Conociendo amigos
Fireside nos lleva al papel de un mercader llamado Knick cuyo barco se ha hundido y ha llegado a una isla llena de simpáticos personajes. Conocerlos y conocer sus historias será lo que nos vaya haciendo avanzar y acabemos llegando a una especie de refugio espiritual que se convertirá en nuestro hogar pero que necesita una buena mano de pintura.
La cantidad de personajes y lo variopintos que son hace que el juego se vuelva muy interesante. Conoceremos, por ejemplo, a una sirena que no puede hablar y a otra que es invertida, con la parte humana abajo y la de pez arriba; a una capitana pirata que busca arreglar su barco; A una gota de agua que busca a su madre porque se ha perdido, etc. La mayoría de ellas son historias disparatadas que nos harán reír y encariñarlos con los personajes que nos vamos cruzando. Además, de un tiempo, también conoceremos la historia del propio Knick, por supuesto.
A nivel narrativo, todo se explica a partir de las conversaciones con los personajes, y se basa sobre todo en la teoría de un pequeño acto de bondad puede cambiarlo todo, por lo que las historias, en cierto modo, tendrán la misión de ser fábulas que, a parte de entretenernos, nos enseñen sobre la vida, los modos de ser, el bullying, y otros temas del estilo.
En general, es un modo de contar la historia que me gusta y me han encantado los personajes.
Mercadeando
Knick es un mercader, por eso en Fireside conseguiremos llegar al corazón de los personajes dándoles cosas que les interesan a cambio de otras cosas que les interesan a otros, y así creando una red de mercadeo. Nos moveremos a través del mapa poco a poco, pudiendo ir a una hoguera cada día. En la hoguera podremos hacer hasta cinco acciones, ya sea hablar con los personajes, hacer intercambios con ellos, craftear objetos o cocinar.
Cuando vayamos andando por el mapa, conseguiremos ciertos ingredientes y materiales que, normalmente, se nos indican antes de ir en esa dirección, también podemos encontrar eventos que nos hagan tomar decisiones o coger misiones a largo plazo. Una vez en una hoguera, podremos hablar con cualquier personaje que tenga un bocadillo con el símbolo de hablar, y en esas conversaciones, normalmente, nos pedirán favores o cosas que necesitan y que podremos darles más adelante cuando las tengamos.
Cada vez que ayudemos a un personaje o hagamos un intercambio de algo que quiera, recibiremos unos puntos, y cuando la barra de esos puntos se llene recibiremos energía del alma, una moneda con la que podremos ir mejorando el santuario, lo que será nuestro hogar. Tendremos que ayudar a un espíritu malhumorado llamado Knack a restaurar las instalaciones del santuario y hacerlo lo más acogedor posible para que nuestros amigos quieran visitarnos. Mejoraremos el santuario gastando energía del alma junto con materiales varios que nos pedirá cada una de las localizaciones. Los materiales los podremos ir mandando a través de las hogueras que tengan pequeños santuarios, ya que, cuando pasen cinco días se nos mandará directamente a descansar al santuario y solo podremos salvar dos de los objetos que tengamos en el inventario, por lo que aconsejo medir bien el tiempo y gastar los objetos que no necesitemos en comerciar.
También podremos craftear objetos, haciendo recetas de cocina, por ejemplo. En cada hoguera tendremos una especie de wok donde podremos cocinar y crear nuevas cosas a raíz de algunos materiales. Las recetas las iremos consiguiendo hablando con las personas de las hogueras, por lo que cada vez tendremos más y podremos hacer objetos más elaborados para intercambiar. Cada objeto tiene un valor que se pone en una balanza, normalmente nos aceptarán los tratos beneficiosos para ellos si o si, el resto será cuestión de suerte.
Resumiendo, tendremos que ir de hoguera en hoguera conociendo gente, intercambiando objetos, consiguiendo materiales para mejorar el santuario y avanzando en la historia gracias a ayudar a los personajes que vayamos conociendo. Una jugabilidad tranquila y relajante.
Pintado a mano
El estilo de arte pintado a mano es uno que da siempre la sensación de más relajación y visualmente queda precioso, y eso en lo que nos encontramos en Fireside, donde todos los personajes tienen un peculiar diseño y recuerda un poco a dibujos hechos por niños, lo cual es más divertido y llamativo. Además, la elección de los colores está hecha para que relajemos la vista, sin tonos chillones, más bien oscuros tirando a apagados, más aún en las hogueras por la noche. Sobre el rendimiento gráfico diré, que al menos la versión de PC que es la que yo he probado, va fenomenalmente, no he visto bugs ni he tenido problemas de ningún tipo en este aspecto.
El único problema que le veo a nivel técnico es el tema de los guardados, el guardado es automático, como en muchos juegos, pero el problema es que no se guarda en cada hoguera, sino que tienes que terminar un ciclo entero para que se guarde, lo cual hace que no puedas dejar el juego en cualquier momento, sino que haya que esperar.
En cuanto al sonido, la OST es bastante tranquila y serena, no he localizado muchas melodías, pero las que hay son correctas. Es una música para tener de fondo, la verdad es que muchas veces me he encontrado que no le estaba haciendo ni caso, es algo así como un hilo musical para acompañar la experiencia pero no es imprescindible.
Conclusión
Fireside es un juego de aventura tipo cozy y narrativo donde, llevando a un mercader, tendremos que conocer las historias de los personajes que nos encontramos, intercambiando objetos con ellos y acumulando materiales que nos hagan falta para reconstruir un santuario que será como nuestro hogar. Es una experiencia tranquila, relajada, y perfecta para echar el rato, además de ser una experiencia bonita visualmente. El juego lo tenemos completamente en español, por lo que es perfecto para todo tipo de jugadores.
Yukop_
He visto más animes de los que puedo recordar. Con un mando entre las manos desde que tengo uso de consciencia. Maestra y futura especialista en Asia Oriental. Tengo demasiados hobbies para el poco tiempo que tengo.