[Análisis] The Elder Scrolls Online: Horns of the Reach

The Elder Scrolls tiene una riqueza material tan grande para recurrir a la historia y elementos de juego que hay una posibilidad real de que estemos viendo expansiones salir con cierta frecuencia. En esta ocasión tenemos Horns of the Reach, un DLC que contiene dos nuevas mazmorras y tres nuevos compañeros. Estas nuevas mazmorras no son para los débiles de corazón o para los jugadores de bajo de nivel.

La primera de las dos nuevas mazmorras es Bloodroot Forge, como su nombre sugiere este desafío gira en torno a una fragua, que se rumorea que ha sido creado por el príncipe Daedric Hircine y utilizada para fabricar poderosas armas. Parece que ahora ha sido redescubierto por los Reachmen, algo bastante malo, pero están acompañados por sus aliados Minotauros. Cuando comentábamos que hay que estar curtido para entrar a estas mazmorras, no lo decíamos en broma, puesto que habrá que enfrentarse a duros Minotauros.

La segunda mazmorra es Falkreath Hold, que es un municipio que está bajo asedio y no será capaz de aguantar por mucho más tiempo. Nosotros llegaremos como las hordas merodeadoras de Domihaus de Bloody-Horned a tomar el control, y tanto nosotros como nuestros compañeros tenemos la tarea de romper el sitio y derrotar al señor invasor. Una vez más nos enfrentarémos a algunos enemigos devastadores como Reachmen, Minotauros e incluso algunas criaturas Nirnblooded.

Para los jugadores que ya han explorado las amplias tierras de ESO, estas nuevas misiones añaden algunos grandes y nuevos retos, y naturalmente ofrecen interesantes recompensas y suculentos botines. Para los que están todavía un poco más verdes, probablemente prefieran detenerse por un tiempo y coger experiencia antes de saltar a Horns of the Reach… o por lo menos tratar de unirse a un grupo que está bien desarrollado y ver hasta donde pueden llegar.

Los elementos de la historia que se han desarrollado para estas nuevas mazmorras son también bastante atractivos, lo cual es genial. ¿Cómo puede uno no sentirse inspirado a correr hacia una muerte casi segura cuando se enfrenta con alguien cuya ciudad entera, familia y amigos están muertos o en grave peligro? Igualmente, ¿cómo puedes realmente dar la espalda y caminar sabiendo que un mal ha entrado en la fragua olvidada hace tiempo y sus planes están corrompiendo la tierra y la gente alrededor de ella?

Los desafíos que nos esperan impondrán sus habilidades, cuatro pueden entrar, pero ¿cuántos de nuestro grupo saldrán victoriosos, si los hay? Por frustrante que pueda resultar el tratar de superar a estos nuevos enemigo… la satisfacción de finalmente vencerlos es igualmente mayor que las batallas anteriores que hayamos enfrentado.

CONCLUSIÓN

Para los aficionados multijugador de ESO esto es sin duda una adición digna de su creciente paisaje, para aquellos que en general prefieren una experiencia en solitario, probablemente no encontrarán lo que buscan aquí. El mundo de The Elder Scrolls crece cada vez más, y uno no puede menos que preguntarse qué será lo próximo.