La conocida franquicia desarrollada por Frozenbyte vuelve con una nueva entrega que nos llegará gracias a la colaboración con Modus Games para PlayStation 4, Nintendo Switch, PC y Xbox One el próximo 8 de octubre de 2019.
Trine 4: Nightmare Prince es el nuevo y muy esperado capítulo de la saga de plataformas y fantasía, que regresa después de un descanso de más de cuatro años con el que se intentará hacer olvidar el sabor agridulce de su tercera entrega.
Historia
La historia da comienzo con una carta, nuestros protagonistas: Amadeus, Zoya y Pontius, vuelven a ponerse el traje de faena tras la recepción de una misiva de la Academia Astral, en ella se les pide que partan en busca del príncipe Selius para volver a llevarlo a la academia.
A partir de ahí, la trama se trata de una persecución en la que tendremos que ir detrás del príncipe durante los distintos capítulos que componen la historia. Una carrera que nos llevará por múltiples niveles divididos en cinco actos, para acometer la misión que se nos ha encomendado.
Jugabilidad
Trine 4: The Nightmare Prince vuelve a los orígenes, tras una tercera entrega poco afortunada donde intentó trasladar el videojuego al 3D, Frozenbyte aprendió de los errores cometidos, y vuelve a ofrecernos un videojuego que utiliza el 2.5D. El título se trata de un plataformas con multitud de puzles ambientado en entornos fantásticos en los que tendremos que aprovechar las diversas habilidades de nuestros protagonistas para ir resolviendo cada uno de ellos y utilizando las físicas para ir superando cada desafío.
Los rompecabezas son bastante variados entre sí con algunos especialmente ingeniosos y elaborados, pero lo cierto, es que ninguno de ellos supone un reto y rara vez nos quedaremos bloqueados una vez dominemos todas la habilidades nuestros personajes. Cambiar entre personajes es esencial, y combinar habilidades, tres cuartos de lo mismo para recorrer los niveles.
Como ya hemos dicho con anterioridad, en esta entrega vuelven a hacer acto de aparición el mago Amadeus, el cual con su magia es capaz de crear y mover bloques o plataformas para seguir avanzando. Zoya, la ladrona, cuya agilidad y la habilidad con el arco y gancho nos permite engancharnos (valga la redundancia) o conectar dos objetos entre sí. Y por último, nos queda hablar de Pontius, el guerrero cuyo escudo es esencial a la hora de reflectar rayos de luz y cuya contundencia física es esencial para luchar contra nuestros enemigos, así como a la hora de destrozar objetos que nos bloquean el paso.
Las secciones de plataformas son constantes y el control preciso, como única pega, es que quizás son menos exigentes de lo que deberían y no encontraremos ninguna fase que nos ponga en aprietos más allá de algún fallo que podamos cometer, y aún así, cuando perecemos, solo desaparece el personaje en cuestión durante unos instantes, por lo que el castigo es apenas nulo.
A lo largo del videojuego también tiene su hueco el combate, el cual vuelve a pecar de simpleza y repetitividad por su escasa variedad de enemigos. No así los combates contra los jefes finales, los cuales destacan sobremanera en cuanto a diseño y en este caso sí, suponen un reto más destacable.
Igualmente hay lugar para la progresión de los personajes, la cual tiene lugar al conseguir experiencia con las batallas permitiéndonos desbloquear diferentes habilidades. Cada uno de los protagonistas tiene su propio árbol de habilidades completamente diferenciado, y alguno puede mejorarse al conseguir los puntos de mejora necesarios.
Gráficos y sonido
Gráficamente, la cuarta entrega de Trine es un videojuego especialmente bello. A lo largo de los niveles recorremos entornos fantásticos, compuestos por paisajes coloridos muy variados y que a menudo, nos dejan maravillados y con la sensación de encontrarnos en un cuento. Artísticamente y a nivel de diseño, el título luce a un nivel verdaderamente soberbio incluso en Nintendo Swtich, plataforma en la que se realizó el análisis, mostrando un fantástico desempeño tanto en modo portátil como en sobremesa, no obstante, el segundo es claramente inferior a lo que podremos ver en otras plataformas.
En cuanto al apartado sonoro, el título nos ofrece unas melodías que nos acompañan durante los distintos niveles. Destacar también que el videojuego nos vuelve a llegar en perfecto castellano tanto en voces como en textos, lo que como siempre es de agradecer.
Conclusión
Trine 4: Nightmare Prince es la cuarta entrega de una saga muy querida por los amantes de los plataformas. Tras una tercera entrega un tanto irregular y que levantó cierto recelo entre sus seguiodores, Frozenbyte ha vuelto a mirar atrás para recuperar la esencia de la saga, pero ofreciendo un producto mucho más grande y ambicioso.
A nivel de historia el videojuego nos narra el periplo de Amadeus, Zoya y Pontius en busca del príncipe Selius; desaparecido de Academia Astral, y cuya búsqueda se le encomienda a nuestros héroes. Una búsqueda que nos llevará a recorrer los cinco actos que componen la historia: resolviendo puzles, sorteando plataformas, y luchando contra unos enemigos que pecan de ser demasiado repetitivos.
La obra luce a un nivel soberbio tanto en modo portátil como en sobremesa, y ofrece un apartado artístico más que notable que nos hará disfrutar de alguno de los entornos más bellos que podremos recorrer este año. Además, cabe resaltar que nos llega traducido a nuestro idioma y perfectamente doblado al castellano.
En definitiva, Trine 4: Nightmare Prince es una vuelta a los orígenes de la franquicia, un videojuego que llega dando un paso atrás para tomar impulso y lo consigue. Estamos ante un título de plataformas y puzles más que notable, que encandilará a quienes disfrutaron de sus anteriores entregas y a cualquiera que se interese en la saga.