[Análisis] Mamiya – Complete Collection

El fin del mundo es algo que se profetizado varias veces, en 1999, en 2012, en 2021, etc… diversas conspiraciones internacionales nos han hecho creer infinitas veces que esto va a pasar, tarde o temprano, y es un concepto que algunos abrazan y otros son escépticos. No cabe duda que tarde o temprano acabará pasando algo que acabe con el mundo tal y como lo conocemos y, aunque puede ser que ninguno de nosotros lo vaya a presenciar, es algo que a muchas personas sobrecoge y preocupa. En este concepto nos encontramos con MAMIYA, una visual novel que se centra en la caótica vida de cuatro jóvenes en el año que se profetiza el fin del mundo, una joya de historia bastante oscura que nos transportará un poquito al pasado y a la mente adolescente.

 

MAMIYA

Nos encontramos en Tokio, concretamente en un funeral donde cuatro adolescentes y tu, como personaje, asisten para dar el último adiós a Natsume, un amigo en común de todos ellos. Obviamente los cuatro personajes están bastante contrariados y no saben muy bien como comportarse en esta situación. Es después de este momento que nos concentraremos en la vida de alguno de los cuatro adolescentes y conoceremos un poco más que pasa con ellos, aunque hay una cosa que tienen en común: todos ellos acaban conociendo a un ente llamado MAMIYA que, además, es diferente para cada uno de los personajes, pero todos se llaman igual, y este ente acaba llevándoles, de una forma u otra, a la muerte, algo que nosotros, como personajes del juego, queremos evitar a toda costa.

Contamos con un estudiante modelo que le cae bien a todo el mundo pero solo porque inhibe su verdadera personalidad y deseos, escondiendo un secreto que no quiere que nadie sepa; también un estudiante macarra, que siempre está peleándose en las calles pero que trabaja todo lo duro que puede para sacar adelante a su hermana pequeña; también hay un chico decepcionado de la vida que vive entre lugares de juego donde dejarse el dinero que, además, consigue engañando y acostándose con mujeres mayores que él; y, por último, tenemos a un chico de una familia con dinero, bastante normal, pero que parece haberse criado de una manera que no le deja entender los problemas del mundo, por lo que su personalidad no acaba de encajar en la sociedad.

Por supuesto esto es el comienzo de la historia y tendremos que ver las cuatro historias antes de poder pasar al siguiente capítulo, un capítulo donde nosotros como protagonistas intentaremos evitar que los cuatro personajes mueran, todo mientras nos enfrentamos a este ente conocido como MAMIYA y que no comprendemos muy bien ni de donde viene ni cual es su objetivo. La segunda parte del juego es un poco más larga que la primera y también conoceremos a personajes nuevos, cuatro personajes más que, en este caso, conocemos en el funeral de MAMIYA y que deciden ir a vivir juntos para compartir su pena y dolor ya que son las únicas personas que conocen que pueden ver a MAMIYA.

El juego tiene, después de esta, una tercera parte que ha salido como DLC y que da cierre completo a la historia y donde tendremos que descubrir todo el misterio alrededor del ente conocido como MAMIYA. El juego cuenta con 20 finales entre buenos, malos y no tan malos y nos puede dar hasta 50 horas de juego si queremos conseguir cada uno de ellos y destripar al completo la historia que nos ponen por delante con todos sus entresijos.

 

Interfaz simple

MAMIYA es lo más simple en jugabilidad que os podéis encontrar, solo hay que fijarse un poco en su interfaz que es simple no, lo siguiente. En la interfaz tenemos una banda negra donde va saliendo el texto y tenemos pocas opciones: guardar, cargar, hacer que el texto avance en automático, saltar el texto porque ya lo hayamos leído, ver el log de conversaciones y la configuración. También tenemos un guardado y cargado rápido como es clásico en las novelas visuales. Eso si, no nos encontraremos con diagramas de flujo, ni es un juego de citas por lo que no tendremos niveles con cada personajes, nada por el estilo, todo se mantiene sencillo y la verdad es que para disfrutar de su historia, que es lo importante, no necesitas más.

Luego en el menú principal si tenemos algunas opciones más. Lo primero es que tenemos un selector de capítulos, aunque solo se desbloquea cuando hemos pasado la primera parte. Este selector nos permitirá decidir si queremos repetir alguna parte concreta, como avanzamos en la historia, etc. Ya que el juego cuenta con historias secundarias no necesarias para avanzar pero que harán que nos enteremos mucho mejor de todos los secretos que esconde. También tenemos un selector de CGs que viene muy bien para disfrutar de nuevo de nuestras imágenes favoritas, a la vez que un selector de música para poder disfrutar de las melodías que componen el título.

Por último, el juego cuenta con extras que se desbloquean cuando terminas el segundo capítulo del juego, estos extras nos llevarán a “leer” unas páginas de historias cortas donde veremos diferentes momentos en las vidas de los personajes, momentos sin importancia vital en la historia pero que nos ayudarán a conocer mejor a los personajes del juego. Contamos con 16 de estas mini historias de las que podremos ir disfrutando cuando queramos.

En cuanto a la jugabilidad, no hay mucho que decir, leer y tomar decisiones cuando nos las pongan delante es lo único que podremos hacer. Habrá decisiones más livianas y otras más complejas, recomiendo guardar siempre antes de las decisiones por si acabamos por un camino que no nos interesa o no es lo que buscábamos.

 

Un diseño mudo

El diseño de personajes y CGs de MAMIYA viene a cargo de Kokoroten, que se especializa sobre todo en el diseño de chicos guapos o bishonen, y hace su trabajo de manera impecable. El juego se concentra en hacerte llegar la personalidad de los personajes en su diseño y los cambios de expresión en los CGs que pueden llegar a ponerte los pelos de punta. En cuanto a lo demás, como decía, poca cosa ya que la interfaz es super sencilla, pero por lo menos podemos disfrutar de 180 CGs diferentes, que te dice pronto.

En cuanto al sonido, me ha dolido bastante que no sea un juego doblado, ya que estaría genial escuchar ciertas escenas en bocas de actores, pero por lo menos lo compensa en la música, contando con una buena lista de tracks, algunos muy memorables y llenos de sentimiento. Destacan sobre todo los que tienen letra y todos están muy bien escogidos para las situaciones en las que aparecen, es una auténtica maravilla. Como muestra os dejo una de mis favoritas:

 

Conclusión

MAMIYA no es un título para todos los públicos, es desconcertante y hasta casi el final no eres capaz de conectar todas las piezas, pero es una historia que atrapa y que te hace querer más y más hasta que todos los hilos están cortados y puedes entender todo lo que has ido viendo durante tu viaje, porque más que una partida, diría que es un viaje en el que te embarcas y conoces a personas que no lo están pasando nada bien por una cosa o por otra, un reflejo de lo que los problemas hacen en la mente de quienes los sufren.

El juego está en inglés, aunque se entiende bastante bien ya que no usa un vocabulario complejo.