[Análisis] Splatoon 3 – La cara del orden

[Análisis] Splatoon 3 – La cara del orden

Fecha de Lanzamiento
22/02/2023
DISTRIBUIDORA
Nintendo
PLATAFORMAS
Nintendo Switch
VERSIÓN ANALIZADA
Nintendo Switch
Wii U fue una consola incomprendida por muchos, al igual que lo fue en su momento PlayStation Vita, quizás dos adelantadas a su tiempo que, en un principio por X o por Y (la primera por una mala campaña de marketing al heredar el nombre de la anterior consola de Nintendo, entre otras cosas; y la segunda por ser incapaz de sostenerle el pulso en ventas a Nintendo 3DS, que era ama y señora con bastante solvencia gracias a su innovación y la magnífica sensación que había dejado DS previamente), tuvieron una muerte prematura. No obstante, dejaron algunos juegos magníficos para la posteridad, en el caso de Wii U, una nueva franquicia de Nintendo realmente original que, sin duda, consiguió cosechar un éxito mayor del que cualquiera podría haber imaginado, inclusive la propia empresa que lo había creado. Splatoon se convirtió en un fenómeno de masas en Japón, uno que, por su popularidad (conciertos de las Calamarciñas virtuales incluidos), se granjeó un puesto entre las grandes franquicias importantes para la Gran N de estos últimos años.

Splatoon funcionó tan bien que Nintendo no tardó demasiado en lanzar una segunda entrega, esta para Nintendo Switch. Si bien esto no suponía una sorpresa para absolutamente nadie, sí que contribuyó a que propios y extraños arqueasen la ceja cuando la compañía de Kioto desveló que iba a lanzar Splatoon 3 con Splatoon 2 todavía en funcionamiento. ¿Había necesidad? ¿Estaba justificado? ¿Los cambios añadidos eran suficientes para vender un nuevo juego en vez de contenido adicional de pago para el segundo juego? Bueno, a todo eso ya respondí en mi análisis de Splatoon 3, por lo que no veo necesidad de ponerme reiterativo. En este texto quiero hablaros de La cara del orden, la última entrega del pase de expansión de Splatoon 3, que llega para complementar Cromópolis, el primero de los contenidos del pase en vez la luz. En esta ocasión, Nintendo ha apostado por una suerte de modo campaña que se presenta con una jugabilidad al estilo roguelite, invitando así a los jugadores a “disfrutar de la experiencia una y otra vez”.

 

Combatiendo el blanco orden con colorido desorden

En Splatoon 3 – La cara del orden encarnas a Agente 8 que, después de coger el tren y dormirse, despierta misteriosamente en la Plaza Cromópolis, aunque todo es bastante raro, ya que la zona está desprovista de la variada paleta de colores que hacen de este lugar la vibrante y maravillosa urbe que es. Así pues, después de despertar con la ayuda de la voz de Perla, miembro del dúo Cefalopop ahora reconvertida en un simpático dron, comenzaréis a escalar la enorme Torre del Orden del Distrito del Orden que se yergue sobre vosotros, pues de su interior parece provenir la voz de Marina, la otra integrante del icónico grupo musical. Allí, en el ascensor que nos ayudará a subir a las distintas plantas del imponente edificio, Acht, una vieja conocida de Marina que parece haberse visto envuelta en todo esto, nos espera para guiarnos e informarnos sobre las particularidades de este extraño lugar que únicamente puede escalarse planta por planta. ¿Conseguirán Agente 8 y compañía desentrañar este misterio y conquistar la torre?

 

Conquista la Torre del Orden o levántate y vuelve a intentarlo

La premisa jugable de La cara del orden es realmente sencilla. Basándose en la fórmula roguelite (que no roguelike, pues hay una metaprogresión gracias a mejoras y cromochips que permiten nuestro fortalecimiento de cara a siguientes runs), el Agente 8, es decir, nosotros, tendremos que subir al ascensor de la Torre del Orden que parará piso por piso, hasta intentar coronar el piso superior, el número 30. Por el camino, habrá que lidiar con diferentes tipos de desafíos, desde destruir portales de los que aparecen distintos esquealetas (los enemigos de este contenido) hasta conducir bolas de billar gigantes hasta unas zonas concretas o el clásico Pintazonas con tiempo. La dificultad y el tipo de desafío se escogen entre tres posibilidades, que entremezclan las posibilidades con fácil, medio, difícil o muy difícil, amén de algunos especiales con retos opcionales para granjearse algún premio extra (no recibir daño, por ejemplo). Si bien el instinto de supervivencia básico podría llevarnos a pensar erróneamente que la mejor opción es apostar siempre por las dificultades más accesibles para llegar con mayor facilidad a los pisos superiores, esto hará que las opciones más complicadas se mantengan en el siguiente piso a esperas de que en algún momento no haya más opción que escogerlas, por lo que quizás sea más inteligente ir quitándoselas cuanto antes, o intentar esperar a estar un poco más “dopados”, dependerá de cada cual.

