
Pero no siempre la calidad artística trae consigo un buen rendimiento económico, y si no, que se lo digan a Atlus: aunque Persona 3 superó en ventas a sus antecesores, no fueron suficientes como para colocar a la franquicia en el mapa. El juego se mantuvo como un gran título de culto, una obra muy comentada entre los jugadores afines al género pero que, ya sea por sus limitadas copias o por su falta de traducción, no consiguió atrapar al gran público. Esto no impidió que la compañía japonesa intentara vender el juego a un mayor público en varias ocasiones, ya sea lanzando una versión ampliada con un epílogo extra en PS2 (como es el caso de la versión FEES) o una versión algo limitada en lo jugable pero con una nueva visión de la historia (como es el caso de la versión Portable). Si bien estos títulos no funcionaron mal, lo cierto es que no consiguieron quitarle al juego la categoría de título de culto. Con el éxito de Persona 5, era cuestión de tiempo que Atlus trajera de regreso a este título; a fin de cuentas, Persona 4 Golden regresó a PC por todo lo alto y obtuvo un éxito mayor al de su lanzamiento original. Tras varios años de espera, por fin la tercera entrega de esta legendaria entrega llega a las consolas de actual generación… En su versión Portable, para gusto y disgusto de los jugadores. ¿Queréis saber qué tal se conserva este título, y si merece o no la pena hacerse con esta nueva edición? ¡Pues dentro análisis!
I am thou…
La historia de Persona 3 nos pone en la piel de un adolescente (podemos elegir su género) que tras un tiempo regresa a su ciudad natal, Iwatodai. Lo que debería ser una estancia tranquila acaba tornandose en algo oscuro, pues sus compañeros de residencia parecen ocultar algo. Nuestro protagonista pronto descubre la verdad: todos forman parte de un grupo conocido como SEES que, con el poder de su Persona (la manifestación de su psique), luchan contra las fuerzas oscuras que se manifiestan durante la hora oscura (una que surge entre la última hora de un día y la primera del siguiente). Así, junto al poder de su recién manifestado Persona, Orpheus, nuestro protagonista deberá lanzarse a la exploración del Tartaro, la enorme torre que aparece durante la hora oscura en mitad de la ciudad y que parece ser la fuente de todos los males. A pesar de que se cocina muy a fuego lento, Persona 3 presenta la que posiblemente sea la historia mejor articulada de toda la vertiente moderna de la serie. No solo cuenta con un plantel de personajes enorme y muy complejo, cuyo desarrollo deja sin aliento a cualquiera, si no que la trama consigue mantener un enorme nivel de interés durante sus más de 40 horas de duración. Es quizá el juego de la serie que toca los temas más profundos, y ya os adelanto (sin afán de hacer spoiler) que os conmoverá y os hará derramar más de una lagrima.
En lo narrativo es imposible achacar algún problema a esta entrega, y más si tenemos en cuenta que nos encontramos ante la versión Portable. Esto quiere decir que no solo podremos disfrutar de la historia original del título, si no que podremos conocer la historia desde el punto de vista de la protagonista femenina, en donde se cambian muchos de los diálogos y se plantean nuevas relaciones con los personajes secundarios. Así, el juego ofrece el doble de contenido con los suficientes cambios en la narrativa como para justificar una segunda partida. Cabe destacar que la traducción al español presente en este juego es tan redonda como la vista en las dos últimas entregas de la serie: desde las palabras más complejas hasta las frases hechas más desconocidas, todo está localizado a la perfección, lo que nos permite disfrutar de sus más que geniales diálogos y de sus giros de guion inesperados.
