[Análisis] DELTARUNE Chapter 1

[wonderplugin_gridgallery id=2386]

Toby Fox, quizás no todo el mundo lo conozca pero no es ni más ni menos que la mente maestra detrás de la obra magna que es Undertale, aquel juego que fue capaz de maravillar a todo el mundo, siendo considerado actualmente como uno de esos títulos que es indispensable haber jugado alguna vez antes de morir; y es que, no demasiado lejos de ser perfecto, es capaz de llevarse sobresalientes en todos sus apartados de manera mucho más que merecida. Y bien, conociendo el tremendo éxito de este juego, ¿qué podríamos esperar si nuestro amigo Toby lanzase otro nuevo título? La respuesta es muy sencilla: otra obra de arte.

Pues bien, aquí nos encontramos. De manera gratuita para PC, PS4 y Nintendo Switch está disponible el primer capítulo de DELTARUNE, lo nuevo de Toby, aunque esta vez con un equipo entero a su cargo. Pese a ser el título un anagrama de Undertale y que podamos encontrar a prácticamente todos los personajes que aparecen en este como Toriel, Undyne o Sans (aunque con personalidades y roles bastante distintos), Toby Fox aseguró que sus mundos eran diferentes, aunque siendo honestos, hasta que el juego no esté totalmente completo y lo termine, no me atreveré a dar por hecho que no es una secuela o precuela, dado que él mismo también dijo “este es un juego al que se puede jugar después de Undertale” y hay una enorme cantidad de referencias a este, como la tarta de butterscotch-cinnamon de Toriel.

Ahora pasemos a hablar de lo importante que es el juego en sí, y qué mejor manera de iniciarlo que con una leyenda, una que narra cómo tanto los seres de la luz como los seres de la oscuridad serían incapaces de convivir juntos una vez el balance entre ambos se rompiese y el mundo fuese en camino a su destrucción. Para poder restablecer este equilibrio, tres héroes deberán sellar las fuentes que desmoronan el mundo, y estos tres héroes serán un humano, un monstruo y un príncipe de la oscuridad. Por ahora, el mundo parecía estar en paz, pero en el reino de la oscuridad, además de la fuente que da forma al reino, ha nacido otra nueva que está creando disrupción.

Pinta interesante, ¿verdad? Bien, pues no le deis demasiadas vueltas porque este primer capítulo no tratará de esto. Irá poco más allá de ser una introducción al universo y al juego, pudiendo tenerlo terminado en menos de 3 horas. Empezaremos creando inútilmente a un personaje (aunque ya se puede oler cuando una vez decides la cabeza el resto de opciones son todas iguales, aunque debo admitir que me costó un rato de buscar matices el darme cuenta de que no había) puesto que, como deja bien claro, “nadie puede elegir quién es en este mundo”, por lo que encargaremos a Kris, un humano al cual Toriel ha adoptado. Como si de un día normal se tratase, iremos a la escuela y llegaremos tarde, hecho con el que me he sentido más que identificado, pero no seremos los últimos, pues a mitad de clase veremos que Susie aparece por la puerta, una chica monstruo que tiene fama por ser peligrosa y hacer bullying al resto de sus compañeros, y obviamente nosotros no seríamos una excepción, por lo que ya podéis imaginar qué nos espera en cuanto el profesor nos manda con ella a ir por tizas al almacén…

O no.

Al entrar al almacén y caminar a oscuras durante un rato, terminaremos cayendo por un abismo que nos llevará ni más ni menos que al reino de la oscuridad (donde, por cierto, se les vestirá con ropa de héroes de RPG), allí nos encontraremos con Ralsei, quien hará alusiones a Kingdom Hearts pero sin salirse de DELTARUNE para explicarnos la trama en la que estamos apunto de adentrarnos y también qué debemos hacer para salir de ahí, nada más que eso. Y nada más que esto os explicaré yo de la narrativa como tal puesto que al ser tan breve prefiero quedarme callado a partir de aquí, aunque realmente poco hay por spoilear.

Pasemos ahora al otro factor que convirtió a Undertale en la leyenda que es: su modo de “combate”, que recordemos: era un combate uno contra X con turnos alternos donde podías atacar, usar objetos o actuar de alguna manera, por ejemplo, hablando con el enemigo, y sí, no nos olvidamos tampoco del hecho de poder perdonar la vida a enemigos, lo que marcaría qué ruta seguiríamos en el juego. En DELTARUNE las opciones vuelven a ser las mismas para nuestro protagonista, pero esta vez controlaremos a dos personajes más, cuya diferencia radica en que no podrán actuar por su cuenta sino que será bajo órdenes de Kris (gastando la acción de ambos) y en su lugar podrán usar magia, cuyos puntos se cargarán defendiendo durante un turno o esquivando por poco los ataques enemigos.

Además, otro gran punto es que no únicamente podremos recibir daño en combate sino que habrá mayor interacción con obstáculos en el mapa (cosa que en Undertale, pese a estar presente, era escaso), sabremos que corremos peligro cuando la pantalla se ennegrezca y de nuestro personaje resalte un corazón rojo. Nuestro movimiento en mapa seguirá siendo el mismo durante este transcurso con la única diferencia siendo esa, que podemos recibir daño si no logramos esquivarlo. Y, hablando de esquivar, las batallas dejarán de ser por aparición aleatoria de enemigos puesto que ahora los podremos ver venir, ya que serán visibles y nos perseguirán si nos cruzamos con ellos, algo similar al cambio usado en Pokémon Let’s Go y que no puedo calificar de algo que no sea un gran acierto.

[wonderplugin_gridgallery id=2387]

Artísticamente nos encontramos, de nuevo, con Undertale (sé que lo he mencionado montones de veces, pero creo más que necesaria la comparación para hacernos una idea todos aquellos que hemos jugado el título). El estilo artístico es el propio y el diseño tanto de personajes como de escenarios sigue la misma línea de ser todos sin una gran definición ni detalle pero carismáticos, pudiéndose diferenciar todos sin ningún tipo de problema y con un toque personal en cada personaje y cada tipo de enemigo además de cada escenario, sabiendo hacerse con la atención total de quien lo juega y absorbiendo su tiempo.

A esto ayuda obviamente la banda sonora, que sumerge incluso más que el apartado gráfico en sí y mira que este ya hace bastante. Y no, no se caracteriza por tener melodías épicas a recordar o a ser tocadas en una orquesta sinfónica, sino más bien destaca por sus silencios, su simpleza y su saber aparecer en el momento adecuado, de la manera adecuada y en el tono adecuado. Y además, esos efectos de sonido que se recuperan de Undertale o más de una melodía también procedente de ahí, hace que todos revivamos recuerdos que este nos dejó.

Y sí, como podréis imaginar por todas las veces que lo he dicho, recomiendo muy fuertemente que antes de jugar el primer capítulo (recuerdo, gratuito) de DELTARUNE, completéis antes Undertale, os ayudará a tenerle muchísimo más cariño a lo que estáis a punto de jugar, a disfrutarlo muchísimo más y a cogerlo con más ganas. Pese a que este es el primer capítulo y realmente no sucede nada importante para la trama (a excepción de la escena final del juego que obviamente no desvelaré), consigue encariñarnos tanto con el mundo como con los personajes y nos hace desear que llegue ya ese segundo capítulo.

“Don’t forget, I’m with you in the dark.”