Y a pesar de ser conscientes de lo tremendamente lejos de la realidad que se encuentran todas estas narrativas, seguimos consumiéndolas al mismo ritmo que siguen produciéndose, tanto en España con la reciente Élite o spin-offs de las mencionadas anteriormente, como en Estados Unidos con 13 Reasons Why, Sex Education o similares, incluso en culturas orientales como la japonesa, que nos ofrece animes del estilo como Sakurasou no Pet na Kanojo o Youkoso Jitsuryoku.
Es más, los animes tienen la oportunidad de potenciar este cliché añadiendo otro de esos que nunca fallan: los superpoderes, porque, sin irme demasiado lejos en el tiempo, ¿quién no desearía formar parte de la escuela de hechicería de Jujutsu Kaisen? Dejando de lado, claro está, la muerte y sufrimiento que trae consigo (aunque para sufrimiento el mío analizando Jujutsu Kaisen: Cursed Clash); pero en conclusión, todos y cada uno de nosotros hemos soñado alguna vez con tener poderes mágicos, y si eso lo juntas con el siempre útil cliché de adolescentes en un instituto, tienes garantizado una base estable de público potencialmente interesado en tu obra.
Y con todo esto cuenta, de una manera u otra, el título del que os vengo a hablar hoy: Blade Prince Academy, el juego creado por Angel Corp, siendo esta la primera obra del estudio francés; os animo a leer el análisis completo, claro está, pero en pro de motivaros a ello, os avanzo que ser su primer juego no implica una baja calidad, pues, al igual que me sucedió con Last Epoch, me he encontrado con un juego más que digno. ¿Por qué? ¿Y vale la pena pagar por él? Hablemos.
Una historia como la tortilla francesa
Blade Prince Academy nos transporta a una academia a la que acuden guerreros de distintos tipos: espadachines, luchadores cuerpo a cuerpo, francotiradores, magos…, eso ya para empezar choca un poco con el propio título del juego pues no tenemos solamente “príncipes de la espada”, pero no es algo a lo que dar importancia, simplemente creía conveniente comentarlo para introducir el apartado de la narrativa.
Y es que al igual que con el título, en la historia de este juego encontramos muchas ideas a desarrollar que terminan antes de lo que deberían o que no están todo lo bien desarrolladas que podrían haber estado; curiosamente esto no creo que se deba a querer sacárselo de encima o a falta de talento, pues el juego desprende esfuerzo y dedicación a la par que un resultado más que satisfactorio. Por ello, me resulta cómico pensar en esta trama como una tortilla francesa: es perfectamente funcional, tiene buena calidad, pero pudiendo hacerla mejor se ha decidido que no sea así.
En esta entrega deberemos ponernos en la piel de los distintos alumnos de la academia con el fin de proteger Abjectalia, nuestra ciudad, que se verá constantemente amenazada por situaciones tan distópicas como ciberpunk. Y… no tiene mucho más la historia principal, aunque tampoco se le requiere, pues el atractivo narrativo no recae en ella sino en las historias de cada uno de los personajes, decisión correcta en mi opinión, puesto que con ello han apostado por el formato de la visual novel.
¿Por qué una visual novel?
Como decía: que la narrativa fuese “floja” no es fruto ni de falta de trabajo ni de ganas, pues con más de 10 personajes jugables, cada uno mantendrá su propia historia en conexión con el resto, es decir que cada personaje mantendrá muchas microhistorias mientras fortalece su relación con el resto del equipo. De esta manera, sentiremos que recae en nosotros la responsabilidad de si nuestro personaje mejora más o menos rápido, pues según vaya avanzando la relación con otros, obtendrán boosts en todas las stats, “obligándonos” así a estar pendientes de la historia para saber bien qué decir para no estropearlo.
Por desgracia, las elecciones no destacan por su dualidad, sino que está bastante claro cuál es la opción correcta a escoger en todos y cada uno de los casos, por lo que ese interés semi-forzado a la historia de cada uno decae un poco a la que te das cuenta de que la opción correcta siempre es perfectamente deducible aunque hayas ignorado la conversación hasta ahora. Además, no existe el aliciente del castigo ante el error, pues acertar aumentará en dos puntos tu relación mientras que fallar lo hará en uno.
De esta manera el formato va decayendo hasta que vale más la pena aumentar la relación yendo juntos de misión que propiamente cultivando el vínculo. Así, aunque hay un notorio esfuerzo detrás, no han logrado dar con la tecla para hacer que esta fórmula sea todo lo que esperaban de ella al decidir utilizarla.
Gestión de recursos
Si apuestas por usar el formato visual novel, esto acostumbra a venir acompañado por tener diversos quehaceres más allá de ir de misión en misión. Sin embargo, en este caso eso no es algo que se haya decidido expandir y han optado por la existencia de un “lobby”, aka la propia academia, en el que sucederán las distintas conversaciones y encuentros mientras podemos mejorar o eliminar pactos de nuestros personajes, mejorar la fórmula de las pociones, ver el progreso de las relaciones entre personajes y ponerlos a descansar para que recuperen energía.
Esto último será importante gestionarlo bien, pues un personaje con poca energía tendrá un peor rendimiento en la misión, de esta forma en los primeros compases de la aventura nos veremos forzados a dedicar “días laborables” a que los personajes descansen, pues los escuadrones de misión van de 4 en 4 y hasta que no obtengamos personajes suficientes para ir rotando, necesitaremos hacerles descansar para que vayan recuperando la energía asiduamente, cada dos misiones más o menos, para no ver un bajón severo en sus estadísticas.
