La década de los 90 fue increíble para la industria de los videojuegos, y en especial para un género en concreto: la lucha en 2D. Con la llegada de Street Fighter 2 se dio pie al lanzamiento de una gran cantidad de juegos con mecánicas similares que no terminaron de destacar por ser muy parecidos entre sí, llegando a sobrecargar el género (dando pie así a la escasez de títulos del género a principios de los 2000), pero hubo un título que consiguió sobresalir por encima del resto llegando a plantarle cara a la antes mencionada saga de Capcom: Mortal Kombat. Desarrollado por Midway, supuso una revolución por usar modelos pre-renderizados en los personajes (lo que hacía que estos se vieran mucho más realistas) y por la gran cantidad de sangre y escenas gore con las que contaba, gracias a los tan queridos fatalitys, lo que ayudó a que se creara el sistema de clasificación por edades o ESRB.

Con más de 15 títulos a sus espaldas, la saga comenzó a caer en picado hasta que fue adquirida por Warner Bros. y se comenzó a desarrollar el título que supuso una mayor revolución en la saga, Mortal Kombat 9, bajo el manto del estudio Netherrealm, conformado por algunos de los creadores originales de la saga y que se mantienen a día de hoy como los desarrolladores de esta. Con la inclusión de un modo historia totalmente cinematográfico y que resumía y alteraba la historia de los tres primeros títulos, el éxito de este título hizo que se desarrollaran dos secuelas: Mortal Kombat X, que a pesar de ser un buen título no llegaba a superar a su antecesor, y el juego que hoy toca analizar: Mortal Kombat 11, el título más ambicioso de la trilogía actual y que busca continuar y acabar la historia que se lleva narrando desde MK9, además, con esta entrega se pretende crear un título duradero que tenga gran repercusión en los eSports y que siga muy presente a través de actualizaciones y DLCs. ¿Estará a la altura de la saga, superando a los títulos anteriores, o por el contrario supondrá una decepción plagada de malas decisiones? Sea como sea, vayamos por partes, que es como les gusta acabar con sus enemigos a los personajes de esta saga.

Test your might

La trama de Mortal Kombat 11 continúa lo narrado en el título anterior: tras la derrota de Shinnok, Raiden se hizo con su amuleto y sucumbió ante su control. Convertido en una especie de defensor de la tierra extremista, ayuda a las fuerzas de la Tierra (lideradas por Sonya Blade y su hija, Cassie Cage) a evitar cualquier tipo de ataque o amenaza antes de tiempo. Por otra parte, el mundo exterior se encuentra liderado por Kotal Khan, quien mantiene una relación pacífica con las fuerzas de la Tierra. Sin embargo, la Tierra se ve amenazada por las fuerzas del Infierno lideradas por unos Liu Kang y Kitana no-muertos, así como por un extraño ser conocido como Kronika, capaz de controlar el tiempo y traer de vuelta a las versiones jóvenes de los personajes (que, curiosamente, son los personajes del primer Mortal Kombat), quien amenaza con reiniciar el universo y así acabar de una vez por todas con Raiden.

A pesar de que la trama puede parecer un tanto liosa, realmente es bastante sencilla de comprender y no deja de ser interesante en ningún momento. Esta es narrada a través de los ojos de varios personajes, uno o dos por cada capítulo, lo que aporta variedad y ayuda a comprender mejor todo lo que sucede. Al no tener un número muy amplio de personajes, esta no termina de ser muy extensa y consigue no perderse en su amplio universo, aunque hay que tener en cuenta que es necesario haber jugado a los títulos anteriores para poder comprender la actitud o motivos de ser de los personajes. Por ejemplo, arcos argumentales como el de Jax o el de Scorpion necesitan haber conocido la historia de los títulos anteriores para así comprender su evolución.

Otro problema que encuentro es que, a pesar de que la historia que cuenta es interesante, la forma de contarla llega a resultar monótona y repetitiva, y es que nos encontramos con el mismo esquema de narración que en títulos anteriores basada en la sucesión de cinemáticas y combates, sin ningún tipo de descanso o aportación jugable más allá de los antes mencionados combates. A lo largo de sus 12 capítulos seguimos el mismo esquema: cuatro o más cinemáticas que se intercalan con cuatro combates aproximadamente, cada uno con el mismo personaje. Por tanto, nos encontramos ante un buen argumento que encantará a los fans pero que confundirá a los jugadores más novatos y que puede llegar a cansar.

