![[Análisis] Stories from Sol: The Gun-Dog [Análisis] Stories from Sol: The Gun-Dog](https://gaminguardian.com/wp-content/uploads/2025/03/stories-from-sol-1-800x450.webp)

Para ello, como es lógico, me puse a buscar referencias tanto cinematográficas como literarias… y de videojuegos, y sí: Stories from Sol: The Gun-Dog lleva anunciado más de un año y la propia existencia de este me hizo tumbar mi idea de proyecto por miedo a que pudiera acabar pareciéndose de más, así que desde aquí quiero mandar un afectuoso mensaje de odio a la gente de Space Colony Studios: casi me dejáis sin matrícula de honor.
Bromas aparte (porque saqué un 10 igual, si no iría a lo personal), me apasionan las historias ambientadas en el espacio y desde luego no pensaba perderme esta propuesta en formato visual novel. Así pues, hablemos de si esta primera entrada en la serie Stories from Sol es, o no, para tirar cohetes.
Stories from Sol: una buena primera toma de contacto
Vamos a empezar por algo que veréis que critico en todos mis análisis si se da la ocasión, y es que en Stories from Sol el nombre y sexo del protagonista es personalizable, siendo esto algo que a mí y doy por hecho que a más gente hace que me salga un poco del juego ya de primeras, porque si se trata de un título estilo Pokémon en el que apenas eres relevante, pues no importa tu género, pero en títulos donde la narrativa tiene un rol principal (y en las visual novel es lo único prácticamente presente), no me gusta el hecho de que el protagonista no esté predeterminado, me hace sentir que “no es su historia“.
Pero bueno, dejando eso de lado, pasemos a hablar de la historia que, a fin de cuentas, es lo que realmente nos interesa. En el caso de Stories from Sol: The Gun-Dog nos pondremos en la piel de Rei (así es como decidí yo llamarle), el nuevo oficial de seguridad de la Gun-Dog que, años después de fracasar en una misión de combate donde murió todo su escuadrón se ha visto relegado a trabajar para la colonia anteriormente enemiga con la que prevalece, a día de hoy, un supuesto tratado de paz determinado por la subordinación (que no esclavización, ojo).
La Gun-Dog se trata de una nave pequeña, por lo que la tripulación es de lo más reducida y sería mucha casualidad encontrarte con aquellos a quienes conoces… ¿verdad? Bah, a quién vamos a engañar, las conveniencias de guion se sobreponen siempre a la lógica por lo que nos encontraremos compartiendo espacio con nuestra novia, Cassandra, a quien no vemos desde hace meses porque hemos estado en misiones separadas y con Hansen, el único combatiente que sobrevivió de tu escuadrón en aquella fatídica cruzada. No estarán solos, por supuesto, se les sumarán una ingeniera jefe y su esclavo aprendiz, la capitana, un médico un tanto extraño, un artillero, un atractivo tripulante y la subcapitana.
Esto ya da pie a pensar, por supuesto, que los vínculos con el resto de personajes tendrán una gran relevancia en Stories from Sol, pero me apena decir que esto no es del todo así: si bien es cierto que las relaciones irán cambiando y el grado de odio/cariño que te tengan se verá directamente afectado por cómo decidamos llevar nuestras interacciones con ellos, en prácticamente ningún momento llegaremos a sentir que “tendríamos que haber tratado mejor a X personaje”.
Y aunque no veo esto como algo necesariamente negativo de base, si se trata de implementar deberían haberle dado una mayor fuerza, aunque yo considero que hubiera sido mejor dejar eso un tanto de lado y potenciar las interacciones un tanto más al estilo narrativo de Danganronpa donde el potencial de los personajes se centraba en la disparidad de sus personalidades y lo fuerte y extravagantes que podían llegar a ser, pues en Stories from Sol tratan de acercarse a ello, pero sin profundizar lo que deberían para explotarlo.
No obstante, como decía, esto no tendrá una gran importancia a nivel narrativo, pues la chicha de Stories from Sol se encuentra verdaderamente en, propiamente, la línea principal, y es que desde Space Colony Studios logran tramar una historia que crece exponencialmente, llevando los personajes y sus conflictos tanto intra como interpersonales al límite y llegando a generar al jugador la angustia que supone realmente vivir una situación así en medio de la nada, en una nave pequeña y con una misión que cada vez parece enturbiarse más.
