[Análisis] The Bridge Curse 2: The Extrication

Curiosamente, no ha pasado ni un año desde que analicé The Bridge Curse: Road to Salvation en esta misma web, un juego desarrollado por el estudio taiwanés SOFTSTAR Entertainment que, a su vez, estaba basado en  la película The Bridge Curse (El puente maldito), que de la misma forma, está asimismo basado en la leyenda urbana del puente encantado de la Universidad Tunghai. La película de 2020 que sirvió de fuente al videojuego lanzado tres años después, dispone de una secuela lanzada hace unos pocos días en videoconsolas y PC (The Bridge Curse 2: The Extrication / La Maldición del Puente 2: La Liberación) y, nuevamente, aunque alguno pueda pensar que es una idea original, vuelve a tener un material original detrás que ha servido de inspiración, en este caso, The Bridge Curse: Ritual, una secuela de la película original que está disponible en Netflix.

En esta ocasión, la premisa es la siguiente: “Un grupo de estudiantes pone a prueba un juego de terror de realidad aumentada en una universidad con fama de estar embrujada. Sin saberlo, desatan algo siniestro… y muy real.” Si bien hay ciertas similitudes, el argumento del videojuego de terror de realidad aumentada deja paso a un terror real, ya que lo que comienza como una investigación nocturna por parte de una reportera, así como la grabación de una película escolar por parte de un grupo de estudiantes, pasa rápidamente a entremezclar distintas realidades y épocas en una sucesión de momentos cargados de tensión por sobrevivir, desvelar misterios y, si es posible, volver con vida a tu plano real (que, dicho sea, no es que sea mucho más seguro). Ya os adelanto que si por lo que sea tenéis que elegir solamente entre película o videojuego, este último hace un mejor trabajo en general.

 

Volviendo a tropezar con la misma piedra

The Bridge Curse: Ritual y por ende, The Bridge Curse 2: The Extrication, está fuertemente influenciado por el caso de Elisa Lam, la turista canadiense originaria de China cuyo cadáver fue encontrado en un tanque de agua del Hotel Cecil (hay varios documentales y vídeos al respecto, siendo el más famoso el relacionado con el ascensor y su extraña forma de actuar). Así pues, una reportera se desplaza de noche a la Universidad Wen Hua con afán de investigar el extraño suceso relacionado con la desaparición de un estudiante en dicho ascensor. Por otro lado, un grupo de muchachos del club de cine que están grabando algunas escenas esa misma noche, serán engullidos por la oscura historia de este edificio y de la arquitectura del mismo que, por la naturaleza de su bagua invertido, parece ser un magnífico punto de reunión para la energía negativa y los espíritus vengativos. ¿Qué podría salir mal en esta historia clásica de horror asiático ligado a una escuela en mitad de la noche? O mejor dicho, ¿siquiera algo podría salir bien en todo esto? Siniestras entidades y una sangrienta historia de fondo que les llevará a revivir experiencias del pasado de dicho edificio les esperan.

 

No sueltes nunca tu lámpara

Si bien la experiencia jugable es muy similar a la del título original, hay algunos cambios que, en mi humilde opinión, han mejorado el resultado final de esta secuela. Nuevamente, el juego te permitirá jugar como distintos personajes, cuatro concretamente, la reportera ya mencionada y el trío de estudiantes. A estos se les unirá con frecuencia en el avance de la historia el sargento Huang, el guardia que se encarga de vigilar el recinto, aunque por supuesto, no es controlable. Conservando la exploración, la resolución de rompecabezas y, lo más importante y atractivo, las entidades sobrenaturales, logra mejorar en relación a otras cosas que aportaban menos, como las interacciones mediante el móvil y uno de sus puntos más desagradables, las frustraciones secciones de prueba y error al llevarse a cabo una de las “secciones de jefe” de turno. Por supuesto, diseccionaremos esto más adelante, pero quería dejar claro cuanto antes que esta segunda entrega es mejor y está más pulida, algo que siempre es de agradecer, pues deja claro que SOFTSTAR Entertainment ha hecho los deberes.