Si salimos exitosos de la prueba de nivel correspondiente, ganaremos cromochips y un puñado de monedas. Los cromochips son nuestra principal y más inmediata baza para mejorar nuestras habilidades, los hay de distintos tipos: potencia, ayuda, alcance, movilidad, fortuna y dron. La variedad, como puede verse, es amplia; desde mejorar el daño de disparo o volver nuestra tinta tóxica, hasta recuperar tinta más rápidamente, ampliar el alcance del arma principal o la amplitud del arma explosiva, mejorar la velocidad de nado o que el dron Perla pueda utilizar el tintófono. Asimismo, es posible acumular varias copias del mismo cromochip mientras vamos escalando la torre, lo cual se traducirá en una mejora del desempeño del cromochip en cuestión. En cuanto a las monedas, se pueden utilizar en algunos pisos que permiten pasar de la prueba en cuestión para visitar una máquina expendedora, que además de cromochips puede contener diversas habilidades finales o variaciones de nuestra arma explosiva, entre otras cosas (si tienes suerte, incluso una vida). Las monedas se pierden una vez que fracasamos en nuestro intento de conquistar la torre y perdemos las dos vidas de rigor (ampliables), por lo que tengas reparos a la hora de gastarlas. Por otro lado, al salir de la torre también ganamos unas cuantas perlas que sirven para que Marina pueda otorgarnos mejoras permanentes para siguientes runs.

Hablando de todo un poco, hay diferentes paletas a elegir antes de afrontar el complejo reto de escalar la Torre del Orden, aunque inicialmente estaremos algo más limitados y con el avanzar natural, al ir intercambiando entre las distintas paletas con cara run para conseguir llaves, iremos desbloqueando más. ¿A qué me refiero exactamente al hablar de paletas? Bueno, me refiero a equipamientos predeterminados con un arma principal, una explosiva y una habilidad definitiva. Es decir, que no es posible utilizar todas esas armas que has comprado y personalizarlo a tu gusto como en las batallas multijugador, aquí estás limitado en ese sentido a estas paletas, no obstante y como ya indiqué, las máquinas expendedores ofrecen la posibilidad de modificar un poco dichas paletas con algunos cambios puntuales, siempre y cuando la fortuna te sonría (y siempre durante la run en curso, por supuesto). Aunque soy consciente de que muchos suelen preferir aferrarse a su arma fetiche y no cambiar demasiado, aquí es importante hacerlo, ya que llegar hasta ciertos pisos (los de jefes, concretamente) con una paleta por primera vez, se obtienen llaves que sirven para abrir unas taquillas ubicadas fuera de la torre que otorgan diversos premios al jugador.

En cuanto a la dificultad, bueno, La cara del orden consigue hacerte sudar la gota gorda en más de una ocasión, aunque bien es cierto que yo no soy el más diestro de los jugadores de Splatoon. Si bien en la dificultad fácil y normal es todo generalmente asequible, el desafío se incrementa exponencialmente en difícil y muy difícil, especialmente según la prueba. Mantener el Pintazonas mientras no paran de salir esquealetas de los portales que te acosan de forma incansable, es una tarea que fácilmente puede llevarte a la muerte. En cualquier caso, las mejoras de hackeo de Marina ayudan en gran medida a mitigar la dificultad general después de repetir run tras run. Por supuesto, dada la escasa variedad de pruebas presentes en la torre, la repetitividad puede hacerse patente bastante rápido, ya que no hay demasiada innovación para mantener alerta al jugador más allá de las batallas contra jefes de los niveles 10, 20 y 30, aunque posiblemente por eso se ha decidido mantener la torre en apenas 30 niveles y no más, para evitar que se note tanto esta sensación. Sobre los combates contra jefes, son más desafiantes y demandan algo más de estrategia por parte del jugador, que tendrá que hacer uso zonas del escenarios para esconderse y ganar ventaja, como en el caso del jefe de la veintava planta.

 

Conclusión

Splatoon 3 – La cara del orden es un entretenido acercamiento al género roguelite por parte de Nintendo en el mundo de Splatoon, que se convierte en una excusa más que buena para aquellos que buscan algo más de contenido para jugar en solitario. Así pues, toca disparar tinta y combatir piso por piso mientras subimos en la Torre del Orden con la esperanza de llegar al piso final, mientras vamos consiguiendo cromochips para maximizar nuestras posibilidades a la vez que vamos eligiendo el tipo de desafío y la dificultad entre tres opciones diferentes. ¿No consigues llegar al final? No hay problema, visita a Marina y ve comprando mejoras permanentes para tus siguientes runs, a la vez que vas cambiando de paletas para experimentar con la que mejor se adapte a ti y obtienes más llaves para abrir taquillas y conseguir jugosos premios. Tranquila, paciencia y al toro, poco a poco conseguirás escalar más pisos y antes de darte cuenta estarás en el final. ¿Te gusta lo que oyes? Si es así, este contenido te interesa.

Kalas

Veterano en esto de escribir sobre videojuegos, pero un día me cansé y decidí fundar mi propia web. No soy amante de las marcas, sino de los buenos juegos, aunque Nintendo ha estado muy presente en mi infancia. Sobrevivo en mi lucha por convertirme en un especialista en Asia Oriental.