[Análisis] Loop8: Summer of Gods

Imagina un videojuego donde dependas casi al 90% de lo que la IA piense de tu personaje principal, lo dura que serán las batallas, a quien tendrás que enfrentarte y con quien pelearás dependerá todo de las relaciones que tengan con los diferentes miembros del elenco. Eso es Loop8: Summer of Gods, un JRPG dirigido por Yōichi Miyaji, al que conocemos por la saga Grandia ente otros, y diseñado por Yuri Shibamura, que llevará las relaciones entre personajes a otro nivel para darnos un título con diversos finales cuya jugabilidad en bucles acabará por atraparnos hasta el final como jugadores.

 

Un mundo devastado

Aunque el tema de mundos post-apocalípticos no es nada original, en Loop8 nos encontramos con que la humanidad ha sido reducida drásticamente por los ataques de unos monstruos espirituales llamados Kegai que son capaces de poseer a las personas y destruir ciudades enteras aprovechándose de las debilidades de las mismas. En un esfuerzo por sobrevivir, la humanidad había creado una comunidad en el espacio, donde vivían tranquilamente hasta que, por razones que desconocemos en la historia, esta comunidad arde en llames y el único sobreviviente es nuestro protagonista, Nini, que ahora ha sido “adoptado” por la única familia que le queda, su abuela, que vive en un pueblo remoto de Japón llamado Ashihara Nanatsu, un lugar donde, por lo menos hasta ahora, no se han tenido constancia de ataques de Kegais.

Cuando Nini llega al pueblo le viene a buscar su prima, Konoha, que le explica como funciona el pueblo, las reglas de la casa y demás. También le inscribe en el instituto, donde solo hay unos pocos alumnos, ya que en el pueblo viven pocas personas. A partir de ese momento, Nini conocerá a personajes de lo más variopinto, como a una chica zorro que es mensajera de los dioses y que le cuenta a Nini que tiene un poder inimaginable que sirve para lugar contra los Kegai. Esto hace que los Kegai empiecen a llegar a Ashihara y Nini tenga que luchar contra ellos pero, para poder salvar al pueblo y sus habitantes, tendrá que estrechar lazos con ellos hasta el punto que luchen a su lado contra estas fuerzas oscuras.

Pero Nini no solo tiene el apoyo de los lugareños, también el de los dioses, que le ayudarán con bendiciones y guías a través de la misticidad del pueblo. ¿Pero son todos los dioses buenos? ¿De donde vienen realmente los Kegai? ¿Por qué atacan ahora Ashihara? Hay un montón de incógnitas que solo podremos deslumbrar si llegamos hasta el fondo del asunto pero, ¿Cómo va a conseguir Nini salvar al pueblo y descubrir sus secretos? Sencillo, con la habilidad de volver en bucles. Nini tendrá la capacidad de volver al 1 de agosto siempre que muera en una batalla o así lo decida hablando con Terasu, una pelirroja misteriosa que vive en el pueblo y que tiene la habilidad de hacer volver a Nini. Gracias a esto volver a empezar con los conocimientos del anterior bucle es pan comido pero, cuidado, nuestras relaciones se reinician cada vez, aunque nos será más sencillo con cada bucle crear lazos con los personajes.

La historia tiene una premisa muy cliché en algunos sentidos, aunque es cierto que cada personaje es distinto y muchos de ellos pueden sorprender con sus historias si los conocemos profundamente.

 

Una batalla contra el tiempo

La jugabilidad de Loop8, como decíamos al principio, se basa sobre todo en las relaciones con los diferentes personajes del pueblo. Cada personaje tendrá un estado de ánimo, un momento en que esté más o menos receptivo, le guste más o menos que te relaciones con otra serie de personajes, etc. La verdad es que un árbol de relaciones muy bien creado que se basa en tres parámetros: amistad, cariño y odio. Estos tres parámetros pueden subir y bajar dependiendo de lo que hagas y lo que decidas decir o hacer con cada personaje.

