Un Battle Royale con mucha magia
Lo primero que hay que comentar de SpellBreak es el modo en que puedes vencer a tus enemigos. Lo primero que tendrás que decidir es un elemento para empezar la partida, en cada partida podrás cambiar al elemento que quieras, así tenemos las siguientes variantes: fuego, hielo, electricidad, roca, viento y veneno. Cada una de estas variantes irán subiendo de nivel según las usemos y matemos enemigos con ellas, por lo que podemos masterizar una o ir subiendo todas según queramos.
Una vez empiece la partida, podremos encontrar entre los objetos de los cofres, otros guantes elementas que añadirán un segundo elemento a nuestro personaje. Si encontramos un guante del mismo elemento que hemos elegido al inicio, podremos mejorarlo, siempre y cuando sea mejor que el que llevamos puesto, que por defecto es del nivel más bajo. Este compuesto de dos elementos puede crear situaciones bastante complicadas para nuestros enemigos, por lo que es sabio elegir bien, aunque muchas veces dependemos de la suerte de la partida.
A parte de esto, también iremos desbloqueando talentos en tres categorías: mente, cuerpo y espíritu. Estos talentos nos darán bonos para las partidas y podremos llevar uno de cada tipo.
Cuando elijamos todo lo que necesitamos, dependeremos enteramente de la suerte de la partida. Esto significa que el equipo que encontremos puede ver muy bueno o muy malo, o incluso no encontrar algún tipo de equipo según la partida, algo que nunca me ha gustado mucho en este estilo de juegos porque da mucha aleatoriedad.
Por supuesto, y como en casi todos los juegos de este género, tendremos también un equipo estético que podremos equipar antes de empezar y que, realmente, no tiene ningún efecto sobre el personaje, más allá de que te vean más o menos bonito los otros jugadores. Los elementos estéticos los podremos comprar en la tienda del juego con monedas que podemos ganar tanto en el propio juego como comprándola con dinero real. También podremos comprar gestos e insignias.
Si tengo que criticar algo sobre SpellBreak que es distinto a otros juegos del género, es que no todos los jugadores empiezan necesariamente desde el mismo punto de partida, puesto que levelar los elementos da recompensas a los jugadores que pueden ponerles, fácilmente, por encima de jugadores novatos, quitando el elemento fundamental de este tipo de juegos que es la paridad entre jugadores.
Varios modos de juego
En SpellBreak tendremos varios modos de juego para disfrutar de las partidas como más nos convenga. El primero de todos es el modo tutorial donde nos enseñarán ha usar las diferentes habilidades y combinaciones de elementos para dar nuestros primeros pasos en el mundo del juego. También tendremos un modo práctica por si no estamos muy seguros de salir al mundo aún y queremos pulir un poco todo lo que hemos aprendido en el tutorial, probar técnicas, etc.
Obviamente, el modo de juego principal es el Battle Royale, donde tendremos que enfrentarnos a jugadores de todo el mundo y demostrar nuestras habilidades. Dentro de este modo tendremos tres categorías de juego que ya están disponibles para todos los jugadores. La primera el modo solitario, un todos contra todos donde cualquier otro jugador será nuestro enemigo, tendremos que intentar sobrevivir el máximo tiempo posible sin depender de nada más que nuestra habilidad y la suerte de los cofres. El segundo modo es el modo Dúo, donde te unirás a otro jugador, conocido o desconocido, para hacer equipo y acabar con el resto de dúos que hay en el juego. Por último, el modo Squad, donde seréis tres jugadores en el mismo equipo, pudiendo también invitar a gente conocida o esperar a que te emparejen con personas al azar.
Los modos de varios jugadores son bastante interesantes puesto que si alguno de los del equipo muere, el resto puede revivirle, mientras que si jugamos solos esto es, obviamente, imposible, por lo que las partidas tienden a durar más en los modos dúo y squad. También hay que tener en cuenta que en estos modos de juego los cofres que encontréis vais a tener que compartirlos, por lo que no todo son buenas noticias.
Lo común a todos los modos es que tenemos que intentar ser los últimos vivos en la partida. Al principio, el mapa será lo bastante grande como para no encontrar a ningún enemigo hasta que encuentres un par de cofres, aunque puede dar la casualidad de que te los encuentres en el momento 0, por lo que hay que tener cuidado. El mapa se irá haciendo más pequeño por culpa de una tormenta que irá quitando vida a los jugadores si se quedan en ella, quedando cada vez menos espacio seguro y, por lo tanto, creando el ambiente propicio para las batallas entre jugadores.
Batallas sorprendentes
Si hablamos del apartado gráfico de SpellBreak, desde luego nos va a sorprender a todos. Mientras los personajes tienen una estética, en la mayor parte de los casos y quitando los productos estéticos que puedes comprar, un poco infantil, el mapa y las batallas tienen un trabajo gráfico muy conseguido e interesante.
Las batallas son una locura de efectos y luces. Las explosiones, y efectos que podemos conseguir juntando diferentes elementos son una alegría para la vista y pueden dar la imagen de caóticas para cualquier jugador que comience su andadura en el juego, y creo que es el punto más fuerte, gráficamente hablando, del juego.
En cuanto a lo demás, los mapas no están vacíos, pero es cierto que no hay mucha variedad de diseños en el escenario, haciéndolo un poco repetitivo, aunque tampoco es que te de mucho tiempo a disfrutar del paisaje en este tipo de juegos.
El sonido también es un campo bastante bien conseguido en el título, no solo por la música de fondo que es bastante épica y agradable, sino también por todos los efectos de sonidos que las batallas llevan integrados, solo tenéis que imaginar la de diferentes efectos que pueden darse con los seis tipos de elementos combinados entre si.
Por todo esto, lo mejor, como decía, son las batallas, sobre todo cuando hay muchas personas a la vez, creando un caos de luz, color y sonido para volver loco a cualquiera.
Conclusión
SpellBreak es un Battle Royale con tintes distintos que intenta hacerse un hueco en una época donde la mayor parte de jugadores de este género están en Fortnite, cambiando las armas por la magia y creando un mundo de fantasía perfecto para aquellos a los que les guste probar sus límites y buscar nuevas combinaciones y efectos para ganar a los enemigos.
En lo personal, creo que no es un juego que esté del todo pulido, con algunos problemas como lo repetitivo de sus mapas y que dependamos mucho de la suerte para los objetos, dejando la habilidad del jugador, no en segundo plano, pero casi.
Podéis disfrutar el juego con subtítulos en español y, como en la mayoría de estos juegos, tenéis paquetes iniciales estéticos para comprar en su tienda oficial.
Yukop_
He visto más animes de los que puedo recordar. Con un mando entre las manos desde que tengo uso de consciencia. Maestra y futura especialista en Asia Oriental. Tengo demasiados hobbies para el poco tiempo que tengo.