De la misma manera gestionaremos los pactos, siendo estos mejoras de estadísticas permanentes que obtendremos durante las misiones y en algunos casos al llegar a según qué niveles de relación con otro personaje. Cada uno tendrá un límite de pactos que puede tener a la vez aunque esto mejora según se suben niveles, al igual que la obtención de hasta siete habilidades para combinar de las que ahora entraremos un poco más en detalle.
Un ARPG pausado
Hemos tardado en llegar, pero ahora sí hablaremos del combate y mazmorras de Blade Prince Academy. En estas nos toparemos con mazmorras cerradas de piso único en las que deberemos cumplir diversas misiones, ya sea acabar con un enemigo fuerte, con pseudo-jefes o algunas hordas, o destruir torres de comunicación o semejantes; la cuestión es que a cada misión que entremos tendremos un objetivo concreto aunque este realmente es solo un motivo, pues el gameplay general no variará más allá de la dificultad que suponga.
Siendo breve, nos dedicaremos exclusivamente a combatir, combatir y combatir con el aliciente de interactuar con el entorno y jugar con el posicionamiento. Por ser más concreto, el mapa nos ofrecerá distintos elementos que tendrán su importancia en combate como pueden ser barriles o plataformas explosivas, trampas de pinchos o cañones laser, ofreciendo como resultado un valor añadido a cómo te posicionas tú para forzar el posicionamiento del enemigo.
Además, nuestros personajes contarán como ya hemos dicho con distintas habilidades a combinar, y aunque al principio pensaba que las mejores serían las últimas que llegan y me parecían pocas opciones, más adelante terminé notando cómo ante cada misión confeccionaba de manera distinta a mis personajes, ya que el combate nos ofrece una enorme cantidad de combos y para ello deberemos seleccionar no solo a los personajes que mejor casen entre sí sino también las habilidades de estos.
Por ejemplo, podemos juntar una habilidad de daño en área con alguien que atraiga a todos los enemigos, pero además si esta habilidad de daño en área crea un quemado podremos potenciar una habilidad de single target que se vaya realizando tanto como duren los quemados, y así constantemente, por lo que en pos de hacer el combate más atractivo y fácil, dedicaremos casi tanto tiempo a la misión como a la confección de equipo y personajes antes de esta.
Y aunque se trata de un ARPG donde controlaremos a los personajes tanto a la vez como por separado según la ocasión, esto es mucho más sencillo desde el modo pausa, que es el que terminaremos usando en su mayoría cuando la aumente la dificultad. En este modo podremos planificar paso a paso los movimientos a realizar por nuestros héroes, y aunque la IA también se mueve sus movimientos son predecibles y medianamente controlables en base a los nuestros, por lo que pausando podremos realizar una estrategia efectiva teniendo en cuenta posicionamientos, habilidades y tiempos de casteo.
Todo esto para generar combos explosivos y electrizantes.
Dibujo y música franceses
El apartado visual de Blade Prince Academy está claramente inspirado en juegos actuales, con chyrons y banners que recuerdan mucho a Persona 5 y con escenarios de un estilo artístico que hace pensar en Hades, aunque este estilo está bastante generalizado, y como me gusta decir: la inspiración en obras destacadas es la mejor fuente; ya que siempre que no hablemos de un plagio ni una actuación con mala fe, está perfectamente bien referenciarte artísticamente en algo que sabes que ha funcionado, especialmente si va acorde al estilo macarrilla a la par que desenfadado que tratas de transmitir.
Sin embargo, el diseño de personajes es muy de fantasía francesa. No sabría como explicarlo dando una explicación que os resulte “creíble”, por así decirlo, pero puedo ejemplificarlo con el manga francés Radiant o el cómic Blacksad, pues los diseños tanto de expresiones faciales como de ropajes y morfológicos siguen unos patrones bastante marcados que, como digo, identifico visualmente pese a no saber demostrarlos; pero vaya, este estilo de dibujo encaja a la perfección con el diseño de escenarios y la tónica del juego.
En cuanto a la banda sonora he hecho un pequeño bait, ya que no tiene nada característico de nuestros vecinos al otro lado de los Pirineos, en parte debido a que no se centran en un solo estilo, sino que encontramos tanto música lo-fi como electrónica con toques de punk, alguna más hip hopera… un repaso musical a la multiculturalidad europea; contando con relativamente pocas piezas musicales pero toda y cada una de ellas bien seleccionada y colocada. El juego no está doblado, como es comprensible dado ser un juego de bajo presupuesto, pero debo decir que echo de menos una traducción al castellano especialmente al tener en cuenta que estamos tan solo a una frontera de distancia y el uso de palabras españolas para varios nombres (como Diamante o King Mago).
Por ello, les invito a darle una vuelta y añadirlo, ya que es un juego lo suficientemente bueno como para querer apuntar a un mercado más amplio a la par que cercano para ellos.
Conclusión
Sin ánimo de extenderme demasiado, quiero dejar claro que es un título que por 19,99 € te dejará un más que buen sabor de boca, tanto por su diversión en combate y en consecuencia la confección de personajes y equipos, como por la cantidad de horas que te ofrece a tan bajo precio.
Blade Prince Academy es un juego que puedo recomendar a cualquier amante del RPG y a la mayoría del público en general, pues una vez te haces con el truco del juego pausado, los combos y los posicionamientos, las misiones son un no parar de diversión en el que querremos repetir misiones tan solo por ver distintas maneras de completarlo.
Si en próximos títulos repiten la fórmula logrando mejorar su narrativa y dando con la tecla del formato visual novel, estoy seguro de que lograrán ofrecernos un juego digno de una puntuación mucho mayor y, espero, en castellano.