Cuando hablemos con un personaje, podrán pasar dos cosas. La primera es que nos salgan una serie de opciones que podremos proponer al personaje: conocerle mejor, halagarle, proponerle dar un paseo, etc. Estas opciones serán más o menos dependiendo de como de profunda sea nuestra relación con el personaje. Lo otro que puede pasar es que hayamos subido lo suficiente la relación con el personaje como para que nos cuente un poco más sobre él, y esto, normalmente, lleva a recibir una bendición divina para el personaje en concreto. Las bendiciones viene a dárnoslas una especie de ardilla espiritual que solo vemos nosotros y que nos suele decir de parte de que Dios viene la bendición y cual es el efecto sobre el personaje. En el menú tenemos una opción de ver el porcentaje de bendiciones que tiene cada personaje, incluyendo el protagonista. Las bendiciones se mantienen entre bucles, así que es buena idea ir acumulando en la medida de lo posible.

Volviendo a las relaciones con los personajes, cuando le propongamos una actividad a alguno, subiremos o bajaremos los tres parámetros de los que os hablaba antes según como pillemos de ánimo a ese personaje. Lo bueno es que antes de decidir que actividad hacer, podemos ver un comentario de Nini diciéndonos que probabilidad tenemos de que salga bien, lo cual nos facilita muchísimo las cosas. Hay que tener en cuenta que cuando veamos el comentario de Nini diciendo que seguro que va a salir bien, no significa siempre que sea bueno para nosotros. Un ejemplo: si sale bien conocerse mejor, subirán los parámetros buenos y todo bien, pero si sale bien la opción “olvídalo” que es básicamente un, te he hablado por error y ahora no se que hacer, saldrá bien pero nos bajarán los parámetros porque a nadie le gusta ser ninguneado. Hay que tener en cuenta que el estado de ánimo del protagonista, del que se nos informará en la pantalla, también es importante a la hora de relacionarse.

Obviamente cuando vayamos subiendo las relaciones con los personajes estos tendrán una etiqueta en nuestra vida: amigo, colega, cónyuge, confidente, antagónico, etc. Estas etiquetas nos hacen reconocer fácilmente que relación tenemos con cada uno de los personajes. Pero, y aquí viene el rizo de todo este asunto, y es que los personajes también se relacionan entre si, subiendo y bajando los parámetros entre ellos sin que puedas hacer mucho al respecto. ¿Y por qué esto es importante? Por las batallas de las que vamos a hablar ahora.

Cuando un Kegai llegue al pueblo, que suele ser más o menos cada cinco días, poseerá a uno de los personajes del pueblo en un orden aleatorio, es decir, en un bucle puede ser primero un personaje pero en otro bucle igual ya no es el primero, por lo que hay que prepararse bien de antemano. Para luchar contra este Kegai, que recordemos, tiene dentro a uno de los personajes del pueblo, es importante la relación que tengas con el personaje, pero también la que tengan los compañeros que quieras llevarte a esa batalla. Si el personaje del Kegai se lleva bien con los personajes, tanto el protagonista como los que lleve de acompañante, tendrá un aura verde o naranja que son los signos de amistad y cariño, y sus ataques serán más benevolentes, te será más sencilla la batalla. Pero si llevamos personajes o simplemente nosotros como protagonistas no nos llevamos bien con él, sus ataques serán más potentes y la batalla será mucho más complicada. Por esto es importante mirar antes de una batalla el diagrama de relaciones al que tenemos acceso en el menú, y llevar a los personajes para una batalla lo más favorable posible.

Por supuesto puedes presentarte en la batalla solo con el protagonista, no estás obligado a llevar a nadie, pero obviamente cuanto más apoyo tengas, menos sufrirás en la batalla y más posibilidades de éxito tendrás.

Otro tema importante de las relaciones en torno a las batallas es que, como decíamos, el Kegai ha poseído a un habitante del pueblo y depende de nuestra relación con el habitante el poder salvarlo o no de su destino. Es decir, si apenas tenemos relación o es mala, no podremos salvarlo, llevando a la muerte segura del personaje en cuestión y susodicha pérdida de relaciones con ese personaje. Pero si la relación es buena podremos elegir si queremos o no salvarlo, pudiendo mantenerlo dentro del elenco. Estas son de las decisiones más importantes por lo que tenemos que pensar bien lo que queremos hacer.

