Controla que los poderosos no se pasen de la raya
La historia nos sitúa en una Londres futurista, en la que DedSec, bajo el mando de Sabine y con la ayuda de una IA con conciencia propia llamada Bagley, se dedica a controlar a los poderosos que intentan pasarse de la raya. En este contexto, se producen en la ciudad los atentados, en forma de bomba, más desastrosos de la historia reciente europea. Estos fueron producidos por un grupo desconocido llamado Día Cero, quienes cargan las culpas a DedSec, obligándoles a desaparecer y dejar su guarida. Tiempo después, la preocupación y la paranoia provocada por los atentados provocan que ciertos grupos ganen importancia en la ciudad. Los dos grupos que más destacaron: Albion, un equipo paramilitar que se encarga desde entonces de la seguridad de la ciudad, y el clan Kelley, la mayor organización mafiosa de Londres. En este contexto, DedSec reaparece de sus cenizas, y despertando a Bagley otra vez, pone en marcha de nuevo la organización.
Aunque la historia empieza de una forma interesante, en muchos momentos es anodina, y llegando al final, muy previsible. Algunos diálogos y motivaciones de ciertos personajes hacen que, siendo interesantes, cambien tanto de mentalidad o de forma de actuar que apabullen por lo mal escritos que están. Eso sí, hay excepciones: Bagley es prácticamente el protagonista no controlable del juego. Sus diálogos (doblados por el maestro Miguel Ángel Garzón, conocido por su trabajo como Bentley en la saga Sly Cooper) a pesar de ser una IA, están bien metidos, muchas veces se dedica a hacer bromas o a usar una ironía de forma inteligente que te puede sacar una sonrisa, aunque para llegar al nivel de GlaDos aún le queda.
Londres luce espectacular
Asimismo, quería hablar del protagonista que controlamos, aunque teniendo en cuenta que podemos controlar literalmente a cualquier personaje que nos crucemos por la calle, la personalidad de estos brilla por su ausencia, y en ocasiones su doblaje chirría mucho.
Sobre la localización del juego y su ambientación podemos decir que Londres luce espectacular, y aunque el mapa no es tan grande (cosa que agradezco), muchos de los barrios de la ciudad están bastante bien implementados. Hay drones de todas clases vigilando las calles, coches vacíos conducidos de forma remota automáticamente, y sobre todo, muchas personas poblándolo. Aún así no está tan llena de vida pues he visto muy pocas interacciones entre los ciudadanos de Londres. Pese a ello, sí que veremos algunas peleas de gente con Albion o manifestaciones de anarquistas.
Las misiones son repetitivas, pero ofrecen libertad
El eje central de la jugabilidad de Watch Dogs: Legion es uno de los más innovadores que se han visto en un triple A en los últimos años: podemos controlar literalmente a cualquier persona que nos crucemos siempre y cuando a esa persona le guste DedSec. No podremos reclutar a cualquiera desde el principio, pero poco a poco, conforme vayamos haciendo misiones, iremos ganando popularidad. Cada personaje tiene características distintas, e incluso puede pertenecer a una clase concreta. Algunos tendrán acceso a diferentes zonas, por ejemplo, los policías a las comisarías, los médicos a los hospitales, etc.
Algunos cuentan con habilidades mejoradas de combate, hackeo o pasivas como salir antes de la cárcel. Multitud de prestaciones que pueden hacer que las misiones del juego sean interesantes y se puedan abordar de diferentes formas. Además, estos agentes pueden morirse (si jugamos en muerte permanente, lo cual recomiendo), ser detenidos, lesionarse e incluso ser raptados por una némesis (personajes enemigos a los que ya hemos derrotado y vuelven a por más). Los agentes se pueden personalizar también visualmente, permitiendo cambiar su atuendo, incluso cómo lo llevan puesto (por ejemplo, chaqueta cerrada o abierta). La ropa la podremos comprar con la moneda de este mundo, el ETO.
Sobre las misiones de la historia principal, hay poco que decir. La mayoría de ellas se basan en, entrar en ‘x’ complejo, hackear o robar algo, y ponerse a salvo. Lo podremos hacer como queramos, en plan espía, usando drones arañas o a lo Rambo con armas. Son prácticamente siempre la misma misión, solo que nosotros podemos enfocar la forma de hacerlo, basándonos en las prestaciones de cada uno de los miembros de nuestro equipo. Las misiones secundarias, como las de reclutamiento, son muy repetitivas. De todas formas, hay más formas de reclutar, como eliminar a una némesis de algún personaje reclutable, rescatar un rehén y que luego se quiera unir a ti, o salvar a una persona de un ataque perpetrado por agentes de Albion en medio de la calle.
Manejar drones es divertido
Cada cierto tiempo, Bagley nos recomendará algún objetivo con características especiales para reclutarle y aprovecharlo en nuestro propósito. Algunas misiones requerirán usar específicamente a ciertos personajes, ya sea para infiltrarnos en una obra con un obrero, o ligarte a una representante del gobierno, teniendo que coger a un personaje masculino.
Todos los personajes cuentan con un árbol de habilidades común, en el que podremos canjear puntos de tecnología. Algunas habilidades destacables para canjear serían hackeos nuevos, nuevos utensilios y armas no letales, o nuevos mecanismos para pasar desapercibidos. Tanto el combate cuerpo a cuerpo, como los tiroteos no inventan nada. En uno por simple: atacar, esquivar y agarrar; y en otro por ser lo mismo de siempre, con autoapuntado, solo que esta vez podemos elegir armas no letales para atacar a los enemigos, o simplemente matarlos con armas letales, y la decisión será totalmente nuestra.