Memento Mori
A nivel jugable nos encontramos con un RPG que mezcla fases centradas en los diálogos y en el carácter social con fases de exploración de mazmorras y combates por turnos. El Persona 3 original consiguió innovar, entre otros motivos, gracias a la posibilidad de explorar libremente ciertos entornos de la ciudad. Si bien esa idea aún se mantiene en esta edición, lo cierto es que el eliminar el movimiento del personaje durante estas fases hace que todo se sienta mucho más limitado. Por supuesto, podemos hablar con los personajes que queramos en cada escenario e ir al lugar que nos plazca, pero todo se realiza a través del movimiento de un cursor en un sistema que es de todo menos intuitivo. Tampoco encontramos aquí muchos de los extras que sí se incorporaron en la edición FEES del juego, haciendo que, más allá de los extras presentes en la aventura del personaje femenino, nos topemos con un juego con incluso menos profundidad que la edición original. Es un juego algo sencillo en su planteamiento jugable, o por lo menos en la forma en la que se plantea el apartado de exploración social.
¿Y qué ocurre con el sistema de combate y con la exploración de mazmorras? Por suerte, aquí no se ha tocado nada, y se sigue presentando la misma exploración procedural presente en la entrega original. Eso sí, los que hayáis jugado a Persona 5 y vengáis a jugar por primera vez a este título debéis tener muy en cuenta lo siguiente: aquí no hay mazmorras individuales al uso, si no que todo el juego se desarrolla en torno a la exploración del Tártaro. Vale, hay un par de secuencias de exploración y combate que sí que ocurren en lugares alejados de la torre, pero no consiguen presentar la profundidad en su diseño que sí presentan las entregas posteriores. Todo es mucho más arcaico y no alcanza el nivel de profundidad de la quinta entrega, pero esto se solventa con una rapidez vertiginosa en sus adictivos combates. Explorar cada planta de la torre acaba enganchando, especialmente al no saber qué podremos encontrar a la vuelta de cada esquina. En definitiva, es un juego que presenta tanto luces como sombras: su exploración social podría ser mucho más profunda, mientras que su apartado de combate sigue siendo igual de adictivo que el del resto de juegos de la saga. Es un juego mucho más duro que sus entregas posteriores, por lo que quizá no lo recomendaría a los jugadores más novatos.
Cogito, ergo sum
A nivel visual se ha intentado mejorar el apartado del título original, todo con el fin de que pueda ser disfrutado en las pantallas modernas. Y digo intentado porque, las cosas como son, no es nada fácil adaptar el apartado visual de un juego de PSP a las consolas actuales. El juego, en general, se ve bien: los modelos de los personajes se ven nítidos, los efectos no terminan de desentonar y las imágenes de los personajes gozan de un tratamiento más que decente. Sin embargo, los fondos no terminan de funcionar al estar, en ciertas ocasiones, algo borrosos o «rotos» (ciertos fondos parecen alterados por una IA). Y esto es una pena, ya que en esta edición los fondos son los auténticos protagonistas, estando presentes en casi todos los diálogos. Un trabajo decente que, las cosas como son, podría haber sido mejor.
Por último, cabe destacar que el sonido ha sido, tristemente, maltratado. La maravillosa dirección sonora del título original se ve completamente alterada en esta reedición, que trae consigo una calidad sonora lamentable. No se ha trabajado nada a la hora de mejorar el sonido del juego, lo que es criminal teniendo en cuenta que Persona 3 tiene un gran doblaje y una de las mejores bandas sonoras musicales de todo el catálogo de juegos de Atlus.
Conclusión: Un gran título que podría ser aún mejor
Persona 3 Portable es, a todas luces, un RPG único y realmente entretenido, que consigue abordar una temática profunda a través de una historia repleta de grandes personajes y de giros de guion inesperados. Su ritmo no se cae en ningún momento, y es de esos juegos que nos dejará al borde del asiento hasta el final. Sin embargo, para ser un regreso tan ansiado uno esperaría toda clase de mejoras… Y Atlus no ha conseguido hacer justicia a tan magna obra. El regreso de Persona 3 Portable es un regreso adecuado que, por desgracia, podría ser mejor. Quizá la clave habría sido traer Persona 3 FES, que es la versión más completa y redonda del título, o quizá se podría haber mejorado el apartado gráfico y visual. Sea como sea, Persona 3 Portable es una buena edición para conocer una de las mejores historias jamás escritas dentro del género del JRPG, que recomiendo especialmente a los amantes del género.