Terminando con las relaciones, normalmente a quien decidamos como pareja final del protagonista será la persona que cambie nuestro final y como se desarrolla. Esto es importante ya que podemos acabar con cualquiera de los personajes, es decir, cada uno tiene su propio final.

A parte de subir la relación con los diferentes personajes, el protagonista tendrá la opción de desarrollar sus características. En este juego no hay niveles por lo que lo que determina nuestro daño, vida, energía, etc, son los números que tendremos en diferentes ámbitos. Podemos mejorar nuestra fuerza, inteligencia, habilidad, atractivo, etc. Unas características potenciarán la energía y otras la vitalidad y lo suyo es que las subamos de forma equilibrada. Además, el subir ciertas características a un nivel concreto es lo que desbloqueará nuevos ataques y habilidades de apoyo entre los personajes, por lo que es bueno que controlemos ese aspecto en el menú, donde podremos consultar que nos hace falta para cada desbloqueo.

Para llegar a las batallas, tendremos primero que descubrir que habitante está siendo poseído por un Kegai. Esto es normalmente bastante visible porque son personajes que siempre están en el mismo lugar a la misma hora, hay que fijarse bien en el mapa quienes son estos personajes, normalmente durante el tercer día desde que se notifica la llegada del Kegai. Cuando hables con esos personajes, se desbloqueará una cinemática y la entrada desde el santuario a Yomotsu Hirasaka, un lugar en el otro mundo que es espejo del pueblo. En este lugar tendremos que buscar la barrera que protege al Kegai y romperla. Para ello tendremos que conseguir Magatamas, que nos darán al superar unas pruebas que nos encontraremos. Una vez abierta la barrera, ya podremos pelear.

Las batallas son bastante simples. Nos encontramos en batallas por turnos, donde solo decidiremos que hace el protagonista, los compañeros que vengan con nosotros actuarán en base a la relación que tengan con el protagonista y el personaje poseído, así como la vitalidad y energía que tengan. Nini cuenta con el poder de la Visión Demoníaca, que nos permite saber cual es el objetivo del siguiente ataque tanto del enemigo como de los compañeros, por lo que podremos elegir que lo haga en consonancia. Por ejemplo, si un compañero está muy débil y vemos que el enemigo va a atacarle, podemos cubrirle. Los ataques pueden hacerse con amistad, cariño u odio, igual que los parámetros de relación entre personajes. Como usemos los ataques influirá en la propia relación entre los personajes así que lo suyo es lo decidamos con cautela. Cuando la vida de Nini llegue a 0 o lo haga la del enemigo, terminará la batalla. En caso de ser derrotado Nini, empezaremos el bucle de nuevo en el día 1 de agosto, si derrotamos al enemigo, como decía antes, depende de nuestra relación con él podremos o no salvarlo y continuar con la historia.

Comentar sobre las batallas que, por lo menos a mi, se me hacen muy lentas. Los personajes atacan lento, hay muchos soliloquios

Una cosa a tener en cuenta es que, por lo menos en mis bucles, que han sido unos cuantos, no he conseguido que todos peleen a mi lado. No se si se debe a que no todos pueden pelear, o que tenga que cumplir otros requisitos pero la verdad es que me decanto más por lo primero ya que he tenido personajes con la amistad y el cariño al máximo y aún así no pelean conmigo, por lo que supongo que los que pueden pelear están limitados.

Curiosamente, podemos encontrarnos con finales antes de tiempo que no solo se den por ser derrotados en una pelea, puede causarlo la relación con algunos personajes, por lo que recomiendo guardar cada cierto tiempo si no queremos perder el avance en un bucle concreto.

Esto es todo para la jugabilidad. Cuando lleguemos al final por primera vez con algún personaje, lo cual se da después de unas seis peleas, se nos dará la opción de una nueva partida + que es, básicamente, un reinicio en el bucle pero con más información. Hay que decir que no es una historia larga ni vamos a tardar muchísimo en llegar al primer final, por lo que podemos conseguir todos los finales o los que más nos interesen sin tener que pasar 40h en cada uno.

