En este sentido, creo que lo necesario para calmar mis temores es disfrutar de un juego que cumpla con todas las expectativas y me demuestre que aún hay muchísimo por inventar dentro del juego, un juego distinto e intuitivo. Uno como el título del que hoy os vengo a hablar, pues el nuevo juego de Aurongon Shanghai busca precisamente hacerse un hueco en el panteón del género presentando una aventura de calidad que no deje a nadie indiferente. Distribuido por Modus Games y por Tesura Games (estos en físico), Afterimage se presenta como un juego precioso y cautivador que busca convencer al mundo sumergiéndose en uno de los géneros de moda. ¿Conseguirá sorprender, o será un juego irregular? ¡Veámoslo en el análisis completo!
Sobreviviendo al desastre
En Afterimage nos pondremos en la piel de Renee, una joven chica con habilidades mágicas acompañada por el carismático Ifree que despierta, confusa y amnésica, en su aldea mientras esta es reducida a cenizas. Sin tener claro qué es lo que está ocurriendo, la joven chica se dispone a buscar a su maestra para hallar las respuestas… Pero esta desaparece misteriosamente junto a una extraña figura que le ataca. Con más preguntas que respuestas, Renee e Ifree deciden unir fuerzas para descubrir la verdad viajando a través de Engardin. Como podéis observar, la premisa nos plantea una historia de corte épico e intimista en el que el viaje de la protagonista sirve tanto para salvar el mundo como para descubrir más acerca de sí misma. Esto hace que nos encontremos ante una protagonista realmente interesante, que a pesar de hacer uso del cliché de la amnesia consigue contar con un desarrollo más que eficiente. El casting de personajes del juego es variado pero irregular, presentando un gran número de personajes algo planos que no terminan de destacar. Evidentemente, hay otros personajes que sí que resultan mucho más interesantes, como el propio Ifree, pero el número de estos es bastante inferior.
Donde más triunfa el juego es, precisamente, en su ambientación, pues el juego apuesta por presentar un universo de fantasía rico y variado que no solo se siente bien construido, si no que también presenta un gran número de conceptos interesantes y sorprendentes. Como viene siendo habitual en los juegos de rol modernos, la historia se diluye poco a poco para ser contada a través de pequeños detalles, lo que puede disgustar a algunos… Pero, personalmente, creo que esto permite que el juego goce de un gran ritmo. Los parones para contar la historia son puntuales y no agotan, lo que es algo bastante favorable para el devenir del juego. Por otro lado, el juego llega a nuestro territorio traducido al español, lo que es un detalle muy a tener en cuenta debido a que el trabajo de traducción es sorprendentemente bueno.
Buscando la verdad en un laberinto
Como os comentaba en la introducción, a nivel jugable nos encontramos con un metroidvania que no oculta en ningún momento sus influencias. Sin embargo, esto no es ningún impedimento, si no que permite que el juego brille con luz propia: la mezcla de elementos de acción y de rol hacen de esta una experiencia refrescante y profunda, que si bien peca de tener unos picos de dificultad algo ilógicos, por lo general nos mantendrá enganchados gracias a su excelente ritmo y a su maravilloso diseño de niveles. De hecho, este último punto es uno de los más interesantes del juego, puesto que el laberinto que nos presenta es uno en el que estaremos deseando perdernos: cada zona está perfectamente construida para presentarnos desafíos que no terminan de agotarnos, y siempre pondrán a prueba nuestras habilidades de forma orgánica. Eso sí, hay que tener cuidado con el nivel y el equipo que llevamos, pues la vertiente más rolera del juego nos llevará a ir cambiando constantemente de vestuario, armas y habilidades.
Esto quizá pueda resultar algo problemático a algunos jugadores, pero lo cierto es que su esquema de progresión añade una más que necesaria profundidad que lo diferencia de otros juegos del mismo género lanzados durante los últimos meses. Estamos ante un juego más profundo y más complejo de lo que solemos ver, lo que se agradece mucho y lo acerca (manteniendo las distancias) a los grandes exponentes del género. Su sistema de combate es otro que brilla con luz propia, pues el uso de las habilidades que vamos obteniendo de forma progresiva permiten entablar cada combate de forma distinta. Y, de hecho, será necesario conocer a la perfección cada movimiento y cada ataque, puesto que muchos de los enemigos nos plantearán un desafío enorme solo apto para unos pocos. El juego es difícil, no hay duda de ello, y esto quizá pueda echar para atrás a más de un jugador. No es el juego más accesible, pero tampoco es un título imposible.
Un mundo pintado a mano
Un aspecto en el que triunfa por completo Afterimage es en su apartado artístico. Haciendo uso de un estilo visual pintado a mano, el juego de Aurogon Shangai triunfa y se desliga de otras propuestas del género. Su uso del color es llamativo y coherente, dando mucha personalidad a cada escenario a través del uso de distintas tonalidades, mientras que el diseño de sus escenarios es consistente y está cargado de pequeños detalles. Los diseños de los personajes y los enemigos también gozan de un gran nivel de detalle y son estéticamente preciosos, lo que nos deja con uno de los juegos más bonitos de lo que llevamos de año. A nivel técnico funciona a la perfección, si bien he encontrado algún que otro bug que, si bien no arruina la experiencia, sí que la empaña un poco.
Por último, a nivel sonoro no encuentro ningún tipo de pega. La banda sonora musical creada para el juego funciona realmente bien, y aunque algunos temas pueden llegar a hacerse algo monótonos, por lo general estos se amoldan a la perfección a cada zona y aumentan considerablemente la épica de los combates.
Conclusión: Un metroidvania clásico pero especial
Afterimage no es un juego que busque reinventar la rueda, pero tampoco es que necesite serlo: su diseño de niveles, su sistema de combate y su apartado artístico hacen de este un metroidvania tan clásico como especial. Por supuesto, hay ciertos elementos que podrían haberse mejorado, como es el caso de la historia o la dificultad, pero no hay duda de que si te gusta el género disfrutarás de lo lindo de este título.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.