De hecho, algunos juegos llevan esta conexión a lugares insospechados, experimentando con el formato para dar rienda suelta a obras “pastiche” en las que todo funciona tanto como homenaje como creación original. Es el caso, por ejemplo, de Resident Evil VII, que se alejaba del terror clásico para sumergirse en una propuesta mucho más cercana al cine slasher del estilo La Matanza de Texas o Las Colinas tienen Ojos. Otro gran ejemplo de esta conexión cinematográfica es, precisamente, el título del que hoy vengo a hablaros. Y es que Someday You’ll Return sorprendió a propios y extraños al presentar un juego de terror sin igual, que planteaba algunas ideas relacionadas con grandes nombres de la industria del cine como Evil Dead. Tras varios años desde su lanzamiento original, ahora ve la luz la edición Director’s Cut, que busca ampliar y mejorar todo lo que hizo grande a la primera versión del juego. ¿Queréis ver qué tal ha salido la cosa? ¡Pues dentro análisis!
Una extraña desaparición
La historia de Someday You’ll Return nos traslada a los recónditos y profundos bosques de la República Checa, lugar en el que se encuentra la última posición conocida de Stela, la hija de nuestro protagonista, Daniel. Algo ha atrapado a Stela, y Daniel se sumergirá en los entornos más oscuros de Europa del Este para hallar a su hija… Incluso si ello conlleva rozar el límite entre la locura y la cordura. Si bien la trama parte de una premisa algo cliché y ya vista en otros juegos del género (siendo más que clara la inspiración de Silent Hill), el juego consigue presentar una trama absolutamente interesante e intensa, que si bien peca de tener un ritmo algo irregular esta consigue plantear una serie de ideas absolutamente efectivas, destacando especialmente en lo referente al tratamiento de las fuerzas antagónicas: ritos de corte satánico, brujería y ocultismo se dan la mano en una versión retorcida de los mitos eslavos que, la verdad, le sienta de lujo al juego, dándole un toque distintivo y especial.
Si bien el juego se centra principalmente en la figura de Daniel y, en menor medida, de Stela, también hay cabida para la presencia de personajes secundarios que irán surgiendo a lo largo y ancho de nuestra aventura. Podremos (o no) ayudarlos, y si bien plantean alguna que otra idea interesante, lo cierto es que no se profundiza mucho en ninguno de estos, siendo poco memorable el casting de personajes. El terror que se aborda en el título sí que resulta bastante funcional, y nos llevaremos más de un susto durante nuestro recorrido por las tierras checas malditas. Cabe mencionar que el juego llega a nuestro territorio perfectamente traducido al castellano, lo que es de agradecer.
Nada de acción, solo terror
A nivel jugable, Someday You’ll Return se plantea más como una especie de walking simulator con tintes de sigilo que como un survival horror, evitando así el uso de armas y otra clase de elementos ofensivos. Esto hace que, por un lado, el juego se convierta en una experiencia más que terrorífica, haciéndonos sentir indefensos durante la mayor parte del tiempo, mientras que por otro lado esto puede hacer que el título se acabe convirtiendo en una experiencia algo más aburrida. Ya os comentaba que el ritmo de la historia se resiente especialmente en un par de momentos concretos, y lo cierto es que esto ocurre también en el apartado jugable: estaremos constantemente repitiendo las mismas ideas (escondiéndonos de enemigos, leyendo notas y diarios, creando pociones…), y aunque el juego recompensa la exploración, su estructura no invita mucho a perdernos en su mundo. Lo que sí que se recompensa, y está muy bien llevado, es el tema de los mensajes y los secretos del juego. Para que os hagáis una idea, en este título existen ciertas mecánicas secretas que tienen un papel crucial en lo referente al devenir de la historia, por lo que deberéis estar atentos a elementos tales como el teléfono.
Los elementos de sigilo que plantea el juego no están muy bien llevados, y su falta de profundidad hacen que sean uno de los apartados más tediosos y repetitivos de todo el juego. Cuando os digo que el juego tiene problemas de ritmo, en parte me refiero a la forma en la que extiende y repite las secciones de sigilo. Es algo que está muy desequilibrado, y que no se ha alterado para nada en esta nueva edición. Por supuesto, además de fases de sigilo iremos encontrando puzles y, aunque están mejor planteados, lo cierto es que también tienen mucho margen de mejora. La exploración es un apartado mucho más trabajado e interesante, puesto que el juego evita tener marcadores de señalización para dejar que el jugador se pierda. Las únicas guías visuales se encuentran dentro del mismo escenario, proponiendo una experiencia absolutamente inmersiva e interesante. En definitiva, el título nos da una de cal y otra de arena, manteniendo una experiencia excesivamente fiel a la versión original.
¿Qué ofrece la Director’s Cut?
A nivel visual, nos encontramos un título de terror que no pierde sus raíces de bajo presupuesto, algo que se refleja en sus texturas de baja calidad (especialmente visible la espesura del bosque y en ciertos objetos) y en sus animaciones algo robóticas. Sin embargo, en este apartado pesa más lo bueno que lo malo, puesto que esta nueva versión mejora bastante lo visto en la original: se ha mejorado la resolución del título y la iluminación, además de que se ha estabilizado su rendimiento. En PS5 se han incluido dos modos de visualización, uno centrado en la calidad visual (alcanzando hasta los 4K a 30 FPS) y otro centrado en el rendimiento (manteniendo de forma estable los 60 FPS), algo de agradecer. En definitiva, se ha realizado un gran trabajo en lo referente a las novedades gráficas, adaptando de una forma más que satisfactoria el título a PS5, pues incluso hace uso de las funciones hápticas del mando de la nueva consola de Sony.
Las novedades de esta versión no acaban aquí, puesto que se han corregido una enorme cantidad de errores (estando esta versión mucho más pulida que la original), se han añadido nuevos puzles e incluso un nuevo final. Por último, a nivel de sonido el título mantiene el altísimo nivel que ya ofrecía la versión original, destacando especialmente tanto su doblaje como su dirección de sonido. Esta es crucial para la ambientación del título, pues ayuda a convertir esta en una experiencia absolutamente terrorífica y adictiva.
Conclusión: La mejor versión de un juego de terror decente
Someday You’ll Return: Director’s Cut es la versión definitiva del que es un más que decente juego de terror, trayendo consigo una serie de novedades que, si bien no modifican la experiencia original, sí que la mejoran lo suficiente como para justificar su compra. Esto no quita que el juego no siga presentando problemas, pero creo que la experiencia es lo suficientemente interesante como para que los amantes del terror se lancen a darle una oportunidad.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.