[Análisis] Venture Kid

[Análisis] Venture Kid

Los plataformas pueden ser de muchas maneras distintas y variar en algún aspecto de la jugabilidad para hacer de la experiencia algo único. Seguramente muchos de nosotros hayamos jugado alguna vez a Alex Kidd o a Mega Man, pues en este caso, Venture Kid une los dos estilos de juego. En el apartado gráfico se parece más a Alex Kidd por la manera en que está hecho el personaje y los entornos, y en cuanto a la manera de atacar a los enemigos y los bosses finales de cada fase, se asemeja a Mega Man.

El capitalismo de las gemas

Andy es nuestro protagonista y está en una isla recogiendo gemas con una chica (no se menciona el nombre de esta), y de repente, se vislumbra una gran explosión en el centro, en la zona donde ellos se encontraban. Ese estallido ha sido causado por Teklov, un científico que tiene un plan para construir una fortaleza espacial y crear un arma que pueda preservar la paz.

La chica está malherida a causa de la explosión, puesto que estaba demasiado cerca, y termina en el hospital recibiendo los cuidados necesarios; mientras que Andy se pone en marcha para detener los malvados planes del Dr. Teklov, pero no lo hará solo, ya que usará unos inventos que le irán facilitando, empezando por una pistola.

Diferentes modos de juego para enfrentarnos a Teklov

Cuándo empecemos en Venture Kid tendremos tres modos de juegos diferentes que elegir. Esos son: clásico, aventura y supervivencia, pero hay un cuarto modo, aunque ese se desbloquea superando el clásico.

  • Clásico: En este modo jugaremos la aventura en el orden pertinente y como toca. El mapa es una isla dividida en 8 zonas distintas, pasando por bosques, desiertos o volcanes. Tocará ir por cada uno de los niveles hasta llegar al final.
  • Aventura: Es lo mismo que el clásico, pero con una ligera diferencia, ya está todo el mapa desbloqueado y puedes aventurarte en el orden que quieras, sin importar lo difícil o fácil que sea.
  • Supervivencia: Aquí se complica la cosa, ya que se genera un nivel de manera aleatoria de cualquiera de las 8 fases e incluirá los enemigos de ese nivel y un boss final. Aunque para compensar, tendrás disponibles todas las armas del juego, por lo que suaviza la cosa a la par que sigue ofreciendo un desafío complicado.

También hemos hablado de que existe un cuarto modo, y ese es un boss rush. Te irán apareciendo los diferentes enemigos del juegos y tendrás que enfrentarte a ellos de manera ininterrumpida.

Hora de atravesar los parajes 2D

Venture Kid cuenta con tres dificultades distintas para pasear por todas las zonas o buscar el equilibrio o el reto, eso dependerá únicamente de nuestra decisión.

Accederemos a un mapa e iremos a una de las fases. Entonces estaremos en un nivel con un entorno 2D al estilo 8 bits bastante detallado y cuidado. Arriba de la interfaz, veremos las vidas que tenemos, el arma equipada en ese momento, los corazones que tengamos (máximo 4) y las gemas (que funcionan como el dinero del juego).

La fase se divide en partes de plataformas, donde tendremos que ir saltando obstáculos y llegar a diferentes superficies que pueden parecer inalcanzables, y zonas infestadas de enemigos mortales como slimes, kiwis gigantes o serpientes entre muchos otros. Y siempre, como no podía ser de otra forma, al final de un nivel nos esperará un jefazo con ganas de fiesta. Antes de acceder al boss, siempre nos encontraremos un cartel con una calavera y tres corazones, para así enfrentarnos con vida al jefe. Al acabar con uno de ellos, se dará por terminado el nivel y si es la primera vez que nos lo pasamos, nos recompensarán con una nueva arma. Estas armas pueden ser un boomerang, una máquina para congelar enemigos y poder saltar encima de ellos, y otra serie de cachivaches.

Al acabar un nivel aparecerá una bandera blanca, a no ser que hayamos encontrado la zona secreta donde está el colecionable. Para alcanzar estas zonas será necesario utilizar tácticas como ir por la parte de arriba donde sale la vida y dinero del personaje, o subir por paredes que en realidad se pueden atravesar. Si sois de los que disfrutan completando las fases al 100%, os aconsejaría andar con ojo para no dejaros nada por el camino y conseguir así que la bandera que ondea al final sea dorada.

El juego puede parecer un poco complicado a priori, pero al entrar en un nivel tenemos una tienda en la que podemos aprovisionarnos de varios ítems, entre ellos corazones, disponiendo así de cuatro corazones extra para afrontar el desafío venidero. No obstante, hay cosas temporales y otras cuya mejora queda guardada, así que habrá que vigilar en que se gasta uno las gemas.

La duración es relativa

Venture Kid es un indie que puedes llegar a pasarte en una sola tarde, aunque también puedes dedicarle horas al modo supervivencia y a ver hasta donde eres capaz de llegar. El apartado de 8 bits está cuidado, y aunque haya pixel arts mejores, este no se queda atrás. En cuanto al apartado musical está bastante bien, aunque el tema de cada fase acaba haciéndose repetitivo aún a pesar de que hay algunos pequeños matices diferenciadores.

En general, si alguna vez has jugado a Mega Man, Venture Kid es un buen juego del mismo estilo y con una dificultad parecida. Aunque el modo clásico dure poco, es bastante rejugable, con lo que puedes invertir varias horas sin preocupaciones. Y para los amantes de los logros, el juego lleva incorporado internamente unos desafíos. También lo tenemos disponible en diferentes idiomas, aunque la dificultad en español está mal traducida (el resto se presenta sin problemas).

 

Jorcelo

Jugador que ha atravesado Green Hill, el árbol Deku, las ruinas de Zanarkand, Anor Londo y lo que queda. Todo a bordo de una nave poligonal, con un perro que habla y un pato que no cura. Cojo una patata y me la como