No lo digo por nada, pues los últimos juegos indie producidos y distribuidos por la compañía han resultado ser algunos de los proyectos más interesantes y creativos que he tenido el placer de disfrutar. Un claro ejemplo de esto se encuentra en el sensacional Ninja or Die: Shadow of the Sun, cuyo análisis podéis leer pulsando aquí, y que destacó por presentar una filosofía jugable atrevida y adictiva que ponía a prueba los reflejos de sus jugadores. Tampoco se puede obviar que se trata de la compañía detrás de la distribución de la maravillosa serie No More Heroes, motivo suficiente para seguir con ilusión cualquier videojuego y/o producto que lleve su nombre.
El juego del que hoy vengo a hablaros, como os comentaba antes, no es otro más que Leximan, una atípica aventura con toques de rol y que toma como núcleo jugable el formar palabras para conjurar hechizos y realizar acciones. Vaya, como una especie de mezcla entre Typing of the Dead y Earthbound, ahí es nada. Detrás de su desarrollo se encuentra el estudio inglés Knights of Borria, conformado por tres integrantes que han puesto toda la carne en el asador para hacer de este, su primer juego, una obra memorable y divertida.
Dada su naturaleza atípica, el juego se encuentra disponible únicamente en PC, y tras haber podido disfrutar de sus aventuras y desventuras, hoy tengo el placer de contaros que tal está Leximan y si merece la pena o no darle una oportunidad. ¿Os apetece saber más acerca de esta interesante propuesta de rol, aventuras y ortografía? ¡Pues dentro análisis!
Magia y ortografía, un dos en uno
La historia de Leximan nos transporta a un mundo único, en el que la magia es una asignatura crucial que se enseña en algunas de las instituciones más reconocidas del mundo… O, al menos, esa es la idea. Nuestro protagonista llega una noche lluviosa a las puertas de la Academia Elementinia, la más prestigiosa escuela de hechicería, y aunque en primera instancia es rechazado, la presencia de su misterioso libro de hechizos atrapa la atención de un profesor. No es para menos: resulta que nuestro protagonista puede usar una magia única, la leximancia, consistente en la configuración de palabras mediante la unión de letras aleatorias para generar efectos únicos.
El problema está en que, bueno, esta clase de magia es muy insegura, y tras un terrible accidente nuestro protagonista queda recluido. Todo cambia, claro está, con el ataque de la escuela por parte de un grupo enemigo, motivo por el que tendrá que poner a prueba sus poderes. Resulta imposible no señalar que no de los elementos más memorables de Leximan se encuentra en su apartado narrativo, pues se nos presenta una historia muy original e interesante que usa como principal baza un maravilloso sentido del humor.
Tal y como ocurre en la mayoría de quirky RPG (subgénero inspirado por la serie Mother y caracterizado por su carácter absurdo y aleatorio) aquí se presentan una caterva de personajes originales cada cual más divertido y memorable que el anterior. Es a través de sus maravillosos diálogos y sus constantes rupturas de la cuarta pared como acaban destacando y brillando con luz propia.
Resulta fascinante la forma en la que, tras un par de horas de juego, uno se acaba encariñando enormemente de sus personajes y entornos a pesar de que, en la mayoría de casos, estos nos rechazan y nos tratan peor que a sus enemigos. El gran problema no solo de la historia, si no de todo el juego, se encuentra en la notable falta de traducción al español.
Al tratarse de un título tan centrado en su narrativa y al darle tanta importancia a la ortografía y la construcción de palabras en inglés, resulta muy difícil que alguien que no entienda bien el idioma anglosajón pueda llegar a disfrutar del título.
Formando palabras que son de todo menos mágicas
En cuanto a la jugabilidad de Leximan, nos encontramos ante una aventura en perspectiva cenital que nos llevará a recorrer la escuela y otros entornos mágicos mientras hacemos uso de nuestras habilidades especiales. Donde mejor se utilizan estas es, claro está, en las secuencias de combate, que posiblemente sean de los aspectos más originales de todo el juego.
A fin de cuentas, durante estas tendremos que escoger entre las distintas letras que flotan en la pantalla para poder formar palabras, teniendo cada una de estas un efecto único. Este también es el caso en sus originales puzles, y lo más interesante es que para estos no hay una única solución: puede que la palabra más inesperada y menos relacionada con el problema que tenemos que enfrentar sea una decente e irrisoria solución.
Esto demuestra que el juego está muy bien pensado, invitando a rejugar única y exclusivamente por observar las posibilidades que ofrecen todos nuestros hechizos. Otro aspecto realmente interesante y positivo se encuentra en su variedad de situaciones jugables, presentando un buen puñado de minijuegos que no solo mejoran el ritmo del juego, si no que también impiden que la aventura pueda resultar repetitiva para el jugador.
Lo único negativo es que, a pesar de que se trata de un juego variado y de que ofrece muchas posibilidades para superar sus combates y puzles, no cabe duda alguna de que se trata de una aventura excesivamente lineal y guiada, haciendo uso de un diseño de niveles algo irregular. En este sentido se nota la falta de experiencia del equipo, aunque no penséis que esto arruina lo que es, sin duda, un gran juego.
Leximan no deja de ser atípico en su presentación, haciendo gala de un apartado artístico que remite a los juegos de rol de la década de los 80s… Pero con efectos visuales que hacen de la experiencia todo un viaje psicodélico, como filtros de ojo de pez o la introducción de elementos 3D.
El pixel art del que hace uso Leximan es un tanto irregular, pues ciertos objetos y personajes no cuadran con la estética o no tienen el nivel de detalle del resto, pero en líneas generales no cabe duda de que se trata de una obra muy cuidada y detallada. Por supuesto, su bajo nivel de exigencia hace que su rendimiento sea muy fluido, por lo que es imposible encontrar caídas de frames o cierres imprevistos del juego. Por último, su banda sonora es decente, acompañando bien a la historia sin sobresalir en ningún momento.
Conclusión: Una comedia en donde el alfabeto manda
Leximan es una muy agradable sorpresa dentro del ecosistema de quirky RPG, que vuelve a demostrar las enormes posibilidades del género y la gran capacidad de Marvelous para dar voz a pequeños proyectos cargados de potencial y buenas ideas. Aunque el juego presenta algún que otro problema de diseños (y su falta de traducción al español resulta injustificable), no cabe duda alguna de que se trata de una gran propuesta que no podéis dejar de lado.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.