Con un título simple pero eficaz, nos encontramos ante un título de acción y disparos ambientado en el espacio que recuerda a grandes historias del género del estilo de Mass Effect (más en el estilo de su universo que en su propuesta jugable, que no tiene nada que ver), o novelas como las de Asimov o de Orson Scott Card. Desarrollado por Fishlabs, se trata del primer gran título multiplataforma de un estudio que, hasta el momento, tan solo había desarrollado un titulo para dispositivos móviles, Galaxy on Fire, y había colaborado en el traspaso de Saints Row 3 y 4 a Nintendo Switch, además de desarrollar un pequeño título de acción espacial que se podría considerar la precuela no oficial de Chorus, Manticore: Galaxy on Fire. Por tanto, nos encontramos ante la primera gran prueba de un estudio que, si funciona este título, podría dar de que hablar en el futuro, además de que demostraría que Deep Silver puede vivir más allá de sus dos grandes franquicias. ¿Queréis que nos aventuremos en el espacio a bordo de nuestra I.A. de confianza? ¿Y queréis saber qué tal ha salido este título? ¡Pues pongámonos a los mandos de la Forsaken, que despegamos en el análisis completo que podéis leer a continuación!
Una apuesta personal e intensa
La historia de Chorus nos pone en la piel de Nara, una poderosa piloto estelar que en el pasado formó parte del Círculo y que ahora debe luchar contra esta enorme organización y contra su pasado, ya que su objetivo principal se encuentra en acabar con el oscuro culto que la hizo tal y como es. Y es que Nara no es una chica cualquiera, pues cuenta con un plantel de habilidades de lo más variopintas e interesantes: desde escanear los lugares en los que se encuentra para encontrar elementos ocultos hasta “ver” recuerdos y memorias ocultas en el ambiente, Nara está preparada para cualquier situación. Junto a ella nos encontraremos con Forsaken, la I.A. de la nave que actuará como una muy interesante contraparte a nuestra protagonista. Frente a la humanidad de la protagonista, la frialdad y preparación para el combate de la nave destaca por encima de todo. El desarrollo de la protagonista es lo que más brilla en la narrativa, proponiendo además una relación que avanza y se desarrolla de una forma sorprendente y satisfactoria. Esto, unido al resto de personajes que vamos encontrando a lo largo del desarrollo del juego, supone una muy grata sorpresa: jamás habría pensado que en un juego de este género me encontraría con personajes y motivaciones tan bien construidas, que nada tienen que envidiar a los grandes nombres de la ciencia ficción. Más que plantear grandes tripulaciones repletas de personajes, o cientos y cientos de civilizaciones por conocer, Chorus se centra de forma íntima en el desarrollo interno de unos pocos personajes, y esto es algo que le sienta de escándalo a la historia del título.
Hablando de la historia, cabe destacar que no nos encontramos ante una trama excesivamente extensa, pues el juego no dura más de 10 horas. ¿Es esto algo malo, o problemático? A decir verdad no, y se acaba sintiendo como una duración muy adecuada y coherente con lo que plantea el juego, además de que el título cuenta con un buen número de misiones secundarias que, independientemente de su nivel de calidad, permiten alargar la duración del título de forma directa. Me han gustado especialmente los temas tratados en el título, entre los que destacamos las relaciones conflictivas y peligrosas, el control sobre otras personas y la búsqueda del yo interior. El conflicto interno de la protagonista es excelente, y la única pega que podría ponerle es que, si no os gusta la ciencia ficción espacial pura y dura, quizá esta historia no os convenza. Pero si os gusta, os aseguro que disfrutaréis mucho la trama del título, una que realmente es mejor de lo que podría parecer.
Rescata tripulaciones y arrasa con las naves enemigas
Es, a nivel jugable, donde más me ha sorprendido Chorus, ofreciendo un planteamiento jugable que resulta sorprendentemente amplio y ambicioso. Así, a diferencia de muchos de los títulos de este género en Chorus encontraremos una enorme cantidad de escenarios amplísimos y repletos de rutas que podremos recorrer a nuestro antojo, abordando así la exploración del escenario como una de las bazas más importantes y destacables del título a nivel jugable. No es que sea un juego de mundo abierto al 100%, pero sí que es cierto que la mayor parte del tiempo podremos recorrer diversas zonas del espacio para completar misiones secundarias o avanzar en la historia. Y os lo diré sin tapujos: recorrer el espacio a bordo de nuestra nave, esquivando meteoritos, impulsándonos a mayor velocidad para hacer trayectos más largos y acabando con las naves enemigas es muy divertido y gratificante. Es de las pocas veces que, en un juego de este género, me he sentido realmente como un personaje de una película de ciencia ficción al estilo de Star Wars, moviéndome libremente a través de las estrellas mientras libero a la galaxia de la tiranía de una secta que amenaza con el caos. Vale, el moverse con la nave es realmente entretenido, pero… ¿No se puede hacer algo pesado el estar todo el rato navegando por el espacio? Ese fue uno de los primeros pensamientos que se me vino a la cabeza, y aunque antes mencioné que la duración era adecuada… Si que es cierto que, al menos en mi caso, el juego me acabó pareciendo un tanto repetitivo. Quiero decir, es un juego de naves espaciales, más allá de combatir, recoger recursos y volar poco más puedes hacer, pero sí que es cierto que me habría gustado una mayor variedad de cosas que hacer, o por lo menos plantear una forma distinta de presentar las misiones o ir realizándolas. Quizá aquí es donde más falla el título, pues aunque la historia es interesante su desarrollo jugable se acaba estancando de forma problemática. Y esto, para todo aquel que no esté acostumbrado al género, sí que puede resultar un problema.
