[Análisis] Poisoft Thud Card

De la mano de POISOFT, llega a nuestras Nintendo Switch el juego Poisoft Thud Card, un juego de cartas nunca antes visto, ya que el Thud ha sido inventado exclusivamente para este juego.

Roba y descarta

En este juego de cartas no encontraremos nada interesante, será un simple juego más en el que flojean las normas. Parece muy sencillo jugar a Thud: debes ir echando cartas al centro que tengan el mismo palo o sean el mismo número que la última carta que haya sido echada, en caso que no tengamos ninguna que cumpla con los requisitos en mano, robaremos una carta, si está nos sirve, la descartamos al centro, sino, pasamos. Hay cartas que tienen efectos especiales, como puede ser el 2, que obliga a tu rival a robar dos cartas; el Joker o el 8, que permiten descartar cualquier tipo de carta tras ellas; el 5, que obliga a tu rival a que su siguiente descarte sea inferior a este número y otras cartas más. Para ganar, simplemente debes tener el mismo número de cartas en tu mano que el número que indica la última carta en el centro, en caso que así sea, debes decir «Thud» y ya has ganado, por lo que es posible ganar nada más empezar la partida.

Poisoft Thud Card nos ofrece tres «distintos» modos de juego: juego contra la CPU, juego online o juego por comunicación inalámbrica, pero de estos modos solo he podido probar el primero, ya que por Internet no he encontrado a absolutamente nadie para poder jugar y no dispongo de dos Nintendo Switch en casa para poder probar el tercero. Dicho lo cual, me parece un juego demasiado sencillo, ya que no debes pensar en absolutamente nada, tan solo con apretar el botón A cada vez que sea tu turno, acabas ganando la partida, ya que como he dicho antes, el juego flojea por sus normas, y eso provoca que en la mayoría de ocasiones únicamente podamos sacar una carta de todas las que tengamos. También hay un sistema de rankings y puntuaciones, pero no juega la suficiente gente para que esto llegue a ser un incentivo.

Apartado audiovisual

Respecto al apartado gráfico del juego, aun siendo malo, es lo mejor que puedo sacarle, tiene unas interfaces sosas, un menú marcado por un simple recuadro negro con dibujitos en las esquinas. Los fondos de la pantalla principal no convencen, y la mesa de juego también es de lo más simple que hay, además de poner todas las cartas rectas en vez de darle realismo y sacar algunas por los bordes de otras o algo. Pero bueno, aun con todo eso, las cartas y los palos están bien dibujados.

La banda sonora es estresante, parece una misma canción de minuto o minuto y medio escuchada en bucle, y cuando estás jugando es más de lo mismo, pero con otra canción, ni siquiera hay efectos de sonido específicos para todas las acciones de juego.

Conclusión

Sin duda, no recomendaría este juego a nadie, por mucho que te gusten los juegos de cartas, no me parece bueno ni atractivo en ningún aspecto, es una propuesta que flojea en prácticamente todo y que es tan sencillo como no dejar de pulsar un botón para ganar las partidas. Además, no podremos jugar contra otras personas online ya que encontrar partida puede ser un suplicio o incluso no llegues a encontrarla, y tampoco podremos jugar con amigos a menos que ellos también dispongan del juego y de una Nintendo Switch.