Sony Santa Monica lo ha vuelto a hacer. Ha desarrollado un juego que no sólo es un placer de jugar, sino que también es una maravilla técnica. La nueva entrega de la saga God of War se codea en este apartado con los máximos exponentes técnicos que encontramos actualmente en la sobremesa de Sony, véanse Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón u Horizon Zero Dawn, títulos que exprimen PlayStation 4 hasta hacerla llegar a la cúspide gráfica de esta generación.
God of War destaca por ofrecer un conjunto gráfico de alta calidad. Kratos se acerca a la realidad, armadura extremadamente bien detallada, un sistema de animaciones bien implementado que hace que con cada movimiento por mínimo que sea reaccione de una forma espectacular, veremos como se tensan los músculos del espartano, la pericia del estudio llega a pequeños detalles en los que no todos se fijarán, como los dientes de nuestro protagonista que están realmente bien hechos.
En cuanto al entorno, la historia nos sitúa esta vez en territorio nórdico, por lo que desde el punto de vista artístico, muchas cosas han cambiado con respecto a entregas anteriores. Los lugares que visitaremos a lo largo de nuestra aventura estarán llenos de vida, flora y fauna, el sistema de iluminación también ayudará a que la atmósfera que envuelva al jugador varíe de oscura a animada, de peligrosa a tranquila,… esta iluminación también actúa de forma dinámica y reacciona de distinta manera según con el objeto que interactuemos. También, podremos apreciar un filtro anisotrópico y oclusión de paralelaje entre otros efectos. Con respecto a otros elementos destacables, nos encontramos con el agua de God of War, aunque no llega a la supremacía técnica a la que llega el reciente Sea of Thieves, se ve realmente bien sobretodo en las secciones en bote.
Otro detalle que cabe a destacar es el sistema de conversaciones, que al igual que ya vimos por ejemplo en Uncharted 4, terminarán naturalmente al salir de la barca y se reanudarán cuando volvamos, todo parece fluir en este aspecto.

Todavía no se puede hablar en profundidad de los enemigos y jefes, pero podemos decir que hay algunos con una extensa paleta de colores y estarán detallados en alta calidad. Los efectos de fuego, hielo y electricidad son simplemente bellos y se recrearán en el título con una tonelada de efectos de partículas.
El juego también hace uso de un motor de destrucción bastante interesante que puede verse en peleas contra algunos jefes, pero éste no llega a los niveles de Frostbite al no ser completamente dinámico. Las físicas también son buenas, sobretodo en el funcionamiento del hacha de Leviathan de Kratos, podremos lanzarla para derribar enemigos, resolver rompecabezas y luego regresarla a nuestra mano.

El juego en su versión de PS4 funciona a 1080p y 30fps estables, a excepción de algunas caídas en momentos específicos pero que no son habituales. Como era de esperar, el juego dará soporte a la potencia extra de PS4 Pro y tendrá dos modos, uno centrado en la resolución y otro en el rendimiento. En una televisión 4K, el juego se ejecuta en una resolución dinámica de 2160p, pero el juego puede sufrir caídas bastante drásticas que hacen que casi se detenga por un par de segundos antes de corregirse. El modo de rendimiento, apunta a velocidades superiores a los 60fps, pero que no consigue una estabilidad constante, y esto hace que haya más bajones de la cuenta por la inestabilidad de framerate.
En general, preferimos la versión base del juego, la de PS4, en lo que respecta al rendimiento, pero esperamos que se apliquen parches que corrijan los errores en los modos de PS4 Pro.
God of War se lanzará el 20 de abril como exclusivo de PlayStation 4, puedes leer más información sobre el juego aquí.