![[Análisis] SteamWorld Build [Análisis] SteamWorld Build](https://gaminguardian.com/wp-content/uploads/2023/01/SteamWorld-Build.png)

Un momento, ¿Cómo que un nuevo spin-off? Bueno, es complicado hablar de la cronología de la franquicia y de todos los «tejemanejes» que se han realizado entre bambalinas, pero lo cierto es que SteamWorld es una franquicia que vive más a base de juegos alternativos que de entregas principales. Así, frente a los dos títulos canónicos encontramos SteamWorld Heist, un título de estrategia por turnos en 2D; SteamWorld Quest: Hand of Gilgamech, un juego de rol por turnos; y el título del que hoy vengo a hablaros, SteamWorld Build, la primera entrega de la franquicia centrada en la gestión de ciudades al más puro estilo Cities: Skylines o SimCity. Cabe destacar que este nuevo juego no está desarrollado por Image & Form, padres de la franquicia, si no por The Station, equipo sueco conocido por su papel de apoyo en el desarrollo de la serie Little Big Planet. ¿Queréis saber qué tal está el juego, y si merece o no darle una oportunidad? ¡Pues dentro análisis!
A la sombra del valle, una ciudad sale adelante
Que un juego se centre en la construcción de ciudades no significa que no pueda contar una historia, y SteamWorld Build es un claro ejemplo de esto. Así, el título de The Station narra la historia de Astrid, una pequeña robot quien parte junto con su abuelo en un viaje desesperado por construir un refugio en mitad del desértico paraje. El planeta se muere, y las leyendas dicen que bajo el territorio de la futura urbe se esconde la tecnología necesaria para evitar la hecatombe. Nuestra joven arquitecta se pondrá manos a la obra con la ciudad mientras reúne los recursos necesarios para excavar y encontrar los tan necesarios recursos tecnológicos. La premisa resulta sorprendentemente interesante y llamativa, distando mucho de lo visto en otros juegos similares al plantear una suerte de carrera contrarreloj en la que tendremos que manejar todos los negocios, transportes y recursos a la perfección para obtener ese ansiado acceso a las minas. Sin embargo, esta pronto se diluye para dar paso a una experiencia mucho más convencional, en el que no hay un catálogo de personajes memorables o algo por el estilo. Sea como sea, lo que encontramos de primeras es un hilo conductor sólido y una ambientación especialmente buena, que mantiene el altísimo nivel de la franquicia al ofrecer una creatividad enorme en su constante mezcla de elementos propios del salvaje oeste con el steampunk.
Y es que el tratamiento steampunk no solo aporta a nivel estético, si no también a nivel mecánico: a lo largo de nuestras partidas podremos configurar diversos tipos de negocios que nos aportarán tanto recursos como ciertas mejoras, y podremos encontrar además un gran número de trabajadores y habitantes que supondrán una gran diferencia en la construcción de nuestra urbe. Además, todo girará en torno a la vía de un vasto ferrocarril que nos suministrará constantemente con recursos y mejoras, por lo que será importante saber dónde colocar los hogares y los negocios para que no estén desconectados de la vía del ferrocarril. Si de primeras esto os resulta complejo, no temáis: el título está repleto de tutoriales que explican de forma detallada como funcionan cada una de sus mecánicas, haciéndolo un juego bastante aceptable para los jugadores menos experimentados dentro del género.
Arquitectura mecánica avanzada
En cuanto a cómo se juega a SteamWorld Build, lo cierto es que no hay mucho que explicar que no se haya visto en otros juegos: tendremos un enorme mapa que veremos desde un punto de vista cenital y en el que tendremos que ir colocando de forma estratégica diversos tipos de edificios, todo con el objetivo de aprovechar al máximo el terreno y los recursos que este ofrece. Esta sencilla idea, que hace gala de una genial ambientación, peca de ser extremadamente repetitiva, y durante las primeras horas de juego nos veremos constantemente inclinados a realizar las mismas tareas sin ver el suficiente cambio, intentando satisfacer las necesidades de los trabajadores mediante un sistema algo confuso que deja mucho que desear. Incluso poniendo la velocidad al máximo, es innegable que el juego avanza de forma lenta y no ofrece novedades… Si es que solo nos quedamos en la superficie. No es bueno juzgar a un libro por su portada o a un juego por sus primeras horas, y este es el caso de SteamWorld Build, en donde a partir de las 4/5 horas de juego comienza a ponerse genuinamente interesante gracias a la aparición del mundo subterráneo. Mediante esta segunda «dimensión» no solo se aporta un curioso componente de verticalidad al título que, de base, lo aleja de otros exponentes del género, si no que también expande enormemente la cantidad de opciones y posibilidades que ofrece el título. De hecho, se podría decir que el subterráneo cambia por completo el género del juego, presentando una jugabilidad que recuerda al género de la estrategia en tiempo real. En este sentido, tendremos que ir utilizando a nuestros trabajadores de forma individual mientras les asignamos zonas en las que excavar y obtener materiales. En general se trata de un sistema sencillo, pero consigue aportar una más que necesaria capa de profundidad a un juego que, de otra manera, podría resultar algo repetitivo.
Visualmente, SteamWorld Build es un juego realmente vistoso y memorable, que hace gala de una paleta de colores cálida y muy variada a través de la cual se consiguen resaltar todos los elementos en pantalla independientemente de su tamaño. Si bien es cierto que algunos modelos y texturas pueden llegar a resultar algo pobres (especialmente si acercamos la cámara), es innegable que The Station ha conseguido mantener un nivel gráfico a la altura de la franquicia. Mención especial para el rendimiento del juego, que es realmente sólido al mantener una constante estabilidad tanto en la superficie como en el subterráneo. ¿Y qué hay de la banda sonora? Bueno, no os voy a engañar: esta es bastante floja y, aunque casa bien con la ambientación, no consigue destacar en ningún momento. El diseño de sonido sí está bien llevado, pero creo que la banda sonora necesita algo más de personalidad.
Conclusión: Una ciudad de vapor y arena
SteamWorld Build es un juego de gestión bastante digno que, aunque no supone una auténtica revolución, sí que consigue destacar gracias a la inclusión de elementos tales como la exploración subterránea. Se trata de una propuesta más que decente para los principiantes dentro del género, si bien es cierto que los más veteranos podrán encontrar una experiencia demasiado básica y repetitiva. Sea como sea, los fanáticos de la serie podrán disfrutar con orgullo de otro buen spin-off.

Antonio Gallardo
Normalmente escribiría algo profundo que contara más sobre mi... ¿Pero de verdad alguien lee esto? Bueno, en ese caso... Me gustan los videojuegos y el cine. A veces unos más que otros, ya sabéis como funciona. Si queréis saber más, solo tenéis que leer lo que escribo.