Como último apunte antes de pasar al siguiente apartado, cabe destacar la gran variedad de finales que se pueden obtener al completar las Torres de Kombate con cada personaje, que a pesar de no ser “canon” son buenos guiños que aportan variedad y dan pie a querer completar las antes mencionadas torres, además de que en ciertos casos actúan de “what if ?” y permiten conocer facetas de algunos personajes que no.

Get over here!

La jugabilidad de los últimos Mortal Kombat ha destacado por ser una de las más pulidas y profundas del género, y esto no deja de ser así en esta nueva entrega. Con un plantel jugable compuesto por 25 personajes, 3 de los cuales (Geras, Kollector y Cetrion) totalmente nuevos en la saga, este no se siente para nada pequeño o inferior al de otros títulos debido a la profundida customización y a la capacidad de cambiar sus ataques especiales. Todos los personajes se sienten perfectamente balanceados, y ningún personaje se siente más poderoso que el resto (a pesar de que haya dioses luchando contra un actor o una general del ejercito, pero ya me entendéis). Además, se podría decir que en términos de jugabilidad nos encontramos ante el título más accesible de la saga, gracias principalmente a su extenso y detallado tutorial en el que se nos enseñan todos los movimientos de una forma bien explicada y sencilla de comprender, por lo que si eres un jugador novato en la saga esta es la ocasión perfecta para entrar de lleno en esta.

Como en la gran mayoría de títulos de la saga, contamos con cuatro botones de ataque, siendo dos de ataque con los puños (triángulo y cuadrado) y dos de patadas (círculo y equis) que, combinados con los comandos de movimiento, permiten realizar ataques especiales. Si realizamos un ataque especial a la vez que pulsamos R1 aumentaremos el daño y duración de este, pero consumirá una de las dos barras de ataque especial con las que contamos (esta se regenera a lo largo del combate). La inclusión de esta barra y la barra de defensa son bienvenidas y acertadas, puesto que simplifican un sistema que ya se encontraba en títulos anteriores y le sienta como un guante. 

Si antes os mencionaba la customización, esta nos permite cambiar tres objetos del equipo de nuestro personaje, su skin y los ataques especiales con los que cuenta, pudiendo almacenar cada variante en diversas ranuras, dando así pie a probar y acostumbrarnos a la variante que mejor se nos dé. Sin embargo, a pesar de que la idea puede resultar muy atractiva e interesante, esta falla estrepitosamente debido al modo en el que obtenemos estas mejoras y objetos. Y es que salvo los ataques especiales, que ya vienen desbloqueados de base, el resto de elementos desbloqueables se obtienen de dos vías: o completando combates en el modo historia, que es lo lógico y más común, o abriendo cofres en el modo Kripta, que es sin duda el peor modo de todo el juego. ¿Y por qué digo esto? Pues porque se trata de un modo pensado para abrir cofres con recompensas aleatorias con el pretexto de controlar a un personaje desconocido en tercera persona a través de la isla de Shan Tsung. La idea es interesante y al principio te atrapa, pero el problema llega cuando descubres que para abrir estos cofres es necesario tener suficiente oro o corazones, y esto se obtiene combatiendo, por lo que hay que farmear bastante para avanzar en ese modo y conseguir esas recompensas. Por si no fuera suficiente, el juego encima cuenta con la posibilidad de pagar con dinero real para obtener dinero del juego, y así poder abrir más de estos cofres con contenido que debería poder desbloquearse de cualquier otra forma, pues no veo del todo bien contar con microtransacciones en un título que cuesta 69,99 €. Se trata por tanto de una buena inclusión que ha sido llevada de mala manera.

