[Análisis] Toby: The Secret Mine

[Análisis] Toby: The Secret Mine

Ya está en PS4, Xbox One y Wii U el Toby: the secret mine, que ya se lanzó en 2015 para PC en Steam, y obtuvo soporte para next gen recientemente, saliendo al mercado el 6 de julio de este año. Este plataformas indie fue desarrollado por Lukas Navratil, y utiliza el motor Unity.

Toby: the secret  mine es un plataformas en scroll lateral, que guarda ciertas similitudes con títulos como Limbo, Nihilumbra o Badlands, pero tiene ciertas particularidades que lo separan de estos.

Historia

Toby: the secret mine empieza directamente, tras una pequeña secuencia de introducción sin voz ni texto. Manejamos a Toby, una criatura pequeña y con cuernos, que persigue a unas criaturas parecidas a él, pero más grandes que han raptado a sus amigos. Nuestra misión es rescatarlos a lo largo de todos los niveles por los que vamos pasando mientras superamos los obstáculos que nos ponen sus captores.

Jugabilidad

Los controles en Toby: the secret mine son bastante simples: Joystick izquierdo para manejar al personaje, botón X para saltar y botón O para interaccionar con algunas cosas como palancas. Sin embargo, a pesar de ser tan simple y de tener unos niveles lineales y con una sola opción a la hora de resolver un puzzle o superar una zona, el juego se acaba haciendo entretenido e incluso adictivo si te gustan los juegos de plataformas. Tras jugar un poco podemos ver como van introduciendo mecánicas sin necesidad de explicarlas o de hacer un tutorial, lo cual da sensación de fluidez. Las mecánicas que van introduciendo las utilizan todo el juego, a medida que poco a poco los niveles van ganando complejidad y hacen usar la cabeza un poco más al jugador. Los niveles tienen el equilibrio perfecto entre plataformas y puzzles, sin sentir que hay un predominio claro de uno de los dos en los niveles. Además, si queremos completar el juego al 100% tenemos que rescatar a 26 de nuestros compañeros, que están encerrados en jaulas por todos los mapas, generalmente escondidas o en caminos optativos.

El nivel de dificultad no es complicado al principio, pero a medida que vamos avanzando los niveles, esta va en aumento hasta llegar al punto de llegar a desesperar en alguna ocasiones. En el caso de que queramos retos mayores, podemos por ejemplo intentar pasarnos el juego muriendo el menor número de veces posible, o completarlo en el menor tiempo posible. En ambos casos estaremos ante un desafío interesante. Es una pena que el juego no cuente con un modo contrarreloj, o un modo en el que haya un cronómetro en pantalla para poder controlar el tiempo, hubiera sido interesante para la gente que les gustan los desafíos contrarreloj. Como habréis podido adivinar, el que juegue a Toby: the secret mine va a morir mucho (hay un trofeo por morir más de 100 veces). Sin embargo, el sistema de respawn está bien hecho, sin apenas tiempo entre la muerte del jugador y reaparecer, consiguiendo así que la muerte se considere una parte del juego, y no solo una situación que signifique que has fallado. El diseño de niveles está cuidado y logrado: Al principio parecen sencillos, con plataformas y alguna palanca que nos permite acceder a una zona para poder continuar, pero a medida que vamos avanzando, podremos ver como diferentes peligros surgen para hacernos la vida imposible: pinchos, ácido, sierras circulares, enemigos variados aunque no muy abundantes, bombas, caídas, láseres… La forma de superar cada uno de estos peligros es diferente, dándole ese toque de variedad tan importante en este tipo de juegos, evitando así la monotonía y la repetición.

Sin embargo, no todo es saltar evitando pinchos y darle a palancas para poder seguir avanzando. En ciertos puntos, el juego nos planteará una serie de enigmas o pequeños puzzles que tendremos que resolver para seguir avanzando. Algunos de ellos son por ejemplo: elegir entre varios símbolos unas señales que han ido apareciendo a lo largo del nivel actual, ordenar un dibujo, pulsar una secuencia de botones en orden… Con todo, el manejo del personaje es óptimo y fluido, dándonos una sensación de control fluido sobre él, y permitiéndonos manejarlo a nuestro antojo durante todo el juego, lo cual se agradece en un título de este estilo.

Lo que tienen en común estos puzzles y el juego en general, es que la mecánica de ensayo-error está presente en todo momento; sobretodo debido a que no nos dicen nada con respecto a ningún enemigo ni situación, tenemos que intuir como superar a un enemigo que nos impide el paso o buscar una solución al problema que tenemos delante. Además, hay que comentar que los checkpoint están bien distribuidos: son lo suficientemente frecuentes como para no hacer pesado el juego, pero tampoco fácil.

Por desgracia, también hay que destacar que a veces debido a algún bug en el juego, al saltar cerca del borde de una plataforma, nuestro personaje se queda enganchado sin poder moverse, saltar o realizar alguna otra acción, conduciéndonos irremediablemente a una muerte injusta. Aunque no es algo muy frecuente, sí pasa lo suficiente como para provocar que sea incómodo para el jugador, aumentando el contador de muertes y dificultando alguna zona en concreto más de lo que debería ser.

Lo que más me ha defraudado de Toby: the secret mine ha sido sin duda su corta duración: Pasarse los 26 niveles puede llevarte entre una y dos horas dependiendo de tu habilidad, lo cual hace que nos quedemos con sabor a poco y con ganas de más. A todo esto, tenemos que añadirle su precio de 14.99€ en la Store de Playstation Network y de 9.99€ en Xbox Live. ¿Merece la pena pagar esa cantidad? Eso depende de vosotros.

Gráficos y sonido

En el apartado gráfico es donde Toby and the secret mine destaca con creces. La estética es similar a Limbo: tanto las zonas de plataformas como nuestros personajes son de color negro con ojos blancos o rojos; mientras en el fondo cambiante durante las diversas zonas está a todo color, con animaciones cuidadas (como la de la lluvia), y este fondo nos muestra algunas imágenes preciosas y sobrecogedoras, que van desde las entrañas de una cueva hasta las cumbres nevadas de las montañas, pasando por un bosque o una profunda mina. Todas estas diferentes zonas están muy cuidadas y encajan a la perfección formando un paraje que entran ganas de volver a jugar el juego solo por volver a ver esas zonas.

En cuanto al apartado sonoro, hay escasas canciones, dado que normalmente solo nos acompañan los ruidos de fondo, quitando alguna melodía puntual a un volumen medio-bajo para dar ambiente, ya sea tétrico o sobrecogedor.

Conclusión

Toby and the secret mine es un juego que merece la pena si te gustan los plataformas indies, y en ese caso lo disfrutarás por sus escenarios y el reto que supone. Sin embargo, su corta duración es lo que más juega en su contra. De cualquier manera, este es un juego a tener en cuenta en el género de las plataformas, sobretodo si te gustan los indies.

dedy96

Me llamo Edu, aunque podeis llamarme Dedy. Estudio enfermería y me encantan el anime, el manga y los juegos. Hacer las cosas con pasión te permitirá algún día atravesar los cielos.