Yo Robot, Vengadores: La era de Ultrón y muchas más son las películas donde se representa algo que desde hace ya varios años se lleva intentando: lograr la creación de máquinas capaces de tener consciencia propia y, por tanto, actuar como un humano lo haría. La Inteligencia Artificial cada vez está más cerca de ser una realidad que un sueño gracias a que se nos da bastante bien el crear este tipo de cosas, o eso parece, aunque no entraré en debate de si será mejor o peor contar con ella. Otra de las cosas que se nos da increíblemente bien hacer a los humanos es comer. Suena absurdo, lo sé, pero ¿a quién no le gusta llevarse algo nuevo a la boca y sentir mayor placer que después de una larga noche de pasión? Si habéis visto el anime de Shokugeki no Soma, podréis haceros una imagen de lo que digo.
Pues en Automachef se viene a juntar un poco todo. Robots que trabajan para crear platos extremadamente deliciosos para el deleite de nuestros paladares. ¿Suena bien? Dejadme hablaros del título de Hermes Interactive, que llega a nosotros a través de Team 17, quienes también se han encargado de distribuir juegos como Overcooked 2 o The Escapists 2. En el caso del juego de hoy, está disponible tanto para PC como para Nintendo Switch (versión que hemos jugado para el análisis) por tan solo 14,99€.
Let’s cook!
Nos ponemos en la piel de Robert Person, un joven y despistado emprendedor con el sueño de crear la mejor cocina del mundo, que servirá como referente para todas las cocinas del futuro.
La mayor gracia de Automachef es que el nivel de dificultad de los puzles propuestos es bastante adecuado, con una curva que crece a una velocidad correcta. Cada vez que completemos un rompecabezas, el siguiente cogerá lo mejor del anterior y lo modificará para que sea más complicado, pero como siempre: a más complicado, más satisfactorio. Y no, no es que sea satisfactorio el tan solo lograr sacar todos los pedidos, porque claro que puedes hacer 10 pedidos correctamente después de haberla pifiado con otros 30, pero la gracia está en poder hacerlo todo de primeras, sin errores, y además cumpliendo con todos los requisitos que nos proponen, eso termina siendo mucho más satisfactorio de lo que a simple vista puede parecer, ya que, os aviso, vais a desperdiciar mucha pero que mucha comida haciendo pedidos erróneos.
Y con esto no quiero decir que vayáis a echar el ketchup en el frankfurt en vez de en el pan como pedía el cliente, sino que vais a tener comida volando por todas partes, exceso o falta de ella, e incluso accidentes en la cocina por los que deberíais llamar a algún servicio de emergencias. ¡Pero no os preocupéis! La mente humana es maravillosa, y con ensayo-error y más ensayo-error seguro que lográis daros cuenta de dónde estáis haciendo las cosas mal y solucionarlo.
Además, para que esto resulte un tanto más sencillo, dispondremos de varios tutoriales que nos explicarán cómo funcionan cada una de las nuevas máquinas que vayamos logrando desbloquear para así darles un uso adecuado y no malgastar recursos o hacer que se entorpezcan entre sí.
Aunque considero que los modos no son algo para resaltar ya que el juego se centra sobretodo en su jugabilidad, creo que merece la pena decir que el modo campaña es bastante largo, pudiendo estirarlo hasta las 10 horas, que a pesar de que a mí no me ha parecido nada del otro mundo, ya que la historia es bastante básica (un robot, nuestro jefe, quiere dominar el mundo de la comida y acabar con el reinado del hambre humano), pero que gracias a cómo está diseñada permite que sea un juego tanto como para dedicarle un par de horas del tirón como para ir jugando partidas cortas a ratos sueltos. El modo contrato viene siendo algo parecido con la diferencia de que gestionamos nosotros directamente el negocio comprando maquinaria y recogiendo encargos, mientras que el modo libre es, básicamente, eso: un modo donde disfrutaremos de total libertad para todo aquello que queramos. Todo esto nos permite disfrutar de muchísimo tiempo en Automachef variando entre nuestros objetivos según a qué modo juguemos.
Apartado gráfico y sonoro
No busquéis un nuevo referente en los gráficos de esta generación porque obviamente no lo encontraremos, Automachef luce con aspecto simplista permitiendo así que las exigencias de la consola sean bajas y dejando que el juego corra con mayor fluidez, que al final es lo que se busca. Además esto hace bastante más ameno el rato que pasemos jugando dado que no tendremos que prestar demasiada atención a detalles, todo está muy marcado (y de buena manera) y se ve claramente gracias, precisamente, a su sencillez de diseño.
En cuanto a la banda sonora, no esperaba demasiado, y así ha sido precisamente. Lo típico de un indie que no necesita de ella para vivir: música animada que case bien con la experiencia jugable y algún que otro efecto de sonido que encaje bien con las situaciones vividas en el momento que suenan, y ya. No creo que haga falta exigir más que esto, ya que no hay nada del apartado sonoro que lastre al juego en sí, sino que lo acompaña de buena manera.
Conclusión
Automachef es un juego bastante entretenido y que, bajo mi criterio, merece la pena comprar teniendo en cuenta su precio y lo que nos va a ofrecer, que son muchas horas de diversión y rompecabezas que harán que nos comamos el coco un poco, sobretodo si queremos cumplir con todos los requisitos y objetivos que se nos proponen. Lo mejor del juego es, precisamente, que permite tanto jugar partidas sueltas como pasar ratos largos delante de la pantalla cumpliendo encargos y tratando de no destrozar la cocina. Por tanto, y con esto sí que acabo ya, recomiendo Automachef a todo aquel que le apetezca un juego que no exija demasiado desgaste mental pero que suponga un mínimo reto.