Hace ya cinco años, la empresa danesa IO Interactive, conocida ampliamente por su trabajo con la franquicia Hitman, lanzaba al mercado el que sería el primer título de una trilogía basada en su más exitosa creación, el Agente 47, que llevaba protagonizando juegos desde el año 2000 con Hitman: Codename 47. Hace apenas una semana, Hitman 3 llegaba a consolas de nueva y antigua generación, así como PC, para poner el broche final a la serie World of Assassination. Si bien Hitman fue lanzado al mercado en formato episódico (una decisión que resultó ser bastante impopular y que fue muy cuestionada), en Hitman 2 se decidió apostar nuevamente por ofrecer al jugador una experiencia completa y, para alegría de todos, con Hitman 3 se ha mantenido la cordura en ese sentido. Hoy, estoy aquí para hablaros del último juego del asesino con traje más conocido del mundo de los videojuegos, aunque ya os adelanto que el resultado ha sido altamente satisfactorio, hasta el punto de que, pese a estar todavía en enero de este 2021, puedo afirmar con rotundidad que tenemos ante nosotros la primera gran sorpresa de este año. ¿Queréis saber más al respecto? Pues no dejéis de leer hasta el final.

 

47 vs Providence

Hitman 3 supone la conclusión de la trilogía del Agente 47, que, una vez más, volverá a dedicarse a lo que mejor se le da, es decir, a asesinar a peces gordos que trabajan desde las sombras. En esta ocasión, el veterano asesino contará con la ayuda de su contacto de la Agencia, Diana Burnwood, así como con su amigo de la infancia, Lucas Grey. Su objetivo serán los socios de Providence, la organización secreta de magnates que con sus alargados tentáculos controlan todo lo que pasa en el mundo, que se constituye como la parte antagónica de la trilogía World of Assassination. Claro está, no será un trabajo fácil, pero eh, ¿acaso 47 ha fallado alguna vez?

 

El noble y divertido arte del asesinato

Ya sabéis que Hitman es una franquicia que basa sus cimientos jugables en asesinar objetivos, a la vez que premia en gran medida que estos se realicen utilizando el sigilo y la infiltración, puesto que en muchos casos, asesinar a inocentes o ser descubierto realizando acciones ilegales puede costarnos varios puntos en la valoración final al terminar cada fase, así como la propia vida (y por ende la misión) si terminamos enzarzados en un tiroteo contra los agentes de seguridad que acostumbran a proteger a cada uno de los miembros de Providence a los que hay que dar caza. Se torna pues imperativo buscar la mejor forma de acercarse a cada uno de estos, para lo que hay diferentes elementos que pueden contribuir a la causa, como por ejemplo, disfrazarse para burlar la seguridad o intentar moverse por zonas menos vigiladas, como puede ser por las afueras de un edificio o los sistemas de ventilación. En esta tercera entrega, la gente de IO Interactive ha añadido la posibilidad de escalar, lo cual abre un mayor abanico de posibilidades a la hora de intentar dedicarse al noble arte del allanamiento de edificios.

Hitman 3 ha logrado algo que creo firmemente que es meritorio y por tanto, digno de mención. Reconozco que, a titulo personal, no soy un jugador con una buena relación con los videojuegos de sigilo, pese a haber probado algunos en mi vida. De hecho, aparte de Metal Gear Solid V: Ground Zeroes, los dos títulos de Styx de Cynade Studio y un par de misiones de Hitman 2, no he jugado a mucho más, habiendo completado de todos estos únicamente el primero y con resultados bastantes negativos, puesto que no era especialmente bueno infiltrándome y rompiendo cuellos de guardias. Es por eso que, pese a la curiosidad que suscitaba Hitman 3 en mí, no iba con las expectativas demasiado altas, pero al final he caído completamente rendido ante los impolutos zapatos negros del Agente 47. Que una obra de un género en el que no eres especialmente hábil y disfrutas lo justo, consigue hacerte gozar como lo ha hecho este juego con un servidor, es que está haciendo las cosas muy bien.

Hay un total de seis localizaciones (Dubái, Dartmoor, Berlín, Chonqing, Mendoza y Los Cárpatos) por las que moverse tanto en el modo campaña como fuera de este, y pese que la duración de cada una de estas fases dependerá un poco de la forma de abordar la misión de cada jugador, el título puede completarse en unas 9-10 horas a lo sumo, quizás incluso algo menos. No obstante, y esto es algo que los jugadores veteranos ya sabrán de sobra, cada misión es extremadamente rejugable, puesto que hay diversos objetivos e historias de misión que te invitan a probar diferentes formas de asesinar a los miembros de Providence, contribuyendo así a que deseemos volver a probar mientras buscamos cumplir todos estos desafíos, que van desde asesinar creativamente a los objetivos, hasta lograr ver los escenarios en su totalidad, robar determinados objetos o dejar K.O. a un puñado de guardias lanzándole latas a la cabeza.

