Un año más llega la nueva entrega de NBA 2K, el rey de los juegos de baloncesto y uno de los mejores simuladores de deportes del mercado, y con este las preguntas de todos los años ¿habrá nuevo contenido que merezca la pena? ¿Se han pulido los modos de juego? ¿Es disfrutable el online? ¿Y los micropagos? La respuesta a todas estas preguntas las tienes en las próximas líneas.

 

Más animaciones, más físicas

Como todos los años, Visual Concepts pone empeño en mejorar y añadir animaciones a cada nueva entrega, uno de los principales motivos por el que NBA 2K consigue ser un simulador bastante realista.

En esta ocasión, además de las nuevas animaciones se ha mejorado de forma notable el uso de las físicas, minimizando el uso de las animaciones predeterminadas, como por ejemplo, a la hora de entrar a canasta (algo que agradecerán mucho los jugadores más metidos en el mundillo del competitivo online), esto hará que características como el tamaño o el peso de los jugadores tengan una repercusión mayor en la jugabilidad, en especial en el caso de los pivots, ya que el juego en el poste ha sido el mayor beneficiado.

También se ha perfeccionado el medidor implementado en las bandejas y mates, donde al igual que en el resto de tiros de campo, ahora se tendrá en cuenta el timing y la defensa del rival. Esto no solo le otorga más realismo, sino que es otra de las medidas para evitar caer en el abuso de animaciones predeterminadas imparables que nos obligarán a mejorar nuestras habilidades y jugar con más cabeza.

Seguramente el apartado que más se ha visto beneficiado por todas estas medidas sea la defensa, mucho más divertida y realista, eliminando la frustración a la hora de frenar al rival, sobretodo en el online.

 

Equilibrio y optimización

Es complicado dar un paso hacia delante con entregas anuales obligadas a respetar sus bases y con poco espacio para maniobrar, por lo que es de agradecer el empeño de Visual Concepts en pulir cada uno de sus apartados y eliminar esos pequeños errores que te permiten tener un producto cada vez más completo.

Lo primero es la implementación de las habilidades especiales, donde ahora, cuando un jugador entra en racha, no se potencian todas sus stats, si no aquellas en las que destaca. Esto, sumado a la mejora de la IA, que obliga a cada jugador a jugar y a comportarse de forma más acorde a sus stats y habilidades, añade un plus de realismo a los partidos que agradecerán aquellos que no solo se dediquen a jugar online, además de dar el toque personal a cada jugador y equipo.

También se ha mejorado el HUD, consiguiendo que el medidor este año sea más claro e intuitivo, lo que facilitará al jugador a controlar mejor factores como el timing a la hora de anotar.

Sin lugar a dudas estamos ante la simulación más realista y profunda de la saga.

 

Mi jugador

Este modo vuelve a ser uno de los focos principales un año más, añadiendo una nueva historia llamada ”El camino de vuelta”, que cuenta seguramente, con el mejor guión que vayamos a ver en un juego del estilo, retratando con bastante esmero las dificultades por las que pasan los jugadores menos talentosos para llegar a la NBA. Sin embargo, una vez completada la narrativa principal, como ya es habitual, el modo se queda sin contenido y la única razón para seguir jugando es la obtención de VCs, por lo que a la lista del año que viene, 2K debería añadir un mayor número de cinemáticas, entrevistas y situaciones a la hora de desarrollar las temporadas.

Por otro lado el parque cuenta con un rediseño y una mejor distribución en comparación a la de juegos anteriores, ¡y ha añadido medios de transporte!, así que moverse por las canchas será mucho más cómodo este año, algo que nunca sobra.

Como extra también podremos disputar de una nueva modalidad con camas elásticas donde se llevarán a cabo mates espectaculares que otorgarán al juego un toque arcade, caótico y divertido que nos permita desconectar y variar un poco de la jugabilidad clásica.

 

La fiebre de las VC

A la hora de modificar a nuestro jugador visualmente o a nivel stats, contaremos con las herramientas de siempre: varios centros de entrenamiento, tiendas para personalizar, peluquería, etc., donde todo se regirá por la economía de los VC.

