[Análisis] Project Cars 2

Parece que Slightly Mad ha decidido sacar su simulador de vehículos en el mejor momento para enfrentarse a dos pesos pesados dentro del género, Gran Turismo Sport y Forza Motorsport 7, pero esa es la desafortunada posición en la que se encuentra Project Cars 2. La secuela del estudio británico financiado mediante crowfunding, busca destacar aún más con el aumento del número de disciplinas de automovilismo disponibles a un grado francamente vertiginoso, y os aseguramos que hay más que suficientes en este título para asegurarse de que nunca nos aburramos.

JUGABILIDAD

Al igual que con la entrega anterior, el título nos da todas las herramientas que necesitamos para divertirnos, y luego nos suelta para que sigamos nuestro propio camino. Los ajustes preestablecidos hacen que sea fácil de sumergirse en un evento con atributos del mundo real, pero somos libres de ajustar y afinar todo lo que queramos.

El juego ofrece tres modos de juego distintos fuera del modo de carrera: evento personalizado, pruebas privadas y en línea. Estos modos nos permitirán elegir un coche, realizar un seguimiento y ajustar diversos aspectos tales como el tiempo, la hora del día, el recuento de vueltas, la vuelta de calificación, etc. La única diferencia principal entre los tres es que con el evento personalizado nos enfrentaremos a múltiples corredores (hasta 31). Con las pruebas privadas, solamente seremos nosotros, la pista y nuestro coche. Con los eventos personalizados, también podrás ajustar la agresividad y la dificultad de los pilotos de la IA, así como seleccionar hasta cuatro clases de autos con los que podamos competir. Mientras que el apartado en línea nos permite jugar con corredores de todo el mundo o incluso podemos configurar nuestra propia carrera, con las especificaciones y clases que queramos.

El punto crucial aquí es que los menús son mucho más fáciles de navegar, y se puede salir de las carreras más rápido que nunca antes. Todo está desbloqueado desde el principio, y al igual que su predecesor, el modo carrera nos permite elegir por donde queremos empezar; ya sea en la modalidad fácil o en una más avanzada, depende totalmente de nosotros. Hay tanta variedad en la campaña que es realmente difícil escoger.

Por supuesto, también hay alguna inconsistencia. La gira IndyCar está totalmente licenciada, por ejemplo, mientras que obviamente la F1 no lo está, por lo que hay altos y bajos en términos de representación en el mundo real. Pero lo más importante es que cada disciplina se intenta representar de la forma más auténtica posible, con grandes vehículos de manejo y sistemas de progresión que reflejan con precisión cada deporte individual.

Si bien es cierto que el contenido se extiende muy bien en todas las diferentes disciplinas, puesto que resulta que el título cuenta con más de 170 coches y más de 60 localizaciones. Aún más impresionante, cada una de estas pistas son impulsadas por una nueva tecnología llamada Live Track 3.0, lo que significa que las ondulaciones de la superficie de la carretera se han medido con el fin de asegurar que los charcos de agua se formen correctamente cuando llueve. Pero todavía hay más, y es que el título incluso representa la transición de la grava desde el borde de la carretera en el asfalto.

Por supuesto, mientras que todos los componentes del juego aseguran que hará las delicias de los jugadores de más veteranos de los juegos de carreras, vale la pena mencionar que también se ha tenido en cuenta la accesibilidad. Las carreras en Project Cars 2 siempre están llenas de tensión mientras luchamos por llegar en primera posición, o simplemente luchamos para mantener nuestro coche en la carretera, y aún más cuando el tiempo da un giro en nuestra contra. En esta ocasión el control se ha mejorado y el título se juega mucho mejor con un gamepad tradicional, lo que debería ayudar a que todos aquellos que no cuenten con un volante suplementario, se decidan a darle una oportunidad. Los coches no giran violentamente mientras que apenas nos da tiempo a intentar corregir esta situación; esta vez son mucho más sensibles y el giro es más suave, aunque esto no quiere decir que sea fácil.

Project Cars 2 tiene ciclos completos de día y noche y clima dinámico, la aleatoriedad de las carreras más largas hace que los recorridos sean muy agradables. Las lluvias, por ejemplo, tienden a formar charcos en las esquinas, provocando cambios en nuestra línea de carreras al intentar evitar el aquaplaning. Del mismo modo, la estación del año en la cual estemos llevando a cabo nuestra carrera puede jugar un papel importante en nuestro rendimiento, ya que incluso la temperatura del asfalto se mide.

Esto hará que todo cambie vuelta a vuelta, gracias al nuevo modelo de física que Slightly Mad Studios ha implementado, con superficies de neumáticos y carriles evolucionando y cambiando con la temperatura y las fuerzas puestas a través de ellas. Esto significa que los niveles de agarre cambiarán constantemente a lo largo de un fin de semana de carrera. Cuando la pista se moja, esos niveles cambiarán bruscamente, y tendremos que seguir la trazada correcta si queremos evitarnos tener un disgusto en estas condiciones traicioneras. Este es el nivel de detalle que se ofrece en este título, y es mucho más que cualquier otra cosa que he visto en un juego de carreras.

Hay también una importante variedad en cuanto a la dificultad, lo cual nos permitirá ajustar la inteligencia artificial de manera óptima, para que podamos establecer el nivel de desafío que consideremos más justo para nuestro nivel de juego. Igualmente consta de un interesante enfoque centrado en la comunidad, con tablas de clasificación y los ensayos de tiempo de rotación diseñado para mantenernos constantemente volviendo a por más carreras, por lo que habría sido agradable ver un poco más sobre las carreras de tutoriales como parece que va a ofrecer la nueva entrega de Gran Turismo. Pero dicho esto, el título incluye más que suficiente información para explicar sus complejidades, e incluso hay un ingeniero de carreras que nos ayudará a hacer los ajustes adecuados para nuestros viajes.

GRÁFICOS Y SONIDO

Desafortunadamente, a pesar de que el juego ofrece sus mejores esfuerzos, está un poco lejos en cuanto a las cotas gráficas que ofrecen otros competidores. No os equivoquéis, el juego tiene ciertamente sus momentos, los efectos del tiempo son para mi un punto culminante, pero la iluminación es mucho más plana que lo que debería ser, y esto hace que el juego entero parezca un poco monótono. Es impresionante cuando ves como el sol se levanta alrededor tras salir de las nubes de lluvia de Le Mans, pero las imágenes están por debajo de los títulos más altos de este género.

Los sonidos son un caso aparte, algunos son realmente buenos, mientras que otros son simplemente terribles. Es evidente que hay un montón de trabajo al tratar de hacer que cada coche suena como su homólogo de la vida real, pero no creo que esto funcionase como estaba previsto. Los sonidos del motor en el juego son muy agudos. Otros sonidos son confusos y son muy diferentes de lo real.

CONCLUSIÓN

A diferencia de otros juegos en este género, Project Cars 2 no pretende ser particularmente accesible. Es descaradamente un título de simulación de carreras al uso, lo que limitará un poco a su público, especialmente si sois de los que estáis buscando otra experiencia de Gran Turismo o Forza. Aunque es mucho más accesible que su predecesor, gracias a la nueva configuración del controlador (que sigue siendo completamente personalizable), sigue siendo mucho más brutal e implacable que cualquier otra cosa en su nicho de mercado. Pero también es el título en su género más completo que existe, por lo que seguro que os proporcionará un tiempo divertido y gratificante al volante de cualquier de sus muchos vehículos.