay que echarle un vistazo al juego: su espectacular uso del HD-2D, mezclado con un sistema de combate llamativo, una ambientación inspirada en la china imperial y una historia basada en las grandes obras del género wuxia daban forma a un cóctel explosivo que, como fan de todo lo relacionado con las artes marciales chinas, no podía perderme. ¿El resultado? Bueno, para descubrir qué tal está el juego solo tenéis que hacer una cosa: leer el análisis completo que podéis encontrar a continuación.
Siguiendo el camino de la espada
La historia de Wandering Sword nos pone en la piel de Yuwen Yi, un joven capacitado en el manejo de las espadas que trabaja junto a varios de sus amigos protegiendo carruajes de los ataques de los bandidos. Su trabajo no sale especialmente bien cuando se ven envueltos en el conflicto entre dos clanes rivales, pues acaban muriendo todos menos Yuwen. Envenenado, nuestro protagonista acaba siendo salvado por la misteriosa persona a la que debía proteger, un veterano maestro de artes marciales quien le deja a cargo de uno de sus antiguos alumnos. Junto a él, Yuwen aprenderá a controlar su ki mientras descubre la forma de eliminar su veneno. Sin embargo, unos viejos enemigos de su salvador vuelven en busca de venganza, secuestrando a su hija en el proceso. Con su nuevo poder y con ansia de vengar la muerte de su salvador, Yuwen se embarca en una enorme travesía que le llevará a recorrer las vastas llanuras de China mientras busca a la joven secuestrada y descubre la verdad sobre sus enigmáticos enemigos. Por supuesto, por el camino conocerá a toda clase de personajes, desde aldeanos incapaces de adentrarse en los conflictos hasta poderosos guerreros que prestarán su ayuda a nuestro protagonista… Si este consigue convencerlos. Uno de los apartados más curiosos e interesantes de Wandering Sword está en su sistema de relaciones sociales, a través del cual podremos conseguir el apoyo de ciertos personajes siempre que les ofrezcamos objetos que sean de su agrado. Así, tendremos que aumentar sus puntos de afinidad haciéndoles “regalos” para poder cumplir ciertas misiones, obtener determinados objetos o conseguir que se unan a nuestras filas de guerreros. Sobre el papel la idea es buena, permitiéndonos conocer más a fondo a los personajes que pueblan el universo del título, pero no termina de cuajar debido a que la escritura de la mayoría de personajes secundarios es, cuanto menos, floja. Muchos de estos no terminan de destacar o resultar interesantes, quedando como meros arquetipos que hemos visto una infinidad de veces en el género, algo que también ocurre con su pobre construcción de mundo, en la que se plantean ideas interesantes que no terminan de desarrollarse en ningún momento. Solo los personajes centrales de la historia terminan de funcionar, destacando especialmente a los maestros que ayudan a nuestro protagonista y algunos de los miembros del equipo.
La historia general es bastante mejor de lo que uno podría esperar, suponiendo un divertido y épico cóctel de elementos extraídos de las películas más icónicas y clásicas del cine wuxia. Vale, quizá los que esperen una historia revolucionaria y alejada de los cánones del género pueden quedar algo decepcionados, pero si vais con la intención de conocer una historia divertida ambientada en la china imperial estoy seguro de que disfrutaréis de lo lindo. A nivel personal, he degustado algunos momentos concretos del juego, destacando especialmente las secuencias de entrenamiento (el crecimiento del protagonista es algo artificial, pero se disfruta bastante) y varios de sus curiosos giros de guion. Su buena historia queda empañada por una lamentable falta de traducción al español y por una localización al inglés problemática, que no solo presenta frases mal articuladas si no que peca al presentar diálogos y menús solapados: en más de una ocasión perderemos información debido a que surgen varios diálogos al mismo tiempo y en el mismo espacio de la pantalla, impidiéndonos así la lectura.
Tigre y Dragón
Ya os lo comentaba en la introducción, pero no viene mal recordarlo: Wandering Sword es, en esencia, un JRPG por turnos de corte clásico, que toma una fuerte inspiración de títulos tales como Dragon Quest IV, LIVEALIVE, Final Fantasy VI o el más reciente Octopath Traveler (este el más evidente por su tratamiento gráfico). Un breve vistazo a sus mecánicas de juego evidencia esta afirmación, presentando un sistema de niveles sencillo que mejora las estadísticas de nuestros personajes tras los combates, un diseño de niveles en el que se distinguen las urbes, las mazmorras y el desplazamiento general por el mapamundi… Hay muchos puntos en común con este género, pero la pregunta es, ¿está a la altura de sus referentes? Sinceramente, creo que depende de como lo miremos. Sin lugar a dudas, el juego de The Swordman Studio tiene un enorme potencial para mirar de tu a tu a los grandes nombres de la industria, tal y como demuestra su excepcional y divertido sistema de combate: a través de una enorme cuadricula, tendremos que colocar a nuestro protagonista en el lugar más idóneo para golpear a los enemigos con sus propias habilidades de artes marciales. Eso sí, tendremos que tener cuidado con las acciones que realizamos, pues cada una de estas gastará los puntos de acción de nuestro protagonista. Al principio puede resultar un sistema muy sencillo, pero poco a poco va presentando nuevas ideas y mecánicas que lo hacen más complejo y adictivo. También resulta interesante la personalización de nuestros personajes, pues podemos elegir entre un buen puñado de armas para alterar por completo su estilo de ataque. Vale, esto no es nada del otro mundo y tampoco afecta tanto como uno podría pensar, pero se agradece su inclusión al permitir un mayor rango de posibilidades.
En cuanto al tratamiento visual del juego, encontramos un uso realmente cuidado y preciso del estilo HD-2D que permite recrear un universo pixel art tanto rico como llamativo en el que da gusto perderse. Sinceramente, da gusto descubrir algunas de las estampas que ofrece el juego, presentando escenarios realmente vistosos y hermosos. El diseño de los personajes in-game está cuidado, ofreciendo una serie de animaciones divertidas que remiten a la Square más clásica. Los efectos de los ataques quizá resultan algo fuera de lugar, pero no terminan de empañar el conjunto. ¿Sabéis lo que sí que lo empaña? Su horrible diseño de UI y de menús, que parece realizado por un grupo de estudiantes en su primer año. Con lo bien realizado que está el resto del juego, no entiendo como es posible que hayan dejado esa fuente de letras y esos menús tan sobrios y poco llamativos. A esto hay que sumarle un catálogo de bugs extenso, en donde podremos encontrar situaciones que nos harán tener que reiniciar el juego. Todo esto hace que Wandering Sword parezca un juego sin pulir, al que le quedan un par de mejoras.
Conclusión: Golpe en la gran China
Os voy a ser completamente sincero: Wandering Sword es un juego realmente divertido y completo, que consigue enganchar por su buena historia y su genial sistema de combate pero al que aún le faltan un par de retoques y mejoras. Siento que no he estado jugando al producto final, si no a una beta a la que todavía le quedan cosas por pulir. Espero que el estudio se encargue de mejorar el que, por lo demás, es un genial RPG que demuestra que el indie chino tiene mucho que decir.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.