No se puede decir que 2K no haya aprendido de sus errores, ya que ha aumentado la facilidad para ganar VC y los costes de muchos productos se han visto reducidos en vista a años atrás, y la polémica generada alrededor de la economía del juego. Sin embargo, mejorar a nuestro jugador sigue siendo lento y frustrante si no introducimos dinero real en el juego, produciendo un aura de ”pay to win” que no va a gustar a la mayoría.

 

Pro Am

Pro Am es, sin duda, uno de los modos más atractivos del juego y posiblemente el que más puedan llegar a disfrutar los verdaderos forofos del deporte en cuestión. Las bases siguen siendo las mismas, NBA 2K19 te da la oportunidad de crear un equipo y jugar un clásico 5 vs 5 en el que cada usuario controla a un solo jugador (el creado por él), la guinda del pastel a la hora de simular un partido real.

Este año 2K ha decidido introducir dos grandes diferencias, una completamente necesaria que ya pedían los fans de la saga y otra muy arriesgada y polémica, pero que considero acertada: la primera es permitir los emparejamientos privados mediante contraseña, que facilita enormemente el poder jugar con amigos; la segunda y la que ha dado más de que hablar, es el hecho de que ya no podrás disputar partidos Pro Am si no formas parte de un equipo completo, ya que no se rellenarán los huecos con la CPU. Obviamente, esto resultará un problema a aquellos jugadores que no cuenten con 4 amigos disponibles con regularidad pero mejorará la experiencia general al limitar los partidos a enfrentamientos entre jugadores reales.

 

Mi equipo

Tratándose del modo en el que por lo general más horas van a invertir los jugadores, 2K ha decidido ser conservador en este aspecto.

Aunque se han añadido modos de juego y opciones de colección, el proceso será el de siempre, jugar y comprar sobres (micropagos o dinero del juego) a medida que avancemos para ir creándonos un equipo cada vez mejor, sin perder la cómoda progresión que se ha vuelto una de las principales fortalezas del juego. Completar retos y ganar partidos nos permitirá, tarde o temprano, hacernos con un equipo de los mejores jugadores, al contrario que en otros juegos de deportes, donde las mejores cartas acaban con un rango de exclusividad demasiado elevado para los jugadores menos experimentados.

 

Gráficos y sonido

El apartado gráfico es espectacular como siempre, que a pesar de no dar un gran salto visual, mejora en los pequeños detalles como las físicas y las animaciones, otorgándole un acabado mucho más pulido y redondo.

Y qué decir del juego a nivel sonoro, con una gran selección musical a cargo del conocido rapero Travis Scott, comentarios actualizados y en castellano de la mano de los habituales Jorge Quiroga, Sisto Miguel Serrano y Ántoni Daimiel, sin olvidarnos como no, de la opción de los comentarios en versión original donde las opciones son incluso más variadas y darán pie a entrevistas, previas e incluso colaboraciones especiales (aunque siguen sin llegar con subtítulos al castellano).

 

Conclusión

NBA 2k19 no arriesga demasiado ni trae grandes mejoras gráficas, algo que la mayoría de jugadores no exigen ni esperan cuando hablamos de entregas anuales. Sin embargo, hay otras maneras de dar un paso adelante y Visual Concepts sigue presentando su candidatura a juego deportivo del año.

Las físicas, la IA y varios aspectos jugables se han pulido enormemente con la intención de mejorar el realismo del juego sin abandonar la diversión. También se ha reducido la frustración en varios de sus apartados y ha tomado el camino correcto respecto a los micropagos, aunque sigue siendo un punto a mejorar en futuras entregas.

En resumen, no te lo pienses dos veces si quieres disfrutar de un gran juego de baloncesto, porque un año más, NBA 2k vuelve a hacer a los deberes.

 

PeterPKO

Hater de profesión, adicto al anime y estudiante de ciencias en mi tiempo libre. La PC Máster Race es mi religión