En esta situación, lo que la industria necesita no son juegos que copien y busquen elevar la dificultad, si no propuestas que intenten tomar prestadas ciertas ideas para dar rienda suelta a visiones originales y memorables sin tener que depender en crear grandes desafíos para llamar la atención. A lo largo de este año hemos visto juegos que, en mayor o menor medida, han intentado innovar, y durante los próximos meses se lanzarán al mercado propuestas tan ambiciosas como interesantes, destacando por ejemplo el sensacional Black Myth: Wukong. Sin embargo, hoy no vengo a hablaros de este título, si no de un proyecto algo más humilde pero igualmente llamativo, que deja a un lado la estética de fantasía oscura de la mayoría de estos juegos para presentar una mezcla de fantasía y steampunk. Por supuesto, os hablo de Flintlock: The Siege of Dawn, el nuevo RPG de acción soulslike del estudio neozelandés A44 Games, a quienes quizá conozcáis por Ashen. Flintlock llega ahora a Xbox Series X/S, PS5 y PC dispuesto a ganarse un hueco en el corazón de los jugadores gracias a su rupturista ambientación, su interesante sistema de combate y su historia, pero… ¿Tendrá lo que hay que tener para destacar? ¡Veámoslo en el análisis completo, que podéis leer a continuación!
Despertando a un dios dormido
La historia de Flintlock: The Siege of Dawn nos transporta al conflictivo mundo de Kian, una tierra de magia olvidada salpicada por la sombra de los antiguos dioses que se ve salpicada por la guerra. Los soldados de la Coalición encabezan la cruzada contra los dioses en Alba, una ciudad condenada debido a la apertura de la Entrada al Gran Abismo, en donde los susodichos dioses habían sido atrapados. Al ser liberados, las hordas de no-muertos arrasan con todo a su paso mientras los dioses disfrutan. Nor, una aguerrida zarpadora, se verá envuelta en la llegada de los dioses y, acompañada por un supuesto ser divino conocido como Enki, tendrá que obtener el poder suficiente para frenar la llegada del mal. Como podéis observar por esta pequeña sinopsis, el juego nos presenta una historia plagada de acción en donde se dan de la mano conceptos originales de toda clase de ambientes y mitologías: dioses de corte mesopotámico, arquitectura a medio camino entre la Persia clásica y el barroco, armamento y vestimentas sacadas directamente de la revolución industrial… Se construye así una ambientación pastiche que resulta sorprendentemente original y memorable, alejándose de forma acertada del resto de propuestas del género al mismo tiempo que construye un lore fresco, llamativo y curiosamente completo.
Lo que quizá no me convence tanto es su escritura, especialmente en lo que se refiere a los diálogos, llegando a abusar demasiado de exposición y de repetición, además de que en más de una ocasión se presentan problemas de caracterización, haciendo que los personajes no se sientan ellos mismos. Su historia tampoco es que sea la gran cosa, pues aunque resulta interesante el conflicto y sus villanos están bien construidos, su ritmo es inestable y no termina de enganchar lo suficiente, dejando a jugador con demasiados momentos de relleno. Es decir, aunque tenemos un juego mucho más centrado en la historia que los soulslike convencionales, es innegable que esta podría haber dado mucho más de si tanto a nivel de ritmo como de escritura. Funciona, sí, pero podría haberse aprovechado mejor. Cabe destacar que el juego llega a nuestro territorio haciendo gala de una más que notable traducción al español, por lo que nadie debería tener problemas con el idioma.
Luchando a base de hachazos y disparos
En cuanto a la jugabilidad de Flintlock: The Siege of Dawn, nos encontramos ante un RPG de acción algo lineal y principalmente centrado en los combates. Estos nos invitan a combinar el uso de armas cuerpo a cuerpo y armas de fuego con habilidades especiales, esquives y bloqueos que pueden utilizarse como parrys, destacando el combate tanto por la gran variedad de opciones que ofrece como por su agilidad. Así, lo que encontraremos principalmente son enfrentamientos rápidos en el que tendremos que saber esquivar a la perfección mientras aprovechamos escasos segundos de debilidad del enemigo para atacar, pudiendo incluso usar al bueno de Enki para aturdir al enemigos y conseguir aún más posibilidades de ataque. El problema está que el juego ofrece tantas opciones que acaba siendo realmente sencillo el superar cada uno de los desafíos que propone, dejando en claro que la dificultad no es el aspecto más refinado del proyecto. Es más, si a esto le sumamos que nos encontramos ante un juego bastante lineal lo que tenemos como resultado es una propuesta ágil y dinámica que no supone un verdadero reto y que no goza de un buen ritmo jugable, siendo su diseño de niveles un apartado que cumple pero no innova más allá de un sistema de Reputación (moneda del juego que aumenta cuanto mejor usemos las habilidades) que invita a ser lo más ágiles posible. Cabe destacar que la movilidad del personaje no es muy precisa (siendo sus saltos posiblemente el apartado menos cuidado), y habría sido conveniente mejorar tanto su velocidad como el control de este en el aire.
Siguiendo con el apartado visual del título, el carácter doble A de Flintlock: The Siege of Dawn se refleja en sus poco detallados escenarios, sus irregulares secuencias cinemáticas y en sus repetitivos enemigos, si bien en este caso las virtudes pesan mucho más que los defectos. A todas luces, el trabajo de A44 Games ha resultado sorprendente por su calidad, aprovechando cada céntimo del presupuesto para dar rienda suelta a un mundo colorido, variado y en el que habitan personajes dotados de un buen nivel de detalle y de unas animaciones sólidas. Los efectos de iluminación gozan de una gran calidad, y todo se conecta a la perfección para dar forma a un videojuego que, sin ser un portento, resulta vistoso y agradable a la vista. Por supuesto, a esto ayuda su magnífico diseño artístico, que como comentaba anteriormente da forma a un universo pastiche tan vistoso como curioso. Eso sí, su rendimiento en PC es irregular, y requiere de alguna que otra actualización para mejorar sus errores técnicos. En cuanto a la banda sonora musical no tengo queja alguna; las melodías que suenan están acordes a la ambientación y casan a la perfección con las secuencias de acción.
Conclusión: Un corto pero intenso asedio
Flintlock: The Siege of Dawn es una aventura que, sin ser excelente, ofrece un sistema de combate notable y una construcción de universo sorprendente salpicadas por un tratamiento visual sólido. Si bien sus carencias son fácilmente visibles, no cabe duda alguna de que la segunda gran obra de A44 Games es una tan ambiciosa como entretenida, que a lo largo de sus poco más de siete horas os tendrá muy entretenidos.
Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.