Fecha de Lanzamiento
10/04/2024
Distribuidora
Versus Evil
Plataformas
PlayStation 5, Xbox Series, PlayStation 4, Xbox One y PC
Versión Analizada
Steam
¿Qué es lo que haríais en caso de sobrevivir a una guerra nuclear? Ya sabéis, el mundo quedaría en ruinas pero, al igual que las cucarachas, el ser humano acabaría encontrando la manera de salir adelante. Si vosotros estuvierais dentro de ese selecto grupo de supervivientes… ¿Intentaríais dar los pasos necesarios para recuperar la civilización? ¿Haríais lo posible por solventar los errores que llevaron al mundo a tal situación? ¿O seríais de los que echarían leña al fuego, intentando crear aún más caos? Si bien en nuestro día a día no tenemos que poner tal pregunta en práctica (al menos de momento), nunca viene mal experimentar con nuestras respuestas dentro de un buen videojuego. Si os hablo de títulos centrados en la supervivencia post-apocalíptica, seguramente el primer juego que se os venga a la cabeza sea Fallout, y no es para menos; la serie creada por Interplay y desarrollada en la actualidad por Bethesda se ha convertido en el estandarte del género gracias a su excepcional “worldbuilding”, su maravilloso componente rolero y su genial aproximación a la supervivencia en un yermo contaminado. Sin embargo… ¿Sabíais que antes de Fallout, Interplay dio forma a un videojuego similar conocido como Wasteland? Efectivamente, la serie protagonizada por los moradores de los refugios no fue la primera en jugar con la supervivencia post-apocalíptica, y ya os adelanto que tampoco será la última.

Si por algo destacan los desarrolladores independientes es por no tener las limitaciones creativas de los grandes estudios. La falta de  presupuesto se ve solventada por una inventiva arrolladora que otorga una personalidad única a los juegos, haciendo de los títulos indie auténticas piezas de autor alejadas del fenómeno triple A. Ciertos estudios amateur experimentan dando forma a títulos basados en otras franquicias más conocidas pero otorgándole su toque, y eso es precisamente lo que podemos encontrar en el juego del que hoy vengo a hablaros. A fin de cuentas, Broken Roads parte de una premisa tan conocida como interesante: sobrevivir al fin del mundo en una Australia diezmada, en la que una gota de agua lo puede cambiar todo. Mad Max y Fallout se dan de la mano en el nuevo juego de Drop Bear Bytes, una experiencia de rol añeja con un fuerte componente narrativo que aterriza en PC, Xbox One, Xbox Series X/S, PS4 y PS5. ¿Queréis saber qué tal está el juego? ¡Pues dentro análisis!

 

Un chico y su perro

La guerra lo ha cambiado todo, y Australia ha sido uno de los territorios que más se han visto afectados. Convertido en un yermo desolador, pocos son los que sobreviven a solas. La comida y el agua escasean, la electricidad es un bien al alcance de unos pocos y la criminalidad está a la orden del día. Entre los pocos asentamientos existentes en el yermo existe una red de comerciantes estable en la que aparece un día cualquiera nuestro protagonista, cuyo trasfondo varía en base a nuestras decisiones. Como si se tratara de un juego de rol tradicional, tras comenzar la partida tendremos que contestar a una serie de preguntas mediante las cuales adoptaremos una actitud concreta, lo que afectará en cierto modo a las respuestas que nos aparecen disponibles. Si bien he echado en falta algo más de flexibilidad y de variedad de opciones para crear a nuestro personaje, he de decir que he quedado bastante contento con el sistema de elección de diálogos, presentando una buena ramificación y una variedad admirable de opciones. Ahora bien, no se puede decir que la historia no cambie según el trasfondo (cosa que el juego da a entender en un primer momento), algo que me ha resultado un pelín decepcionante porque no invita a repetir la partida. En este sentido, nos encontramos ante una propuesta algo más lineal de lo que suele verse dentro del género.

¿Y qué hay de la historia principal? Pues bien, lo primero que tengo que decir de esta es que he tardado bastante en comprender ciertas ideas y giros debido a que la traducción española que presenta es nefasta. Encontramos así errores en el género, el número o el tiempo verbal, mientras que las frases sin sentido y mal traducidas son constantes. Creedme, si entendéis bien el inglés intentad jugarlo en ese idioma. Dejando esto de lado, lo cierto es que la historia resulta decente, presentando un elenco de personajes dinámico y un buen puñado de giros de guion interesantes. Aunque no se presenta un “worldbuilding” tan sólido como el de otros títulos, sigue resultando interesante indagar en las poblaciones, los clanes y los demás misterios que oculta el yermo australiano. Además, como fan de Mad Max, creedme que resulta un gustazo visitar una localización tan interesante y bien cuidada. En resumen, su historia está bien cuidada y plantea una odisea marcada por la supervivencia y por la desolación, además de por una traducción realmente nefasta.

