
Hace unos días se publicó el informe financiero correspondiente a 2020 del Grupo Sega Sammy, la sociedad gestora japonesa formada por la fusión de Sega y Sammy. Gracias a este, uno puede apreciar información de interés relacionada con algunas de las IPs de la compañía del erizo azul, haciendo especial hincapié en el baile de cifras correspondientes a las ventas del año fiscal que han tenido lugar entre marzo de 2019 y marzo de 2020.
En relación a la serie Yakuza, por ejemplo, se comenta lo siguiente en dicho informe:
“Ryu ga Gotoku” (nombre de la serie en Japón) se introdujo en 2005 con un concepto novedoso y es un gran éxito con un total acumulado de 14 millones de ventas hasta la fecha. Al igual que las películas y los dramas, ha cosechado un gran apoyo debido a su método innovador de hacer que los actores aparezcan en los juegos y su jugabilidad única.
Gracias a este fragmento, es posible confirmar que la serie Yakuza ha vendido 14 millones de unidades, lo que arroja una diferencia de 2 millones de copias extra en relación al pasado año. A esto, habrá contribuido en gran medida el lanzamiento de Yakuza: Like a Dragon, aunque tampoco hay que olvidar que Yakuza Kiwami y Yakuza Kiwami 2 llegaron a Steam en 2019. Igualmente, Yakuza 0, Yakuza Kiwami y Yakuza Kiwami 2 dieron el salto a Xbox este mismo año, pese a que al estar incluidos en Game Pass, posiblemente la aportación a estas ventas haya sido más marginal.
Sea como fuere, siempre es una fantástica noticia ver que una franquicia tan de nicho como esta goza de buena salud en cuanto a ventas se refiere, hasta el punto de que Yakuza: Like a Dragon, al igual que los últimos lanzamientos de Sega, se ha animado con los subtítulos al español, algo que muchos fans demandaban por la ingente cantidad de texto del que suelen hacer gala todas las entregas de dicha saga.
Kalas
Veterano en esto de escribir sobre videojuegos, pero un día me cansé y decidí fundar mi propia web. No soy amante de las marcas, sino de los buenos juegos, aunque Nintendo ha estado muy presente en mi infancia. Sobrevivo en mi lucha por convertirme en un especialista en Asia Oriental.