![[Análisis] Outcast: A New Beginning [Análisis] Outcast: A New Beginning](https://gaminguardian.com/wp-content/uploads/2024/03/Outcast-A-New-Beginning.png)

El regreso de los clásicos de culto está a la orden del día, y es perfectamente visible gracias al regreso de series tan aclamadas como aquella de la que hoy vengo a hablaros. Venga, sed sinceros: ¿Cuántos de vosotros conocíais Outcast? Y no, no me refiero al cómic de Robert Kirkman, si no al videojuego de acción y mundo abierto lanzado en 1999. Realizado por el estudio belga Appeal, el título supuso un interesante paso adelante en la construcción de los escenarios abiertos y en el desarrollo de los juegos de acción, planteándose como una muy interesante aventura de ciencia ficción heredera de los BDs del género y de las grandes historias de la literatura europea. El juego, sin embargo, no consiguió alcanzar las cifras de ventas necesarias, llevando al cierre de Appeal y a la cancelación de su anticipada secuela. Décadas después, los directores del título original consiguieron hacerse con los derechos de la IP y, tras negociar con THQ Nordic, pudieron sacar adelante tanto un remake del clásico como una secuela adaptada a las tendencias actuales del público y de la industria. Así pues, tras tantos años de espera por fin tenemos entre nosotros Outcast: A New Beginning, disponible en PS5, Xbox Series X/S y PC, y tras haber podido completar su historia principal, hoy vengo a contaros qué tal está el juego y si merece o no la pena darle una oportunidad. Por tanto, sin más dilación… ¡Dentro análisis!
¿Dónde estoy, y por qué tengo un jet-pack?
Cutter Slade es… Un momento, ¿Quién es Cutter Slade? Eso es precisamente lo que se pregunta el protagonista de esta historia, un misterioso aventurero con nociones militares y científicas que aparece en un enorme y desconocido planeta sin ningún recuerdo. Su memoria ha desaparecido, si bien en su interior aún quedan nociones de la persona que era antes, recordando como usar ciertas armas o el hecho de que aún puede comunicarse en diversos idiomas. Tras explorar brevemente y encontrarse con una nativa del planeta, nuestro héroe pronto descubre que se encuentra en el planeta Adelpha, un hermoso y exótico territorio amenazado por un temible ejército de robots asesinos. Slade pronto decidirá explorar el mundo con el objetivo de ayudar a los nativos, recuperar sus recuerdos y descubrir la verdad detrás de una misteriosa niña humana que se le aparece en sueños y que parece guardar un cierto parentesco con él. Sobre el papel, la idea de explorar un planeta alienígena mientras nos sumergimos en la cultura nativa y ayudamos a defender el territorio de los ejércitos suena realmente bien, pero el juego no termina de configurar una historia lo suficientemente dinámica e interesante como para mantener la atención del espectador. Si bien la construcción de mundo y los distintos entornos que vamos conociendo en Adelpha resultan interesantes y bien escritos (la cultura de los Talans está repleta de historias y detalles que dan mucha vida al juego), encontramos un grave problema tanto en el desarrollo del personaje principal como en el ritmo de la historia principal.
A pesar de tener uno de los nombres más molones de la industria, Cutter Slade no deja de ser un intento de protagonista socarrón a lo Nathan Drake que no termina de tener tanto carisma como sus grandes referentes. El uso del humor y su actitud no casan realmente ni con su conflicto interno ni con los problemas que se va encontrando en Adelpha, generando un cierto rechazo que impide disfrutar jugando en su piel. Por otro lado, la historia no deja de proponer misiones aburridas cuyas líneas argumentales son, cuanto menos, flojas, sintiendo que el título está plagado de relleno y de un contenido un tanto insulso. Esto podría entenderse hasta cierto punto en un juego largo, pero es incomprensible si tenemos en cuenta que el título no alcanza las 7 horas de duración. Por su parte, Outcast: A New Beginning llega a nuestro territorio haciendo gala de una más que decente traducción al castellano, impidiendo así que la barrera del idioma pueda suponer un problema para ningún jugador.
El espacio, la última frontera
Donde el juego sí que consigue enganchar bastante más es en su apartado jugable, pues nos pone a explorar un amplio mundo repleto de misterios y detalles con un sistema de movimiento sorprendentemente cómodo e intuitivo. Tomando nota de los grandes juegos de la pasada generación, Outcast: A New Beginning se presenta en sociedad como una aventura de acción y mundo abierto en 3ª persona, permitiendo a los jugadores hacer uso de diversas habilidades especiales, armas alienígenas y aparatos extraídos de las mejores historias de ciencia ficción. Curiosamente, nuestro mejor amigo a lo largo de la aventura no será otro más que un jet-pack que tendremos que ir mejorando y con el cuál podremos sortear obstáculos, esquivar ataques enemigos y explorar de forma más dinámica. Genuinamente he disfrutado de la exploración del entorno, pues a pesar de sentirse en muchos aspectos como un mundo abierto convencional (presentando ideas un tanto desfasadas dignas de los juegos de Ubisoft de la generación PS4/Xbox One) el movimiento, la variedad de enemigos y las constantes mejoras que iremos consiguiendo invitan a explorar y descubrir nuevas zonas. El sistema de combate puede resultar de primeras algo ortopédico, especialmente si nos fijamos en el combate cuerpo a cuerpo, pero lo cierto es que su sistema de apuntado acaba resultando satisfactorio. No esperéis nada revolucionario, pues toma prestadas múltiples ideas de otros juegos similares, pero no cabe duda que en Appeal Studios han hecho bien su trabajo a la hora de dar forma a una aventura entretenida. Bien es cierto que el título adolece de problemas de ritmo y que sus misiones pueden resultar algo repetitivas, pero en líneas generales el juego consigue entretener y enganchar gracias a su jugabilidad y su buen diseño de niveles.
Pasando a hablar del tratamiento artístico y visual del juego, he de decir que me sorprendió gratamente el trabajo realizado en el ámbito de diseño artístico. El mundo de Adelpha es hermoso, y está dotado de una gran variedad de paisajes y entornos que merece la pena conocer. Sus habitantes y el resto de seres que iremos conociendo en nuestra aventura también gozan de buenos diseños que se ven trasladados a la perfección dentro del juego. Quizá no se trata de un juego triple A, algo perfectamente visible en ciertas animaciones y en los tiempos de carga, pero no se puede negar que en Appeal han hecho un excelente trabajo a la hora de hacer del título una experiencia vistosa y visualmente atractiva. En cuanto al tratamiento técnico, la versión de PS5 no me ha dado grandes problemas. Su rendimiento se ha mantenido estable en todo momento, y salvo algún bug puntual no he encontrado nada digno de queja. El sonido también se ha cuidado bastante, pues aunque la banda sonora resulta algo olvidable, su doblaje al castellano y sus efectos de sonido resultan ideales.
Conclusión: El regreso triunfal de una obra de culto
Outcast: A New Beginning es un doble A de acción y mundo abierto interesante, que consigue plantear una jugabilidad decente y un apartado artístico y sonoro dignos de mención. No es un título revolucionario ni pretende serlo, estando más orientado en ofrecer una experiencia amena que pueda ser disfrutada por todo el mundo. Quizá un mayor trabajo en lo narrativo le habría sentado bien al juego, y lo mismo se podría decir de su ritmo y su esquema de misiones, pero lo que está claro es que es un juego que cualquier amante de la ciencia ficción podrá disfrutar.

Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.