 

El Japón rural

Ashihara Nanatsu es un lugar de lo más pintoresco, un pueblo pequeño basado en el Japón rural que está lleno de vida y colorido por el día; y es oscuro y con pocas luces artificiales de noche. Tenemos cuatro calles, una playa, un pequeño instituto, un santuario y poco más, pero todo es muy bonito y llamativo. Cuando entremos a Yomotsu Hirasaka todo será igual pero en otra tonalidad de colores más oscura, más tenebrosa y veremos a pequeños seres negros andando por sus calles, algunos más amistosos que otros. Todo el diseño escénico de Loop8 nos recuerda a esas series anime basadas en pueblos costeros, y sus personajes son de lo más diferentes los unos de los otros.

Todos los personajes tienen su propia personalidad, empezando por el aspecto que tienen. Unos más clásicos y otros más modernos, los hay que destacan más o menos, pero todos tienen algo que merece la pena conocer. Empezando por la típica profesora que solo quiere que su alumnos sean gente de provecho hasta la chica-robot del pueblo, pasando por una mensajera divina, un deportista despreocupado o una ratona de biblioteca poco amigable, cada uno de ellos te robará el corazón a su manera. Los diseños de personajes son entrañables y perfectos para el ambiente, donde nuestro recién llegado protagonista no destaca para nada y es sencillo hacer que todos sean como una gran familia.

En cuanto al sonido, el compositor Noriyuki Iwadare está detrás de la OST del juego, un nombre de lo más conocido en la industria y que hace un trabajo formidable. Cada estado de ánimo del protagonista nos dará una melodía de fondo distinta, haciéndonos entrar un poco más en su vida y como está viviendo todos los cambios que está sufriendo al llegar a un lugar nuevo, conocer gente tan distinta y encajar en un mundo donde le ha tocado luchar contra personas de su entorno.

Aún no tenemos acceso a la OST completa del juego en YouTube pero si que podremos disfrutar del vídeo y canción de apertura Original Landscape, interpretada por la artista NaHo/QiSui.

En cuanto a las voces, contamos con un elenco que mezcla nuevas voces con voces muy conocidas para crear, también a través de la voz, esa sensación de pueblo simbiótico que tiene Ashihara y la variedad de personalidades y personajes. No voy a hablaros de todos los actores de voz porque no íbamos terminar nunca pero hablaré de los más conocidos. A Nini le da voz Gakuto Kajiwara, al que conocemos por darle también la voz al protagonista de Monark así como a Hiro Ryugasaki en Shadowverse: Champion’s Battle, entre otros. Ryota Suzuki es la voz de Saru, el deportista despreocupado y amable; también le hemos escuchado dar vida a Ryusui Nanami en Dr. Stone o a Yu Ishigami en Kaguya-sama Love is War. La voz de Machina, la hermosa chica-robot, es la de Maki Kawase, como también lo fue de Rena Miyauchi en Blue Reflection: Second Light o de Fuki Harukawa en Lycoris Recoil. También contamos con Tomo Muranaka como Kuni, la profesora de instituto dedicada a sus alumnos; la conocemos por ser la voz de Atreus en God of War: Ragnarok o Yuma Kuga en World Trigger. Por último, para no alargar mucho esto, tenemos a Atsumi Tanezaki en el papel de Terasu, la misteriosa pelirroja con el poder de hacer volver al protagonista en bucles; también le ha dado voz a personajes como Anya Forger en SPY×FAMILY o Ethel en Xenoblade Chronicles 3.

Como veis es un gran elenco que merece la pena escuchar. Por supuesto, y si así lo preferís, también podéis disfrutar de las voces en inglés, pero al jugarlo yo en japonés, hablaré solo de lo que conozco.

 

Conclusión

Loop8: Summer of Gods es un título que mezcla batallas por turnos con gestión del tiempo y manejo de relaciones. Tiene una IA muy bien configurada de la que dependemos en gran medida para casi todo en la partida, por lo que nos conviene pensar bien que vamos a hacer, cuando lo vamos a hacer y con quien. A mi parecer, y como consejo, creo que cuanto mejor os llevéis con todos los personajes, menos llorareis después, ya que te facilita mucho las cosas.

Es un juego entretenido y divertido, muy disfrutable y que, además, nos llega en perfecto español, por lo que no hay excusas para no darle una oportunidad y vivir este eterno verano en Ashihara.