Además del modo de juego principal basado en la historia de 47, hay otras modalidades que ayudarán a que nuestro tiempo en este entretenido mundo del asesinato se dilate unas cuantas horas más. El más interesante de ellos es el Modo Contrato, que nos permite poner las condiciones para eliminar a los objetivos en cualquiera de las localizaciones. Por ejemplo, puedes utilizar la fase de Dartmoor de Asesinato en Familia, para escoger de objetivo a un guardia y una asistenta, que deben ser eliminados y cuya bonificación podría obtenerse si se asesinan con el disfraz de investigador y utilizando un destornillador para el asesinato. Al ser capaces de personalizar a nuestro antojo todas las opciones posibles, se nos ofrece una excusa más que decente para volver a revisitar todas las localizaciones del juego. Además de poder crear nuestros propios contratos, Hitman 3 permite que juguemos a las creaciones de otros jugadores que hayan decidido publicar online su propio contrato.

El otro modo es el Sniper Assassin, que como su propio nombre indica, basa su principal atractivo en asesinar a los objetivos a distancia utilizando un rifle de francotirador. Se obtienen puntos eliminando a guardias y objetivos, intentando evitar que la alarma se active y el resto se percaten, pues esto podría costarnos la huida de un objetivo y por ende, la propia misión. Dicho sea de paso, Hitman 3 tiene un modo VR en PlayStation 4 y 5, al que puede accederse si disponemos de PlayStation VR. Si bien es un añadido interesante, al no disponer del periférico en cuestión no me ha sido posible probarlo de primera mano, por lo que no puedo más que limitarme a señalar su existencia.

 

Un resultado prácticamente excelente

Gráficamente hay que aplaudir el magnífico trabajo que IO Interactive ha llevado a cabo con el motor Glacier. Prueba de ello son las localizaciones de Dubái y Chongqing, especialmente, que permiten apreciar en todo su esplender el músculo visual más potente del título, destacando por su hermosa iluminación, que se ve reflejada, por ejemplo, en los mármoles blancos y ostentosos tonos dorados del edificio del jeque Omar, en los que los reflejos del sol brillan con fuerza; o en las luces de los neones de las oscuras calles de Chongqing, que cambian la ostentación y los NPCs bien vestidos, por vagabundos e iluminaciones de colores, un lugar mucho más sucio y sombrío, pero que sin duda contribuye enormemente a dejar ver el buen funcionamiento del juego en una localización completamente distinta. Sorprende igualmente su rendimiento, pues consigue mantenerse estoico en su tasa de frames pese generar una enorme cantidad de personajes no jugables en una misma zona. En este aspecto, es importante apuntar al hecho de que en Series X el título alcanza los 4K a 60fps, mientras que en PlayStation 5 se queda en los 1800p. Si el resultado en esta última ya es impresionante, pues es la versión utilizada para este análisis, no quiero imaginarme lo maravilloso que debe de ser jugar en la plataforma de los de Redmond.

Por cierto, si disponéis de Hitman y Hitman 2 (o si los adquirís en el futuro), sabed que Hitman 3 brinda la oportunidad de jugar a dichos títulos al mismo nivel gráfico y técnico que ofrece la última obra de la trilogía World of Assassination, lo cual es una excusa perfecta para volver a jugarlos o, incluso si no lo hemos hecho todavía, aprovechar la adquisición de Hitman 3 para jugar en la mejor versión posible a los tres títulos que componen esta serie.

Pese a que hay pocos puntos negativos que achacarle al juego, debo confesar que la necesidad de estar constantemente conectado no me ha hecho especial ilusión. Sí, soy consciente de que a una gran mayoría no le supondrá ningún problema, pero si el servidor de la compañía se cae, pese a que tu conexión funcione correctamente (algo que me pasó en un par de ocasiones), es imposible comprobar las diferentes misiones extra que pueden llevarse a cabo en la localización. Por otro lado, hay algún que otro glitch menor, que no pasa de ser un problema meramente estético, no obstante, he vivido 3-4 bugs que me han obligado a reiniciar por hacer imposible que moviese a 47 al quedarse atrapado entre un objeto, así como 2-3 crasheos. En principio, aunque molestas, han sido puntuales y confío en que en un futuro se solucionen mediante un parche.

 

Conclusión

Hitman 3 es el broche de oro de la trilogía del Agente 47. Gracias a la libertad y las múltiples posibilidades que ofrece, es un título realmente entretenido capaz de proporcionar algo tanto a veteranos de la franquicia como a aquellos que quieran probarla por primera vez. Si bien la campaña es algo corta y uno se queda con ganas de más, hay excusas de sobra para revisitar cada localización varias veces. La puesta a punto es una delicia, tanto en lo audiovisual como en su rendimiento, máxime si uno tiene en cuenta que esta es una obra que no llega a tener el presupuesto de un gran título triple A.

Quizás, la obligación de jugar conectados constantemente para visualizar todos los datos de interés, incluso jugando al Modo Campaña, sea uno de los pocos “peros” que podría darle a la obra, puesto que confío en que IO Interactive solucione los escasos bugs y crasheos que a veces se producen.