Hablando de esto, cabe destacar que no es para nada un mal juego que sirva como puerta de entrada al género a nuevos jugadores, al menos no en el aspecto jugable. Y es que en este sentido el título se siente un poco como un Ace Combat espacial, o un Starfox con algo más de complejidad y libertad de movimiento. Olvidaos de los simuladores aéreos, aquí tenemos un juego muy cómodo de manejar que, además, acaba resultando especialmente intuitivo: la movilidad es realmente cómoda y ofrece una gran cantidad de opciones, mientras que su sistema de disparo es básico pero realmente eficaz. En este sentido, todo es muy básico y reconocible, pero funciona a la perfección. Donde el juego se sale más de la línea convencional es en el ámbito de la personalización y los ritos. Por un lado, la nave es desde un primer momento personalizable, pudiendo cambiar casi todos los aspectos de la misma, lo que afecta de forma directa a la jugabilidad. No habrá dos naves idénticas en dos partidas distintas, ofreciendo un sinfín de posibilidades que disfrutarán especialmente los jugadores más interesados en conseguir todos los extras. Por otro lado, Nara cuenta con unas habilidades conocidas como ritos, que le permiten, por ejemplo, observar recuerdos y desvelar rutas. Si bien esto no afecta tanto al apartado jugable, si que aporta otra capa de profundidad al juego que, de nuevo, le sienta de escándalo. En resumidas cuentas, podríamos decir que Chorus es un juego entretenido que goza de un buen sistema de control y una exploración maravillosa de sus escenarios, sean más grandes o más pequeños, pero que peca de tener una estructura de misiones predecible y algo repetitiva. Sus novedades con respecto al resto de juegos, como el sistema de ritos, no están mal, y su sistema de edición de la nave es excelente.
Sobrevolando estrellas y galaxias
Es, a nivel gráfico y artístico, donde posiblemente Chorus más me ha sorprendido y enamorado, gracias principalmente a su maravilloso nivel de detalle y a su detallado uso de los fondos y del color. A diferencia de lo que se ha visto en infinidad de obras del género, en Chorus el espacio es presentado como un inmenso mar repleto de vida, de posibilidades y, por encima de todo, de color. Su apartado gráfico ha reproducido a la perfección no solo esa visión del color tan preciosa con un nivel de calidad enorme, si no que además ha presentado unos entornos repletos de objetos que son muy vistosos y que destacan por encima del resto. No os engañaré si os aseguro que en más de una ocasión me quedé absorto mirando los escenarios por los que se estaba moviendo la nave, pero es que el juego se ve realmente bien. Y, sorprendentemente, no se ve muy afectado ni en el rendimiento ni a nivel técnico. Habiendo jugado a la versión de Xbox One, he de afirmar que no he sufrido caídas de frames ni ningún tipo de bug reseñable, ya que el juego ha funcionado a las mil maravillas desde el primer momento. Todo esto me ha maravillado, encontrándonos así con un título muy vistoso y muy trabajado en el aspecto técnico.
Mientras que a nivel gráfico el juego me ha enganchado desde el primer momento, es quizá a nivel sonoro donde el juego me ha dejado más frío, y quizá no tanto por su doblaje si no por su banda sonora. ¿Por qué digo esto? Pues porque, a pesar de que el primero está muy bien trabajado y cada personaje tiene una actuación de voz notable que encaja en el papel, la banda sonora es muy secundaria y poco memorable. No recuerdo ninguna melodía reseñable, y tampoco he visto que encajara especialmente bien en ciertos momentos. No es horrible, pero se podría haber mejorado.
Conclusión: Un título enorme en su propuesta, pero imperfecto en su ejecución
Chorus se plantea como un muy interesante juego de acción espacial centrado en el manejo de una nave, que elimina cualquier tipo de planteamiento de simulador para centrarse en el componente más arcade del género. Con una estructura de mundo semi-abierto con entornos enormes una historia muy bien escrita y atrapante, el título de Fishlabs se alza como una obra más que notable, que cumple en la gran mayoría de apartados aunque fracasa en su repetitividad y en su apartado sonoro. Creo que este se trata de un juego muy recomendable para cualquier amante de la ciencia ficción y de los juegos de naves espaciales, pues da un paso más dentro de este género al mismo tiempo que se presenta como todo un triple A. ¡Dadle una oportunidad, y liberad a la galaxia de la tiranía!
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.