En el ámbito de los videojuegos, que es el que a nosotros nos interesa, hemos tenido una gran cantidad de obras que han abordado este tema, tomándolo como tema principal o como simple curiosidad. Así, en juegos como Dragon Quest o The Elder Scrolls podemos encontrar a estos seres sin que sean los principales protagonistas o antagonistas del juego, o sin que el foco del mismo esté sobre ellos, mientras que en obras tales como la saga Castlevania, Vampire The Masquerade, o el más reciente Vampyr los tipos de colmillos largos y cierta alergia a la luz solar son los auténticos protagonistas o antagonistas, girando gran parte del juego en torno a los mismos. El juego que hoy tengo el placer de analizar se encuentra dentro de este segundo grupo, ya que se centra no solo en un grupo de vampiros, sino en varios, puesto que nos pondremos a los mandos de varias familias de estos enfrascadas en una cruenta guerra. Desarrollado por Palindrome Interactive, un pequeño estudio sueco, y distribuido por Kalypso Media, Immortal Realms: Vampire Wars propone una interesante mezcla de estrategia, rol y elementos propios de los juegos de cartas en un mundo plagado de clanes vampíricos. ¿Se trata de una buena mezcla, o está mal llevada? ¿Es un buen juego de estrategia? ¿Y que tal está la historia? Veámoslo.
Vampiros, las criaturas de la noche
En Immortal Realms: Vampire Wars la trama está narrada a través de tres campañas distintas en las que controlamos en cada una a un clan vampírico distinto. Así, por un lado encontramos a los Drácula, descendientes directos del primer vampiro, de aspecto humanoide y que tal y como su nombre indica están liderados por una versión propia del vampiro protagonista de la novela del mismo nombre; Por otro lado, encontramos a los Nosfernus, descendientes corruptos de aspecto cercano a murciélagos humanoides y con clara inspiración en Nosferatu, protagonista de la cinta del mismo nombre; Y por último encontramos a los Moroia, también de aspecto humanoide y más hermoso, aunque a diferencia de los Drácula estos están centrados principalmente en las artes mágicas y el control mental. Los tres clanes son bastante distintos entre sí y esto se refleja en la historia, lo que hace que la historia del título se sienta bastante más interesante dado a que se puede abordar desde estos tres puntos de vista. Los personajes que protagonizan cada uno de los clanes son interesantes, y si bien no se profundiza mucho en ellos, lo que podemos conocer es interesante. No tiene la profundidad de otras obras del género, pero lo que conocemos se aleja de lo cliché para ofrecer algo de interés.
¿Y cual es el contexto por el que controlamos a cualquiera de estos clanes? Pues bien, la historia del título nos narrará los choques entre los cuatro líderes de los clanes antes mencionados en Nemire, debido a distintos motivos que es mejor no mencionar debido a posibles spoilers. Lo interesante de la historia lo encontramos en la construcción de su mundo, que es interesante y original, y en el desarrollo de la misma. Se trata de una trama interesante y creativa, que aunque no está narrada tan bien como debería, si que consigue captar la atención del jugador y mantenerlo interesado en el título.
Pero a mi gusto personal, la trama no es lo más importante de este título, si no que se mantiene a un segundo plano en comparación con el apartado central del título: la jugabilidad.
Id preparando el ajo y las estacas de madera…
Lo más interesante del título, y a su vez su punto más fuerte, lo encontramos en su jugabilidad, que tal y como mencioné antes, mezcla ideas y elementos de tres géneros distintos, siendo estos la estrategia, el rol y las cartas. Dentro de los tres modos de juego que encontramos en el juego tenemos una serie de puntos en común, pues en todos estos podemos controlar a nuestras tropas en amplios mapas durante nuestros turnos, en donde podemos controlar pueblos, interactuar con distintos escenarios, aumentar nuestras tropas o enfrentarnos a nuestros enemigos. Al entrar en combate el escenario cambia, y pasamos a uno bastante más reducido en donde controlar uno a uno a nuestras tropas, al más puro estilo Fire Emblem. Aunque a diferencia de la saga de Nintendo, este título cuenta con un mayor nivel de profundidad y estrategia al incluir el sistema de cartas (que me han recordado bastante a juegos como Magic: The Gathering), con las que poder atacar, protegernos o curarnos (entre distintos efectos) sin tener que perder turnos. Hay cartas de distintos tipos, pudiendo usarse unas durante las fases de exploración del mapa general y otras durante las fases de batalla. Estos son, en resumidas cuentas, los tres puntos principales a nivel jugable del título, contando una decente mezcla de ideas ejecutadas de buena manera, ya que todos estos aspectos cuentan con una profundidad interesante y están incorporados de manera orgánica aunque, como punto negativo, es cierto que para alguien ajeno a los títulos del género quizá al jugar a este título se pueda sentir algo perdido ante tantas opciones, y aunque hay un tutorial, la cantidad de opciones y elementos en pantalla acaba siendo algo abrumadora para alguien más novato.
En cuanto a los modos de juego, encontramos tres modos principales de juego, siendo estos el modo campaña, el modo mundo abierto y el modo escaramuza. En el primero nos pondremos al mando de uno de los tres clanes para desentrañar todos los misterios que guardan la trama del título, siendo el modo más convencional, con un total de 12 misiones y una duración aproximada de 15/20 horas. En el modo sandbox podremos explorar libremente el amplio mapa, aumentando tropas y conquistando territorios y pudiendo alterar distintos parámetros para personalizar la partida a nuestro gusto. En cuanto al modo escaramuza, en este deberemos ceñirnos a los parámetros establecidos por el juego, siendo el modo más desafiante del título, recomendado solo para los jugadores más experimentados. Como podéis, el título cuenta con bastante contenido, una decente variedad de modos cuyo defecto lo encontramos en la similitud jugable entre los tres. Si os gusta el género, os va a encantar, pero si no os gusta… Poco encontraréis aquí que os pueda interesar.
Y si os muerden… decid adiós a la luz del día
Siguiendo con el apartado visual del título, es aquí donde más se notan las costuras del mismo, pues si bien no cuenta con gráficos desfasados o pobres para la consola, sí que se podría haber aprovechado mucho mejor, estando en este sentido el título muy atrás con respecto a otras obras del género, como es el caso de los Total War, por poner un ejemplo. Pero es entendible, ya que es el primer juego de un estudio bastante joven. Quizá con una mejor optimización (hay muchas caídas de FPS en el modo combate) y calidad de animaciones y texturas el apartado gráfico ganaría mucho. El motor Unity,usado en el juego, puede dar más de si, desde luego. Lo que si está genial es el diseño artístico, pues los personajes y entornos cuentan con unos diseños bastante buenos y cargados de calidad que no tienen nada que envidiar a otras obras de fantasía del estilo de The Witcher o la ya mencionada Magic.
En cuanto a la dirección de sonido, en general no hay mucho que comentar. La banda sonora no está nada mal, y si bien no destaca mucho en lo positivo, tampoco lo hace en cuanto a aspectos negativos. Está bien, funciona dentro del título y en ningún momento descuadra con la ambientación o historia del título. Mejor parados salen el doblaje en inglés, que tiene un buen nivel y es un gran detalle, y los efectos de sonido, a la altura del título.
Conclusión: Los clanes se acercan, y no hay nada que podamos hacer para pararlos
Immortal Realms: Vampire Wars se trata de un sólido título de estrategia y rol por turnos que nos pone en la piel de varios clanes vampíricos, cada uno de estos con sus propios secretos e intereses, durante el desarrollo de una cruenta guerra. Es una obra realmente completa y, a su vez, compleja, que gustará a todos aquellos fans del género y de la mitología vampírica (ya que el mundo que construye es realmente interesante, siendo este uno de sus puntos fuertes), aunque si bien aquellos más ajenos del género quizá no encuentren aquí la introducción ideal al mismo, pueto que se trata de un título bastante cargado de opciones, llegando a ser un poco abrumador. Pero lo dicho, si os gusta el género y el tema de los vampiros estáis de enhorabuena, pues se trata de un título interesante y divertido.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.