Siguiendo con los modos de juego, además del modo historia y el modo Kripta contamos con las Torres de Kombate, en las que dependiendo de su altura deberemos enfrentarnos a un número concreto de luchadores. Este es un modo ya clásico que no cuenta con muchas novedades más allá de que nos otorga ciertas recompensas para el modo Kripta, pero es que tampoco necesitaba muchas mejoras: es un modo sencillo, pero eficaz, que nos permite combatir sin parar y obtener los antes mencionados y diversos finales individuales de cada personaje. Pero no solo contamos con las Torres de Kombate clásicas, sino que en esta ocasión se ha incluido una variación de estas: las Torres del Tiempo, que funcionan de forma similar al Multiverso de Injustice 2, pues son desafíos disponibles durante un tiempo concreto que nos darán recompensas por completarlos. Junto a las torres se encuentran los también clásicos y obligatorios modos de combate local y combate online, que no necesitan mucha explicación. Ambos funcionan bien, y sorprende que el modo online no cuente con mucho lag, corriendo los combates con mucha fluidez y sin problema alguno, lo cual es ideal para el competitivo del título.

Finish Him!

El apartado visual de Mortal Kombat 11 es uno de los más impresionantes y detallados que podemos encontrar en el mercado a día de hoy. El uso de su propia versión modificada del Unreal Engine 3 es sensacional, y nos permite observar con un gran nivel de detalle lo que ocurre en cada combate: desde los moratones y los huesos rotos hasta los dientes llenos de sangre, todo está cuidado al detalle. Otro de los puntos fuertes de su motor gráfico es la gran capacidad para mostrar expresiones faciales, totalmente mejorada con respecto a como se realizó en Injustice 2, siendo más realistas y detalladas que nunca. Además, las animaciones están más detalladas y son más fluidas que en ningún otro juego del estudio, yendo el título a unos 60 fps estables en casi todos sus modos, aunque sí que llegan a caer en algún momento puntual en la Kripta.

En cuanto al diseño de personajes, puedo decir sin ningún tipo de duda que Mortal Kombat 11 tiene los mejores diseños de toda la saga. A pesar de que hubo cierta polémica con respecto a los diseños de los personajes femeninos porque en juegos anteriores tenían diseños más sexualizados, lo cierto es que los nuevos diseños de estos personajes son únicos y acordes con el universo establecido, además de ser mucho mejores. Sin embargo, el diseño de los nuevos personajes no termina de convencerme, pues a pesar de ser originales no terminan de encajar con el resto de luchadores (Geras quizá es el único que se salva). Sobre los escenarios no hay mucho que decir, están plagados de pequeños detalles y cuentan con diseños geniales, demostrando el enorme nivel que tienen en Netherrealm para crear buenos escenarios.

Por último, cabe destacar el apartado sonoro del título, comenzando por su banda sonora, que a pesar de sus altas cotas de calidad y su clara intención de dar la impresión de formar parte de una super producción de Hollywood, no termina de destacar debido a que es algo monótona y poco memorable. Siguiendo con su doblaje, por desgracia no contamos con el genial doblaje al español que tenían las dos entregas anteriores, pero por suerte el doblaje inglés está a la altura de la saga (salvo quizá por la actuación de Ronda Rousey en el papel de Sonya Blade, pues se nota que es novata en este campo), y siempre da gusto escuchar “FATALITY” o “TOASTY” (sí, sigue estando este easter egg).

Conclusión: “Flawless Victory”

Mortal Kombat 11 se trata del regreso de una de las franquicias más aclamadas y queridas de la industria, y lo hace por la puerta grande con uno de sus títulos más pulidos y completos. Con una gran jugabilidad, historia y apartado gráfico, encantará tanto a jugadores novatos como a veteranos en la saga, aunque serán estos los que disfruten más de la experiencia debido a la constante aparición de guiños y referencias a su universo, además de que cierra la historia que se lleva contando desde Mortal Kombat 9. Sin embargo, el título falla al incluir un sistema de loot boxes necesario para conseguir todos los desbloqueables y la posibilidad de pagar con dinero real para conseguir esto antes. Es por eso que, si buscáis un buen título de peleas, equilibrado, pulido y con apoyo constante por parte de su desarrolladora, este es sin lugar a dudas vuestro título, pero tened en cuenta que es necesario tener mucha paciencia para obtener el 100% del título. Por lo demás, se trata sin lugar a dudas de uno de los mejores títulos de la saga, a la altura de la trilogía original y de Mortal Kombat 9, además de que tiene algunos de los fatalitys más creativos y gore que se han visto hasta el momento.

 

Antonio Gallardo

Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.