[Primeras impresiones] Diablo III: Eternal Collection para Nintendo Switch

[Primeras impresiones] Diablo III: Eternal Collection para Nintendo Switch

El pasado jueves tuve la oportunidad de probar versión avanzada de Diablo III: Eternal Collection para Nintendo Switch (me arriesgaría a decir que a un 80 o 90%),  Y aunque como jugador llevo años alejado de Diablo y cualquier cosa ligada a su maravilloso universo, tengo algunas cosas que contaros al respecto.

 

Una de las primeras cosas que se pueden notar al jugar Diablo III: Eternal Collection en Switch, es que Blizzard ha tomado la sabia decisión de curarse en salud y habilitar el cooperativo local desde un principio. Me he sentido muy cómodo y nostálgico jugando junto a otros compañeros en LAN y comentando estrategias o curiosidades sobre lo que íbamos encontrando. Para esto, cada usuario necesitará tener una Nintendo Switch y una copia del juego, nada de Internet o conexión a servidores.

Expectativas superadas

Los frames del juego son estables, no he llegado a experimentar caída de ningún tipo o problemas con la acumulación de enemigos o elementos en pantalla, lo cual me parece perfecto y me impresiona. Personalmente y al tratarse de una versión avanzada pero no terminada, esperaba tener algunos problemas con la tasa de frames. Así que, sí, la promesa de los 60 frames ha resultado ser real y seguramente no decepcionará a nadie.

La resolución también cumple y los textos y elementos en pantalla se pueden ver de forma nítida en el modo dock y portátil, por tanto no hace falta forzar la vista para poder enterarnos de lo que está sucediendo.

El contenido del juego no presenta grandes novedades, están los objetos únicos de la versión de Nintendo Switch (por cierto, es muy curioso entrar en una catedral y luchar contra todo lo que se te aparece mientras un cuco revolotea cerca de ti), pero por todo lo demás, es el contenido base más todo el contenido extra que haya aparecido hasta el momento. Eso último no significa que el juego esté pobre de contenido, en absoluto. Si tenemos en cuenta las clases y posibilidades, estamos ante un título que nos da para muchas, muchas horas de juego.

Y ahora hablemos de los controles, la verdad es que se maneja muy bien en Nintendo Switch. Puede que en un principio resulte confuso para alguien que nunca ha jugado a Diablo III, pero tras unos pocos minutos de juego, todo se convierte en intuitivo y terminas sintiéndote cómodo e impresionado por esto.

Con poco más que decir, debo destacar que la versión que pude probar contaba con voces en inglés y textos en español, pero la buena gente de Blizzard no ha dudado en asegurar que la versión que se estrenará a inicios del próximo mes contará con voces y textos en español.

Y eso ha sido todo de momento, no puedo negar que el hecho de que Diablo III: Eternal Collection ya haya visto la luz en otras plataformas y su precio sea de 59.99 euros (en formato digital y físico) hagan que te lo pienses dos veces el próximo 2 de noviembre, pero tampoco puedo negar que Blizzard se está esforzando mucho en hacer esta versión. Sus acciones y lo que he podido ver y probar dan la impresión de que quieren ofrecer un producto hecho con mimo y pensado en Nintendo Switch, no un simple port.