[Análisis] Wolfenstein II: The New Colossus (Switch)

Creo que todos estábamos un poco sorprendidos por el anuncio hacia que realizaba Nintendo mediante un Direct a finales de 2017, dando a conocer entre otros, que tanto DOOM como Wolfenstein II: The New Colossus llegarían a Nintendo Switch. Después de todo, ambos títulos son bastante atractivos, por lo que uno podría pensar que no sería exactamente una tarea sencilla lograr que ambos juegos se ejecuten en un nivel que nosotros, como consumidores, podríamos llegar a aceptar a la hora de adquirirlos. Pero después de demostrar un trabajo excelente con el port de DOOM, los magos de Panic Button han vuelto a hacerlo, consiguiendo llevar de forma exitosa Wolfenstein II: The New Colossus a la máquina portátil de Nintendo con solo una desventaja obvia, pero necesaria para hacerlo funcionar en un dispositivo portátil, y esta se reduce a un recorte en la calidad visual del juego.

Para dejar esto claro desde el principio, este es exactamente el mismo juego que los usuarios de otras plataformas tuvieron el placer de disfrutar a fines del pasado año, no se ha prescindido de ninguno de los modos y la jugabilidad no se ha tocado. Si conoces el juego de haber jugado anteriormente en otras consolas, entonces sabes de sobra lo que te espera. Si no lo has hecho, entonces lo que te vas a encontrar es otro de los títulos de mayor calidad de Bethesda (que son muchos), uno que tiene todas las características necesarias para ser un excelente shooter en primera persona. De hecho, en esta misma web ya tuvimos la suerte de analizar la versión de PlayStation 4, y recibió el premio a mejor shooter del 2017 gracias a las votaciones de los usuarios.

En esta ocasión, y como ya hemos realizado una review al uso de este título con los puntos habituales, quisiera centrarme más en el port a Switch, su funcionamiento, resolución, añadidos, etc. ¿Queréis saber cómo ha salido esta versión? ¿Es igual de disfrutable que el resto? ¿En qué mejora y en qué empeora? ¡Acompañadnos si queréis saber más sobre este maravilloso título de Bethesda!

Sobre la historia

Esta es una secuela directa de Wolfenstein: The New Order, como está implícito con el ‘II’ en el título. La historia continua inmediatamente después de la conclusión de ese juego y, como tal, si eres nuevo en la serie o no tienes nada más que una consola de Nintendo, entonces estás perdiendo muchos de los puntos de la trama que componen una historia sorprendentemente buena. Puedes seguir la trama, pero muchos de los grandes momentos, especialmente en las primeras horas de juego, no te sorprenderán ni te afectarán tanto como a alguien que ha podido completar el primer título. En términos generales, la historia y el reparto siguen siendo algunos de los mejores que he podido jugar en títulos enfocados al juego en solitario.

Es una pena que The New Order no haya sido porteado a la consola, ya que habría ayudado a muchos a hacerse mejor con la historia, pero no podemos hacer gran cosa al respecto. Aun así, se incluye un breve vídeo resumen para explicar las cosas a los nuevos jugadores, lo cual es siempre algo de agradecer.

El port de Switch

Al igual que DOOM, Wolfenstein II: The New Colossus funciona sorprendentemente bien en Nintendo Switch y es una alegría absoluta poder jugar donde quiera que estés. Al igual que en el port de DOOM en la consola híbrida, hay algunas texturas turbias y problemas con el framerate, algo que seguramente no extrañará a nadie. La resolución y algunas texturas de baja resolución evitan que esta versión brille tanto como las demás versiones de consola y PC, sin embargo, es habitual cuando se hace un port de un portento así a una consola con componente portátil. Obviamente, Switch no tiene tanto poderío como otras consolas en el mercado, pero eso no significa que el encanto de este juego haya desaparecido.

Los controles se sienten naturales y responden cuando se usan los Joy-Con. Por supuesto, las cosas se sienten más naturales si hacemos uso de un mando Pro, pero los Joy-Con hacen bien el trabajo si no dispones del mando de Nintendo. Al apunte por movimiento sigue siendo una opción independiente y puede que venga bien a todos aquellos que se decantaron por utilizarlo en DOOM. Si bien lo que se busca con esto es hacer que el objetivo sea más preciso, existe la opción de activarlo y desactivarlo, si prefieres un enfoque más tradicional de tu ataque nazi. Otra buena adición es el HD Rumble, que agrega una nueva capa de inmersión a Wolfenstein. Cada arma tiene sus propias vibraciones únicas que te hacen sentir aún más poderoso cuando te enfrentas a los mejores de Alemania.

El problema más evidente que los jugadores notarán rápidamente, son las incoherencias en la velocidad de fotogramas. En la mayor parte de nuestra aventura, Wolfenstein II: The New Colossus tiene alrededor de 30 fps. Sin embargo, cuando nos encontramos con grandes grupos de nazis sedientos de sangre, hay un descenso notable en el rendimiento, y esto ocurre tanto en el modo dock como en el portátil. Asimismo, noté que al llegar a áreas más abiertas, los gráficos sufrían en consecuencia. De todas formas, esto de ninguna manera es un factor decisivo y no afectó a mi disfrute del juego, pero puedo entender que será algo molesto para aquellos que prefieren una experiencia más racionalizada. Noté que incluso algunas escenas de corte cayeron un poco, lo que fue muy extraño para mí teniendo en cuenta que las escenas de vídeo están preprocesadas. Al jugar en una pantalla más grande, también notarás algunas texturas de baja calidad con bastante claridad. Dicho esto, el juego se ve bien, aunque me veía en la obligación de comentar que en ocasiones la calidad y los fps bajan.

De todas formas, no debéis dejar que todas estas imperfecciones extremadamente menores os impidan disfrutar de una experiencia inmensamente agradable. Wolfenstein II: The New Colossus es un gran añadido a la biblioteca en constante crecimiento de Switch y que en caso de no haber podido jugar aún en otra plataforma, no te deberías perder.

Conclusión

Si bien Wolfenstein II: The New Colossus en Nintendo Switch no es la versión más bonita ni la más fluida del juego, sigue siendo un port fantástico que merece la pena experimentar. El HD Rumble agrega una nueva dimensión de inmersión exclusiva en la híbrida de Nintendo, y la opción portátil es una excelente manera de permitir que nos desahoguemos matando algunos nazis independientemente de dónde nos encontremos, aunque bien es cierto que este es también su talón de Aquiles, puesto que es en este modo de juego donde más sufren los gráficos y los framerates. En general, es un brillante FPS que merece su lugar en Switch y uno que insto a los fans del género a jugar, independientemente de la versión que prefieran.