Debo decir, pero, que para desarrollar tan bien esta historia, Stories from Sol se convierte inevitablemente en un trago amargo para aquellos que no estén acostumbrados al juego, y es que decisiones tomaremos muy pocas, pues la mayoría del tiempo la narrativa avanzará linealmente sin necesidad de que hagamos nada más que ir de allí para allá y hablar con los distintos personajes que nos acompañan, aunque encontraremos sobre todo una enorme cantidad de monólogos internos a modo de narración o, propiamente, texto del narrador (fantástico homenaje a Hunter X Hunter).
Eso sí, si llevas tantas visual novels como años a las espaldas, estoy seguro de que esto no te supondrá un problema y sabrás disfrutar del gran diseño narrativo que han creado.
La interfaz del juego, como podréis ver, cuenta con cinco botones de acción, lo cual podría parecer que limita mucho nuestras opciones de acción pero, realmente, hacen de Stories from Sol algo más interactivo que la mayoría de visual novels, quedándose a medio camino entre este género y el de la aventura gráfica que destaca aún más en Switch gracias a su pantalla táctil. A través de los botones podremos movernos por la nave, observar qué hace cada palanca, pantalla u objeto, usarlos propiamente, hablar con las personas que se encuentren con nosotros o utilizar los objetos de nuestro inventario.
Apartado artístico: una oda a lo retro
En cuanto al apartado artístico cabe destacar, primero de todo, que nos deja elegir entre tres modos gráficos: el modo doujin, el modo estudio y el modo brillante, suficientemente distintos entre ellos, pero recordando en todo momento a los juegos retro de para cuando, al menos yo, ni siquiera era un proyecto. Pero vaya, que esto no lo digo yo, lo dice su propia descripción en Steam:
Stories from Sol: The Gun-Dog es una aventura y novela visual con el espíritu de los títulos clásicos de PC-9800. Con una estética vintage de pantalla verde, Space Colony Studios se ha esforzado por crear un juego “fiel a la época” que desprenda vibraciones retro en todos los aspectos, desde el texto hasta los efectos visuales.
Y oye, es de aplaudir. El resultado a nivel visual es excelente, con animaciones de personajes que le dan más fuerza a sus personalidades ya suficientemente bien trabajadas y que se suman, más aún si cabe, a unos fantásticos diseños de base. Además, logran captar perfectamente ese aire futurístico y a la vez tan característico de las ficciones espaciales en cada uno de sus diseños de escenario (esto, conste, también lo hace de maravilla Mouthwashing, recomendación que os lanzo desde aquí).
La banda sonora de Stories from Sol es también un fantástico homenaje, pues todas y cada una de las melodías son tan sencillas que parecen repetirse, pero con las variaciones suficientes para que no se hagan cansinas; además, el estilo musical es en todo momento inspirado en, de nuevo, los videojuegos de antaño y de las recreativas.
Además, siempre hay que destacar cuando un juego cuida de su público, y es que el juego, entre otros muchos idiomas, viene muy bien localizado al español, lo que hace de esta visual novel una experiencia infinitamente más disfrutable y abre sus puertas a un público mucho más amplio.
Conclusión
Stories from Sol es una fantástica primera piedra para el desarrollo de una saga (especialmente teniendo en cuenta que el final de esta primera entrega deja claro que es una introducción a este universo), pero también es una gran visual novel. La historia se desarrolla a un ritmo que crece a la par que su intensidad y consigue algo que muchas no logran hacer: clava la duración para que no llegue a las 10 horas, pero le dé tiempo a explicar todo lo que querían, ofreciendo una trama de lo más destacable en el catálogo reciente del género.
Además, la jugabilidad de Stories from Sol, que se acerca a la aventura gráfica, y su estilo visual que actúa como carta de amor a lo retro le van como anillo al dedo, haciendo de esta misión espacial una aventura tremendamente recomendable para cualquiera que disfrute de las buenas narrativas, especialmente si te interesan las naves espaciales.
Por tanto, ¿cómo no voy a recomendar Stories from Sol? Lo único que juega en su contra es que la gran cantidad de texto denso (y no busco explotar el meme, lo digo en serio) y la excesiva linealidad de la historia (y, con ello, falta de ramificaciones y decisiones relevantes) hacen que si no estás acostumbrado al género se te pueda hacer un poco cuesta arriba, pero a la que te enganches, que no tardarás demasiado, la historia va viento en popa (o como sea la alegoría en jerga espacial) y estoy seguro de que no te arrepentirás de haberte lanzado a la piscina con Stories from Sol: The Gun-Dog.