Los tiroteos aprovechan la tecnología del DualSense, bloqueándose cuando recargamos y vibrando los gatillos cuando disparamos. Asimismo, podremos usar drones para combatir, pirateándolos y controlándolos nosotros mismos desde una distancia prudencial. También podremos hacer que traicionen a sus aliados y los maten a sangre fría. La verdad es que el manejo de drones voladores y robots araña es divertido y está bien implementado, aportando una interesante diferencia jugable con respecto al primer juego.
El desplazamiento por Londres puede darse de varias formas. La más común es conduciendo por sus calles con los diferentes coches, algunos más futuristas que otros. Estos vehículos los encontraremos por la calle, aunque algunos agentes pueden tener el suyo propio. El otro método, más convencional, es usar el metro a modo de viaje rápido. Esta es una interesante idea ya vista en otros juegos, como Marvel’s Spider-man, que funciona a base de puntos repartidos por toda la ciudad. Además, en PS5 los tiempos de carga de estos viajes rápidos son absurdamente cortos. La última forma de desplazarnos que reseñaría sería utilizando drones de carga, con los que podemos ir sobrevolando Londres, aunque debido a su lentitud, solo lo recomendaría cuando queramos llegar a sitios altos. Sobre la conducción, decir que es más de lo mismo visto en el género sandbox, no destaca en nada, salvo algunos coches especiales.
El mapa se divide en distritos, los cuales deberemos ir conquistando para empezar a concienciar a Londres sobre la realidad de la represión que el gobierno, Albion y el clan Kelley realizan sobre la población. Al conquistar un distrito haremos que nuestra popularidad aumente en esa zona. Una vez hecho esto podremos reclutar a mucha más gente que antes al haber aumentado la simpatía por DedSec. Además, nos recompensarán con un agente especialista en algún campo, como un maestro hacker o un maestro anarquista. En el mapa nos encontraremos también con ciertos minijuegos, entre ellos jugar a los dardos o a dar pataditas a un balón, y por ello nos darán ETO u otros premios, aunque no son gran cosa.
Reclutar personajes es innovador, pero no perfecto
En mi opinión, debo decir que, aunque la implementación de esta mecánica con la que podemos controlar a cualquier personaje está mejor de lo que esperaba para ser un juego de Ubisoft, podría haberse aprovechado todavía más, ya que encontrar miembros útiles para DedSec no es algo fácil, y al final dependeremos de las recomendaciones de Bagley y de los miembros que desbloqueamos al conseguir distritos nuevos. Más clases, más disfraces y más diferencia de utensilios podría haber potenciado aún más la jugabilidad y rejugabilidad de esas misiones.
Las misiones son demasiado repetitivas, aunque esta repetitividad la podemos mitigar usando varios personajes en distintas misiones. Otra de las cosas que me ha molestado es ver cómo no han usado el potencial de la mecánica para meter más misiones con cambio de personaje obligatorio en medio de la misma. Lo podrían haber implementado de diversas formas, ya sea para salir corriendo escapando de un sitio, crear una distracción mientras otro agente se cuela por detrás, u otras ideas, cercanas a las misiones conjuntas que GTA V realizaba con bastante acierto en su día.
Encima, eliminaron muchos de los elementos RPG existentes en el juego cuando estaban desarrollando. Elementos como los niveles de los personajes y el sistema de experiencia y desbloqueo de características y habilidades aparecían en los primeros tráilers del juego y luego fueron eliminados.
Apartado gráfico y sonoro
PlayStation 5 aprovecha bastante bien sus funciones para mejorar la iluminación, reflejos y sombras con respecto a la versión de PS4 (la cual probé durante las primeras horas). En cuestiones generales, el juego no es el más puntero en modelados, aunque tampoco destaca en el mal sentido, simplemente cumple su papel con soltura. Los modelados de los personajes que podemos controlar pueden repetirse de vez en cuando o cambiar bastante poco. En otros aspectos, he podido notar un popping muy pronunciado.
La OST se encuentra a cargo de Stephen Barton, y exceptuando algunas pistas, resulta en ser puramente ambiental. En el coche, podemos usar la radio en la que, como suele pasar en otros sandbox, podemos disfrutar de algunos temas musicales existentes en la realidad, entre estos, me sorprendió la presencia del grupo Gorillaz con su mítico tema “Feel Good Inc.”. Los efectos de sonido cumplen sin más, aunque también es cierto que noté bugs a la hora de ir conduciendo y chocarme con ciertos elementos de la calle, faltando a veces el sonido de los impactos.
El doblaje de las voces principales está bastante bien, siendo mi preferida la de Bagley. Aún así debo destacar de manera negativa las voces de los personajes que controlamos, ya que al ser tantas las posibilidades entre las que elegir, he notado con varios personajes efectos raros en las voces de los dobladores, resultando en unas voces rarísimas que nos sacarán totalmente de la experiencia.
Podría haber marcado tendencia
En conclusión, Watch Dogs: Legion es un sandbox que nos ofrece una experiencia interesante, pero mal explotada en ciertos ámbitos y poco innovadora en otros. La única excepción al respecto es su mecánica de poder controlar a cualquier NPC en pantalla. Esto hace que en algunos momentos sintamos como si ya hubiéramos jugado, por su proximidad jugable a otros títulos del género. Quizás puliendo algunos detalles podría haber sido un juego que marcara tendencia, en vez de quedarse en un juego entretenido y del montón.