PQube Games es muy conocida en el terreno de las visual novel en Europa, y esto es gracias a que la mayoría por no decir todas las que llegan aquí, son localizadas por ellos, como es el caso de títulos menores como Tokyo School Life o Song of Memories, aunque también nos han traído visual novel del calibre de la gran Steins;Gate, con su entrega mejorada Steins;Gate Elite. De todas formas, no únicamente nos ayuda a disfrutar de este género, también nos ha traído Guilty Gear XX Accent Core Plus R y Blazblue: Central Fiction Special Edition, y pronto llegará Kill la Kill The Game IF, pero esto es solo para denotar su prestigio, ahora volvamos a las visual novel, porque la gente de PQube se ha lanzado a la piscina y ha decidido crear su propio juego.
Este no es otro que Kotodama: The 7 Mysteries of Fujisawa, este ha sido desarrollado con la ayuda de Art Co., quienes llevan varios años sin encargarse de un juego. Kotodama está ya disponible para Nintendo Switch, PlayStation 4 y PC, y nosotros hemos podido jugarlo en la consola híbrida de Nintendo. Bien pues, ¿qué nos deparará este experimento de la gente de PQube?
Desnudando la verdad
La Academia Fujisawa, a ojos de cualquiera, es una academia como cualquier otra: estudiantes normales, clases normales, una historia normal… pero, como digo, eso sería a ojos de cualquiera. Realmente, en Fujisawa nada es lo que parece, y será nuestro objetivo como alumno recién transferido el descubrir la verdad que se esconde detrás de cada uno de los siete misterios que nos aguardan en la academia.
El principal motivo que impulsa a nuestro protagonista a adentrarse en todos estos misterios no es otro que el rumor de la existencia de la maldición de Makoto, siendo este el mayor de los secretos que se esconden aquí, aunque para llegar hasta él primero deberemos lidiar con todos los demás, empezando con el que nos presenta Nanami Kagura, compañera nuestra que forma parte del club de ocultismo, quien, junto a Wakaba Asagiri (miembra también del club de ocultismo), nos ayudará a resolver los misterios dada su enorme curiosidad por ellos.
Pero claro, como en todo misterio, habrá que encontrar tantas pistas como podamos a través de una enorme investigación, en la que, por supuesto, no solo encontraremos respuestas a preguntas, encontraremos también nuevas incertidumbres a raíz de lo que nos digan, y ojo, también nos toparemos con muchas mentiras e información oculta, no siempre (de hecho, casi nunca) resultará una investigación sencilla, ni colaborarán puramente con nosotros.
Y es aquí donde entra el importante rol de nuestro protagonista. Debe ser él y no otro quien se encargue de averiguar la verdad, pues este hizo un contrato con un demonio con forma de zorro (algo bastante común en Japón, lo de darle forma de zorro a los demonios digo, no lo de hacer contratos con ellos, aunque si creéis en ello, quién soy yo para negaros su existencia), dicho contrato le otorga el poder de Kotodama, ¿qué es este poder? Pues bien, es “el poder de las palabras”, a través del cual podremos entrar en la mente de las personas a las cuales estemos interrogando.
Vale, ¿y cómo funciona esto? Pues básicamente nos haremos una imagen mental de la persona y deberemos tratar de desnudarla, ¿cómo? Con el Candy Crush. Bueno, más o menos; cierto es que aparece un cuadro con multitud de orbes donde cada uno representa un elemento (amor, avaricia, paz, lágrimas y fuego) y deberemos alinear 3 iguales para que causen efecto sobre la persona en cuestión, aunque no tendremos total libertad de movimiento entre elementos al igual que en la mayoría de juegos de este estilo, sino que cuando seleccionemos un orbe, este pasará a estar en la posición más alta de su fila, aunque en el caso de elegir el que ya esté en este lugar, el orbe simplemente cambiará de elemento.
A medida que vayamos haciendo combinaciones y juntando tres orbes iguales, iremos desnudando a los personajes, hasta dejar más bien poco a la imaginación, lo justito, y deberéis lograr esto lo antes posible, puesto que habrá un número de turnos máximos que irá disminuyendo cada vez que se haga un movimiento, y si se llega a 0 antes de terminar, despídete de todo el progreso que hayas hecho desde el último punto de guardado, puesto que deberemos regresar a él.
[wonderplugin_gridgallery id=2634]
Como casi toda visual novel, habrá varios finales disponibles, y para llegar al verdadero simplemente deberéis encontrar todas las palabras y frases secretas, que se añadirán al libro de palabras y permitirá subir los elementos de los orbes a nivel 3.
Gráficos y sonido
En cuanto al apartado gráfico, tiene luces y sombras a partes iguales. Por ejemplo, el diseño base de los personajes está bastante bien, de estilo anime pero no demasiado descarado, pero de vez en cuando tratan de mostrar otras perspectivas más allá del plano directo, y ahí hay pequeños fallos de diseño que afean los personajes. Los fondos son simplones, sin nada que los caracterice como suyos propios, pero que no están mal hechos, y tienen un toque de difuminación para centrar la vista en los personajes, cosa que logra, y además el hecho de ver el fondo en segundo plano tanto consciente como inconscientemente le da más valor a estos.
En lo referente a la banda sonora, no es algo que destaque, pero de nuevo tira por el estilo anime, sobretodo en lo que es el opening del título, que recuerda mucho a los vistos en las animaciones japonesas. Pese a no ser brillantes, las piezas elegidas no son para nada malas, el problema está en la escasa variedad de estas, lo que emborrona la selección y le quita algo de prestigio. De todas maneras, recomiendo escuchar la banda sonora, puesto que ayudan a disfrutar de mejor manera la trama.
Conclusión
Kotodama: The 7 Mysteries of Fujisawa no es una obra maestra, de hecho, no es algo que recomendaría a alguien que esté acostumbrado a jugar visual novels, pero para aquel que quiera iniciarse es sin duda un buen paso, y hablando de buen paso, también lo es como inicio para PQube, ya que no es para nada un mal primer título, y estoy seguro de que esta entrega solo es el principio de muchas otras que nos maravillarán en un futuro, por lo que merece nuestro apoyo para animarlos a seguir desarrollando y creciendo.