[Análisis] Lost King’s Lullaby

[Análisis] Lost King’s Lullaby

En España, pocos son los estudios que destacan a nivel internacional, teniendo en cuenta por lo general más a las distribuidoras. Entre estas encontramos a Avance Discos, encargada en su momento de la distribución de títulos tales como Wonder Boy: The Dragon’s Trap o Runbow, entre otros, y que ahora a sorprendido a todos con el lanzamiento de su primer título desarrollado por ellos mismos, siendo este el título que hoy toca analizar, Lost King’s Lullaby, un curioso roguelike con tintes de RPG en 2D con un estilo artístico único. ¿Conseguirá destacar, dando luz verde a que desarrollen más títulos propios, o será un fracaso? Veámoslo yendo punto por punto.

Comenzado por su historia, Lost King’s Lullaby nos narra la historia del reino de Banba, en donde una terrible maldición ha hecho que todos sus habitantes hayan quedado paralizados en el tiempo, llegando a afectar hasta a la reina. Al ver esto, el rey convoca a los druidas y, juntos, parten hacia el bosque para hallar una solución. Pero el bosque no era el mismo de antes, encontrándose repleto de criaturas hostiles. Cuando todo parecía perdido, aparece Kiara, quien junto a la ayuda de la Morrigna y de Suantraí se adentrará en el bosque para intentar poner fin a esta crisis. Como podéis ver, uno de los puntos fuertes es que, a pesar de tener como punto de partida una idea tan sencilla consigue incorporar elementos suficientes como para resultar novedosa e interesante. La mayoría de personajes están bien construidos, y en ningún momento parece que haya algún personaje o elemento fuera de lugar, aunque sí que habría que destacar que la trama, en ciertos puntos, llega a resultar bastante predecible.

Otro de los puntos más fuertes del juego es su inspiración en la mitología celta y europea, que se puede comprobar tanto en la galería de monstruos del título como en los escenarios. El uso de esta inspiración y el modo en el que lo abordan me parece sensacional, otorgando al título de una identidad única y diferenciándolo del resto. 

Como último detalle en este apartado, cabe destacar que a pesar de que se trata de un título desarrollado en España este está plagado de errores de traducción, lo cual resulta muy extraño. Entendería que se dieran errores de traducción en otros idiomas debido al origen del juego, pero no del revés. Por ello, creo que se debería haber revisado un poco más la traducción del título, pues los errores gramaticales y la aparición de frases en inglés son constantes.

Siguiendo con la jugabilidad del título, nos encontramos ante un roguelike en 2D bastante peculiar. El esquema jugable es sencillo: cuando comenzamos a jugar empezamos en nuestra aldea, desde la cual podemos elegir ir a la casa de Athair (y así poder ver los recuerdos que hemos recolectado), a la casa de la Morrigna (para obtener nuevas habilidades y mejorar las que ya tenemos) o directamente al bosque. Es en el bosque donde la cosa se pone interesante, ya que aquí nos movemos en un entorno 2D dividido en cuadrados de terreno conectados entre sí, y tendremos que encontrar la salida de este para poder avanzar a la siguiente zona. Las zonas no cuentan con un diseño fijo, pues este es aleatorio, variando su diseño cada vez que entramos, por lo que siempre será un desafío hallar el camino hacia la siguiente zona. Pero avanzar por estas lugares no es un paseo, pues están infestadas de enemigos, los cuales se hallan parados bloqueando nuestro camino. Las zonas son preciosas y da gusto explorarlas, pero la falta de opciones y la cantidad de veces que hay que explorarlas hace que esto acabe haciéndose monótono y repetitivo.

Para enfrentarnos a ellos basta con acercarnos lo suficiente, con lo cual se activará la fase de combate. Y es aquí donde encontramos uno de los puntos que más me han gustado del juego: el combate. Similar al de Undertale, nosotros controlamos a una especie de esfera (que representa la energía de Kiara) que deberá esquivar los ataques de los enemigos como si de un arcade clásico se tratara. Mientras hacemos esto se irá cargando nuestra barra de ataque, dividida en tres ramas, y dependiendo de cuantas de estas hayamos cargado podremos realizar uno u otro ataque. Mientras que la primera barra, que es la que más pronto carga, es para ataques débiles, la última, que tarda más en cargar, se usa principalmente para ataques curativos y ofensivos. Todo este sistema, a pesar de estar claramente inspirado en el RPG antes mencionado, consigue contar con suficientes elementos como para destacar, siendo muy entretenido y adictivo.

El problema con todo esto está en el sistema de progresión, que brilla por su ausencia. Sí, contamos con la posibilidad de comprar y mejorar nuestras habilidades, pero para obtener las plumas suficientes hay que grindear bastante, lo que hace que el título tenga una duración algo más artificial de lo que debería, pues el grindeo llega a ser obligatorio en ciertos puntos.

Pasando al apartado gráfico del título, me tengo que quitar el sombrero ante el nivel de los diseños y el estilo artístico en general. Inspirado en los dibujos propios de cuentos infantiles, el estilo sobresale por encima del de muchos otros por su belleza, creatividad y por lo logrados que están. No hay ningún diseño de personaje o enemigo que esté mal hecho o se note poco trabajado, pues se nota el cariño y el esfuerzo puesto en estos. El fallo que veo está más relacionado con los escenarios, y es que a pesar de que sí tienen un buen diseño, este se repite hasta la saciedad, cambiando poco más que la paleta de colores. Si esto cambiara, os diría que estamos sin duda ante uno de los estilos artísticos más preciosos de lo que llevamos de año.

El motor gráfico del título acompaña, pues todo se ve con un buen nivel de detalle y en ningún momento se notan problemas gráficos, pero es quizá por esto por lo que el título cuenta con ciertos problemas de rendimiento y ralentizaciones. Por suerte no son muy comunes, pero ha habido ciertos momentos en el bosque en los que parecía que al juego le costaba continuar.

En cuanto al apartado sonoro, se nota claramente la inspiración en la música celta y europea, pero a diferencia de su apartado artístico esta no termina de destacar. No es que cuente con una mala banda sonora, es simplemente que no termina de llegar. Del mismo modo, los efectos sonoros tampoco aportan mucho al título, y este es un apartado que se debería haber mejorado un poco.

Lost King’s Lullaby es uno de los títulos indie de origen español más interesantes y preciosos que he visto de aquí a un tiempo. A pesar de que cuenta con una serie de fallos que denotan la poca experiencia de su equipo, nos hallamos ante una propuesta sólida y divertida, que llama más la atención por su hermoso apartado artístico y divertidos combates que por su mundo o historia. Viendo el nivel de este juego, siendo el primero que desarrollan, no me cabe duda que podemos esperar grandes obras de parte de este estudio. No lo dudéis, si os gustan los roguelike y, sobre todo, los RPGs, jugadlo de cabeza, pues no os arrepentiréis.

 

Antonio Gallardo

Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.