En este sentido, creo que uno de los exponentes más claros de esta premisa es el legendario Dungeons and Dragons, en donde todo se decide a través de las icónicas tiradas de dados en conjugación con las estadísticas de nuestros personajes. Muchos han intentado imitar el estilo de esta mítica franquicia, y pocos han conseguido estar a su altura. Sin embargo, el título del que hoy vengo a hablaros ha despertado el interés de muchos jugadores gracias a su marcada vinculación con los juegos de mesa y, más concretamente, con D&D por su movimiento en tablero, su carácter de exploración y su uso de dados. Este juego no es otro más que Sea Horizon, un interesante juego indie desarrollado por 45 Studio y distribuido por SOFTSTAR que llega por fin a PS5 tras un decente paso por Steam y Switch. ¿Queréis ver qué tal está el juego, y si merece la pena darle una oportunidad? ¡Pues dentro análisis!
Un grupo de aventureros dispuestos a adentrarse en la oscuridad
Hablaros de la historia de Sea Horizon sería poco interesante, puesto que el juego opta por dejar la narrativa en un segundo plano. Lo interesante del juego radica en la sensación de descubrimiento, en avanzar zona a zona mientras disipamos la niebla de desconocimiento, por lo que cualquier tipo de narrativa queda limitada a un escueto modo historia. Este funciona como una especie de tutorial en donde tendremos que completar tres zonas mientras conocemos el trasfondo de cada uno de los personajes. Esto es poco convencional, si bien creo que, en líneas generales, funciona. A fin de cuentas, la historia que se plantea peca de ser poco interesante, por lo que considero que ha sido una buena decisión reducirla para dar una mayor importancia a la jugabilidad. ¿Buscáis un RPG centrado en la trama? Pues entonces Sea Horizon no es vuestro juego. ¿Queréis haceros con un juego de rol de los de la vieja escuela, donde la historia es construida a través de las acciones? Pues seguid leyendo, que creo que este puede ser vuestro título.
Donde el juego sorprende y triunfa es en la buena cantidad de personajes controlables que incluye, ya que altera levemente los arquetipos clásicos de las historias de fantasía para adaptarlos al mágico y misterioso mundo del juego. El resultado es una lista de aventureros original y muy variada, lo que invita a que se experimente con el equipo, las clases y la exploración en general. Quizá me habría gustado que se explorara más la construcción de mundo, pues creo que el universo en el que se desarrolla el juego cuenta con los elementos necesarios para atrapar a cualquier fan de la fantasía… Pero estos no se aprovechan en ningún momento, dando pie a que su universo se sienta muy plano y poco interesante. En resumen, el objetivo del juego no es que los jugadores se lancen a conocer una historia profunda y repleta de matices, si no que se embarquen en una aventura muy personalizable por el puro placer de disfrutar de su sistema de exploración y de combate. Pero… ¿Qué tal funcionan estos sistemas? Bueno, para eso es necesario hablar de la jugabilidad del título.
Y los dados han decidido que…
Sea Horizon me sorprendió bastante por su curiosa mezcla de elementos RPG, pues consigue unir tanto ideas de los juegos de rol de tablero como ideas de videojuegos de rol. Vale, quizá esto haya podido confundir a más de uno, pero dejad que os lo explique: al igual que en cualquier juego de mesa de aventuras, tendremos que avanzar a través de un tablero dividido en figuras, y pasar de una en una consumirá energía. En este sentido, tendremos que organizarnos bien para seguir la ruta más adecuada, evitando desvíos e infortunios. Sin embargo, esto no es tan sencillo, pues muchos de estos desvíos presentan eventos aleatorios y divertidos que no solo expanden las posibilidades del juego, si no que pueden aportar una sustanciosa ventaja de cara a los futuros enfrentamientos. Esa incertidumbre de no saber qué vamos a encontrar es, sin lugar a dudas, uno de los puntos más efectivos del juego, haciendo que sea refrescante y entretenido el desplazarse a través del mapa descubriendo los misterios que se presentan.
La progresión de los personajes es sorprendentemente sencilla, quedando reducida a una selección de habilidades que, a decir verdad, no está especialmente equilibrada (muchas de estas están rotas, y hacen que sea muy fácil avanzar) y un conjunto de estadísticas que no inventan nada nuevo. Este sistema funciona, sí, pero es cierto que se echa en falta una mayor profundidad o, por lo menos, algo más de creatividad. Por último encontramos los combates, que sí que presentan una originalidad muy destacada al mezclar el uso de cartas con dados. Quizá esta unión pueda resultar algo rara al principio, pero consigue triunfar al aportar a los combates un cierto componente de RNG que los vuelve bastante adictivos. Así, al principio de cada turno se lanzarán unos dados que decidirán los puntos de acción que tendremos. Estos se dividen en varias categorías, y cada carta necesita de un número determinado de puntos para poder ser utilizada. No es el sistema más complejo del mundo, pero es muy divertido tanto en los combates convencionales como en los combates contra los jefes de turno. Cabe destacar que no nos encontramos ante un juego especialmente extenso, pudiendo ser completado en unas 5 horas.
Una aventura marcada por la sencillez
La vinculación de Sea Horizon con los juegos de mesa convencionales no solo se limita a sus mecánicas de juego, si no que también se presenta a través de su tratamiento artístico y gráfico. Así, los personajes del juego presentan un diseño bastante minimalista y simplista que busca imitar las clásicas figuras de juego de mesa, lo que funciona dentro del contexto… Pero no quita que pudieran haber estado algo más trabajados, ocurriendo algo similar con sus estáticas animaciones. El movimiento a través del mapa es rígido, algo que cuadra con esa vinculación antes citada. Por otro lado, los fondos y los escenarios presentan un trabajo decente, si bien vuelven a caer en una excesiva simpleza. Un apartado gráfico que no es para nada puntero y que peca de ser extremadamente minimalista, a pesar de que no presenta fallos del estilo de los dientes de sierra.
Por otro lado, a nivel técnico el juego sí que presenta una fluidez excelente y una nula presencia de bugs o glitches, dando pie a una experiencia cuidada y muy orgánica. El sonido del juego también demuestra un gran nivel de cuidado, pues su banda sonora engancha y consigue amoldarse a la perfección a la ambientación del juego.
Conclusión: ¡Tierra a la vista!
Sea Horizon es un juego que engancha gracias a sus adictivas mecánicas, pero que sorprende por su simpleza. No es casualidad de que el título se lance a precio reducido, pues nos encontramos ante una obra poco ambiciosa que busca recrear un estilo de juego muy vinculado al ámbito del rol de tablero. Creo que es una experiencia más que decente a la que se le puede pedir más, y que más de un jugador amante del género disfrutará.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.