[Análisis] Fabledom

Diría que prácticamente todos los niños de mi generación jugaron a alguna de las entregas de Age of Empires, que nos enseñó a amar los juegos de creación de civilizaciones y pasar las horas muertas viendo como nuestro asentamiento crecía e ibas mejorando las instalaciones y haciendo la vida de tus habitantes más sencilla. Desde entonces hemos vivido cientos de juegos de este tipo y la verdad es que muchos muy buenos, por eso cuando vi que salía Fabledom, de la mano de la desarrolladora independiente formada por solo dos personas Greena Games, tenía que probarlo para ver que tal sería un juego de civilizaciones más relajado y con una estética más de cuento y menos realista.

 

Civilización y alianzas

Como os podéis imaginar, Fabledom no tiene una historia como tal, sino que tenemos que dedicarnos a crear nuestra civilización y alianzas y hacer prosperar nuestro asentamiento de la mejor forma posible. Para empezar tendremos que decidir si queremos una partida estándar o una creativa, la primera es el modo de juego clásico donde tendremos unos objetivos, habrá que conseguir dinero, mantener la civilización pasando penurias, etc; y la segunda, todo es gratis, está todo desbloqueado y hay total libertad, pudiendo concentrarte en crear la mejor civilización que imagines. También tendremos que crear nuestro blasón y nombre de nuestro reino, para luego decidir en que zona del mapa colocarlo. Cada zona tendrá una dificultad y una serie de recursos, por lo que hay que pensarlo bien y decidir con cabeza. Además, podremos elegir nuestro género como mandatario, incluido el no binario.

Empezaremos nuestra aventura como una aldea pequeñita, con pocos habitantes y mucho por construir, cada cierto tiempo recibiremos visitantes, pero solo podrán quedarse si les gusta el ambiente y si tenemos casas con espacio para ellos, por lo que es importante ir controlando que tenemos espacio para admitir a nuevas personas en nuestra aldea. Cuantas más personas vivan en nuestra civilización, mejor posición tendremos en el mundo, pasando por convertirnos en aldea pequeña, ciudad, etc, hasta llegar al máximo. Con cada cambio de categoría iremos desbloqueando nuevos edificios e incluso tipos de habitantes para nuestras construcciones.

Cuando llegue el momento de subir un poco nuestra población, se unirá a nuestros habitantes un héroe, este héroes nos permitirá resolver encuentros en nuestro mapa y en mapas exteriores. Los encuentros aparecen de vez en cuando y, normalmente, te dejan resolverlos de varias maneras: pagando oro o recursos, luchando con monstruos, sufriendo una penalización durante un tiempo, etc. También con el tiempo podremos entrenar diferentes tipos de soldados para que ayuden al héroe en las misiones.

Una vez desbloqueado el Gremio de Mensajeros, podremos empezar a trabajar en nuestra relaciones con los reinos vecinos. Estas relaciones pueden ser amistosas, de guerra y también con fines matrimoniales. Dependiendo del tipo de relación que queramos llevar con ellos haremos unas u otras de las misiones que se nos presentan. Ya os adelanto que las misiones matrimoniales no son nada sencillas pero que son necesarias para formar un pacto matrimonial que es más fuerte que uno por amistad. Además, hacer estas misiones nos darán recompensas necesarias para seguir creciendo como asentamiento.

Es muy importante que tengamos en cuenta que este juego funciona por estaciones, y que cuando llega el invierno no podremos usar las granjas, ya que el suelo se congela, vamos, como si fuera la vida real. Esto hace que durante el invierno, si no tenemos otras formas de producción de comida o tenemos comida acumulada, puedan morirse algunos de los ciudadanos. Además, estos necesitan carbón para calentarse y no congelarse, por lo que también hay que tener una buena cantidad en nuestro inventario.

También comentar que cada cierto tiempo tendremos eventos al azar que pueden ser buenos, malos o neutrales. Durante el juego tendremos un medidor de nobleza, con la cantidad de ese medidor podremos gastar puntos en vez de dinero o usarlos para salir de situaciones desagradables. Los eventos de mercado, por ejemplo, nos permitirán cambiar un tipo de material por otro, o comprar materiales con dinero, vendrán muy bien en vacas flacas. También tenemos eventos de batalla, como que aparezca un dragón, aunque normalmente, si no tenemos un ejército dispuesto a pelear, podemos pagar con dinero o nobleza para librarnos. Los eventos de misión, donde nos pedirán que hagamos ciertas cosas como acumular un tipo de material o construir algunos edificios, etc, nos darán nobleza si los conseguimos y nos la quitarán si los fallamos.

En general el juego tiene muchas cositas que se van sumando para crear una experiencia de juego muy gratificante, aunque algo lenta, a pesar de pasar mi partida siempre en la mayor velocidad de juego, tenemos tres en total, tenía que esperar bastante a que se terminase de hace todo lo que yo quería. Pero bueno, son juegos para echarles paciencia. Además, otra cosa que, bueno es normal porque es un juego más relajado, es que apenas pasas penurias, aunque se te muera algún aldeano en invierno, siempre aparecen más, es decir, no es que haya una penalización muy grave por eso.

 

Un diseño pintoresco

Fabledom no tiene el típico diseño de juego de civilizaciones serio como el Age of Empires o el Imperium, sino uno más desenfadado que me recuerda mucho a los juegos Two Point y que nos llega de una manera diferente a los jugadores, como que al tener este tipo de diseño he jugado mucho más relajada que lo que lo haría con los otros. También que meta temas fantásticos como cíclopes, dragones y demás le da aún más ese diseño de fantasía que llama tanto aunque no conozcas el juego. Hay que reconocer también que haciendo zoom las ciudades quedan de lo más monas y pintorescas.

En cuanto al sonido, la música ambiente está muy bien, el juego tiene sonidos que te avisan de cosas importantes, pero lo que más me gusta es que hay un narrador que aparece al principio y de vez en cuando durante la partida que es muy divertida. Esta voz solo está en inglés pero aún así es disfrutable.

 

Conclusión

Fabledom es un juego de creador de civilizaciones pero al estilo cozy, más relajado y con una estética muy mona y desenfadada que gustará a todo tipo de jugadores. Tiene algunos problemas de ritmo y penalizaciones pero bueno, para eso tenemos otros juegos más duros del género. Lo podemos disfrutar en español por lo que será perfecto para todo tipo de jugadores.