Como título de terror en primera persona (ojo, que no survival, pues no hay enfrentamientos directos), pasarás la mayor parte de tu tiempo deambulando por los pasillos que componen la enorme institución educativa, yendo de un lado a otro para conseguir información y objetos que te permitan avanzar, como llaves o fusibles, viejos conocidos dentro del género. Por supuesto, los escenarios más mundanos se van mezclando con lo grotesco y lo aterrador cuando el ascensor encantado va descendiendo hasta los infiernos. Asimismo, hay diferentes archivos en forma de escritos que te ayudarán a entender mejor la historia de fondo que ha conducido a esta escabrosa situación. Igualmente y si bien la exploración suele estar bastante limitada, hay algunos elementos coleccionables diseminados por edificio, amén de una interacción por capítulo con Poochie, la mascota de la Universidad Wen Hua.

Una vez más, los puzles son el punto fuerte del juego. Hay muchos de ellos a medida que avanzas en tu periplo, y todos están perfectamente planteados. Son desafiantes pero nada oscuros, pues siempre que seas un poco observador con el entorno y pienses un poco en las cosas, cualquier acertijo que se te presente se puede resolver sin mucho problema. En última instancia, lo que importa es que sean gratificantes. Al resolverlos, sientes una genuina sensación de logro. Por otro lado, si bien se conservan las persecuciones entre fantasmas y nuestros protagonistas, se han modificado lo suficiente para hacerlas igual de tensas pero mucho más llevaderas. Olvídate de intentar esconderte dentro de una taquilla o de un armario, pues ahora todo se soluciona corriendo y escogiendo los caminos correctos, o sobreviviendo y mareando al espíritu vengativo de turno el tiempo necesario para que nuestra linterna de gas salvadora pueda ayudarnos. Todavía es posible esconderse bajo las mesas en secciones en las que el enemigo nos busca, pero es más fácil predecir los patrones de los mismos y saber cuándo salir con afán de avanzar y cuándo no.

En duración es más o menos similar a The Bridge Curse: Road to Salvation (unas cinco o seis horas), ya que su formato episódico y el hecho de no hacernos volver sobre nuestros pasos de forma constante, al no tener que ir de un edificio a otro dentro del complejo ni por los alrededor de este, haciéndolo mucho más pasillero, hace que al final sea más fácil ir del punto A al punto B sin dudar demasiado. No obstante, su excelente ritmo consigue que el tiempo se pase volando, por lo que las horas con esta entrega son mucho más llevaderas que con el título original. De hecho y aunque uno pueda pensar lo contrario, ya que la falta de jefes puede llevar a pensarlo, hay ciertos enemigos que tienen una aparición estelar y consiguen ponerte nervioso, desde la consorte sin cuello hasta mi favorita, la bailarina demente. Jamás había vivido una tensión así viendo a una bailarina de ballet acercándose de esa forma hacia mi pantalla.

 

La dura vida estudiantil

Los gráficos son correctos, igual que ya lo eran en el otro juego, con sus más y sus menos, pero no hay nada concreto que consiga llamar la atención, ya que a fin de cuentas son muchos los desarrolladores independientes que buscan conseguir que su juego de terror en primera persona sea fotorrealista hasta decir basta (a veces olvidándose de otras cosas más importante por el camino). Los diseños de fantasmas eran espeluznantes, pero nada que no hubiera visto antes. Hay un espíritu en particular cuyo diseño destaca por encima del resto. Los diseños de personajes estaban bien, pero las texturas de los modelos de personajes no se veían bien sombreadas. Las texturas del entorno y la iluminación eran buenas, lo cual permitía ver con claridad sin necesidad de excesos de oscuridad, como los que he vivido en otros títulos no hace mucho.

En cuanto al sonido, me alegra señalar que la actuación de voz es también mejor de lo que era en el original (aunque de nuevo, la sincronización labial parece ser algo que para el desarrollador carece por completo de importancia). Nuevamente, hay traducción al español, aunque hay algún que otro fallo de traducción. Huelga decir también que, a menos que tengáis ciertos conocimientos sobre folclore asiáticos y demás, es posible que estéis un poco desconectados durante algunas conversaciones en las que aparezcan ciertos términos.

 

Conclusión

The Bridge Curse 2: The Extrication es una entretenida experiencia de terror taiwanesa que consigue mejorar en todos los aspectos a su antecesor. Si quieres pasar una terrorífica noche mientras intentas sobrevivir a las oscuras presencias que acechan en la Universidad Wen Hua, no lo dudes, déjate atrapar por lo último de SOFTSTAR Entertainment. Asimismo, si sois más de formato físico, os interesará saber que Meridiem Games lanzará el juego a finales de septiembre de este mismo año en PlayStation 5 y Nintendo Switch.