 

Usando la violencia y la palabra a partes iguales

En cuanto al tratamiento jugable del título, nos encontramos ante una experiencia de rol en vista cenital de corte tradicional, lo que supone explorar mapas cerrados haciendo frente a toda clase de enemigos a través de un combate por turnos algo oxidado. En este, cada personaje realizará sus acciones de forma individual mientras aprovechan cualquier cobertura para ocultarse de los ataques enemigos. No solo las armas tradicionales nos ayudarán a acabar con los enemigos, si no que también podremos hacer uso de objetos a distancia como granadas. El movimiento en estas fases resulta algo estático, y lo cierto es que el sistema no termina de resultar intuitivo en ningún momento. Además, el título está ciertamente desbalanceado, haciendo que podamos quedarnos atascados en más de un combate. A estos problemas hay que sumar un diseño de misiones realmente anticuado y un sistema de desarrollo y progresión de personajes algo confuso, en el que se eliminan las clases convencionales en un intento de dar un soplo de aire fresco al proyecto. El resultado es una amalgama de habilidades y mejoras poco llamativas que nos llevan, en la mayoría de casos, a tener personajes muy similares entre sí. Parece claro que el sistema de combate y progresión está plagado de problemas, y por suerte no ocurre lo mismo con el sistema de exploración, el otro gran pilar sobre el que se sostiene el juego. Así, aunque la cámara resulta algo tosca en algunos escenarios, lo cierto es que resulta interesantísimo explorar sus escenarios. Como os comentaba en el apartado anterior, el sistema de diálogos ramificados es realmente bueno, y el juego invita a solventar los problemas a través de las conversaciones, pudiendo incluso llegar a completar misiones de esta manera.

En cuanto al tratamiento gráfico, nos encontramos un trabajo de dirección artística sorprendente y cautivador, que expone a la perfección la crueldad y la soledad presente en un entorno apocalíptico. Si bien la variedad cromática es realmente limitada (estando únicamente en pantalla tonos marrones y amarillentos apagados), lo cierto es que cada escenario cuenta con un nivel de detalle superior al de la mayoría de videojuegos de bajo presupuesto, demostrando el cariño y empeño que el equipo ha puesto por dotar al juego de un estilo único. Eso sí, las animaciones de los personajes resultan realmente estáticas y los modelos no están tan cuidados como los escenarios, siendo quizá estos los mayores problemas que presenta el apartado artístico del juego. En lo técnico cabe destacar la presencia de algún que otro bug puntual, mientras que el rendimiento se mantiene estable. Por último, el tratamiento sonoro resulta efectivo, presentando un uso de los efectos de sonido notable que permite construir una atmósfera única. La banda sonora musical se amolda a la perfección al entorno, si bien no resulta realmente trascendente.

 

Conclusión: Buenas ideas mal ejecutadas en un RPG tan interesante como tedioso

Broken Roads es un proyecto interesante que demuestra un gran nivel de calidad en cuanto a construcción de mundo y desarrollo de diálogos se refiere, funcionando a ratos mejor como una aventura gráfica que como un juego de rol. Intentar adentrarse en este segundo género solo le ha causado problemas y comparaciones, estando muy por debajo de otros representantes del género, tanto de alto como de bajo presupuesto. Un título que puede gustar por su ambientación, su historia y su dirección artística, pero que peca al presentar un diseño de misiones realmente anticuado y una jugabilidad poco memorable.

Sinopsis
Broken Roads es un RPG ambientado en un inmenso desierto australiano posapocalíptico, con una narrativa envolvente y un sistema de moralidad innovador. Sobrevive, forja lazos y enfrenta desafíos que determinarán tu intrépido y fascinante viaje por tierras salvajes.
Pros
Historia cuidada e interesante, repleta de buenos personajes y entornos llamativos
Su exploración funciona bien y su sistema de diálogos engancha
Contras
Su traducción al español es absolutamente nefasta
El diseño de misiones y el sistema de combate resultan anticuados y defectuosos
6.7
Aceptable
Antonio Gallardo

Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.