[Artículo] ‘ReLIFE’, ¿y si tuviera una segunda oportunidad?

[Artículo] ‘ReLIFE’, ¿y si tuviera una segunda oportunidad?

Desde que tengo uso de razón, he estado viendo anime. Dejando de lado todo lo que me han enseñado mis padres, que ha sido mucho, soy quien soy gracias a todo lo que el anime me ha transmitido y enseñado. Crecí con Naruto, Inuyasha y Slam Dunk entre otras, y bien es cierto que todas y cada una de ellas ha dejado algo en mí, pero todos tenemos historias que nos afectan más que otras, en mi caso, Digimon dejó una huella en mí que a día de hoy sigue estando vigente.

Más adelante, comencé a buscar anime para ver fuera de lo poco que se emitía en la televisión y descubrí Oregairu, la que quizás sea la obra más influyente en mi persona, pero no quiero hablar de ella hasta que no esté terminada. A la que tuve un poco de dinero, una de las primeras obras que compré fue la maravillosa Solanin, de la cual ya he hablado, aunque estoy seguro que en cuanto pase un poco de tiempo, volveré a dedicarle unas palabras al igual que pienso dedicarle un espacio en mi piel.

Y en un momento de mi vida, donde necesitaba sentirme acompañado, de casualidad descubrí ReLIFE.

 

Antes de comenzar, aviso que habrá algún spoiler de la obra, así que recomiendo haber visto el anime o leído el manga antes de seguir leyendo.

ReLIFE nos cuenta la historia de Arata Kaizaki, un nini de 27 años al que un día se le cruza Ryo Yoake, felicitándole por ser elegido como sujeto de prueba en el experimento ReLIFE. Bien, ¿qué implica este experimento? Al tomar la pastilla ReLIFE, adopta el mismo cuerpo que tenía al ser un adolescente en tercero de preparatoria (lo equivalente a nuestro segundo de bachillerato), y pasaría un año viviendo como si lo fuera, yendo a la preparatoria Aoba.

Allí, tendrá que tomar su rol como estudiante pero sin olvidar en ningún momento el verdadero propósito de esto: aprovechar la oportunidad para aprender qué es lo que le ha fallado y cómo puede rehacer su vida para que vaya a mejor como ser humano.

Porque todo el mundo merece una segunda oportunidad, ¿no?

Según avanza la trama, descubrimos que Chizuru Hishiro, una compañera de clase de Arata, es también un sujeto de prueba, aunque ella está en su segundo año tras fracasar en el primero. Y aquí es adónde quería llegar.

Está bien ofrecer una segunda oportunidad. También está bien pedirla. Pero ¿por qué depender de una segunda oportunidad?

 

ReLIFE nos habla de cómo todo el mundo puede cambiar, porque no hay nadie que no haya cometido un error ni tampoco lo vaya a cometer jamás. Cómo las personas están avanzando continuamente, a pesar de que por alguna circunstancia crean que no pueden seguir adelante, siempre se hace, aunque sea a un ritmo mucho más lento. Cómo, pase lo que pase, podemos darle la vuelta a la situación, porque al final, somos nosotros quienes decidimos cómo somos y cómo no, por mucho que haya cosas que están fuera de nuestro alcance, ser nosotros mismos no lo está.

ReLIFE es una segunda oportunidad para todos que nos sirve para recordar que no la necesitamos.

Nos encontramos con todo tipo de personas en nuestras vidas: las hay rudas por fuera pero sentimentales por dentro, otros demasiado seguros de sí mismos, otros que no son capaces de entenderse, y un enorme etcétera, pero lo más importante no es el hecho de haber estado con todas, es que seguro que todos hemos sido todas ellas en algún momento.

Porque todo son fases, nadie nace y vive siempre en un buen momento, a todos nos hacen daño, todos nos emocionamos, nos llevamos decepciones, no paramos de reír. Porque cada quien es él y sus circunstancias, pero sobretodo, él.

Pero nadie está solo, siempre hay personas a nuestro alrededor que nos ayudan a avanzar. Arata tuvo a la cabezota de Rena, al encantador Kazuomi, a la insegura Chizuru, al distante Ryo y a la efusiva An, y todas y cada una de esas personas hicieron que él avanzase, pero todo es recíproco, y al igual que provocaron cambios en él, él los provoco en los demás. Y de la misma manera, cualquiera puede recibir un empujoncito de vez en cuando, igual que puede darlo, pero al final cada persona debe decidir cómo vivir su vida, por lo que el ser capaz de aceptar el empujón es casi más importante que recibirlo.

 

Por mucho que tengas una segunda oportunidad, o incluso una tercera, si sigues viviendo atado al pasado, permitiendo que lo que te sucedió tiempo atrás te siga afectando a día de hoy, de nada sirve cuántas veces lo intentes, el resultado siempre será el mismo. Nunca está de más que nos recuerden que podemos avanzar, porque sí, a veces es necesario probar de nuevo, pero ReLIFE es el claro ejemplo de que todo se puede hacer bien desde el principio, que las segundas oportunidades son útiles pero también evitables.

ReLIFE es eso que nos recuerda que está bien fallar, está bien equivocarse, está bien no conseguir cumplir con lo esperado, lo que no está bien es creer que es el fin, dejarlo todo, parar de avanzar. ReLIFE no es solo una segunda oportunidad, ReLIFE es ese empujoncito que necesitamos de vez en cuando, y de verdad, aceptadlo, no dependáis de que os den una segunda oportunidad, aprovechad la primera, porque al final todo puede salir bien desde el principio, aunque hayan trabas de por medio.

No perdáis tiempo estancados esperando a que alguien venga a daros una segunda oportunidad, creed en la que os habéis dado vosotros al creer en algo.

No dependas de que alguien venga ofreciéndote un ReLIFE, pero no olvides tenerlo siempre presente.

Etiquetas: