Relicta, el juego debut del estudio español Mighty Polygon, se nos presenta como un alumno de la escuela influenciada por obras como Portal, The Talos Principle o Q.U.B.E., donde habrá que exprimir nuestro cerebro en pruebas en primera persona basadas en puzles muy centrados en las físicas, el magnetismo y la gravedad. El equipo valenciano ha apuntado muy alto, ¿habrán conseguido unir las piezas correctas para lograr su objetivo?
Historia
Relicta se ambienta en el año 2120, en una estación científica en la Luna donde se ha descubierto un nuevo mineral (que da nombre al juego) y que está provocando sucesos extraños en las instalaciones. Tras un peligroso accidente, la doctora Angelica Patel se verá inmersa en un viaje lunar donde tendrá que salvar la vida de los habitantes de la estación y la de su propia hija.
El argumento nos suena familiar, prácticamente es un tópico del género de ciencia ficción. Y aunque el planteamiento no perjudique a la historia por si mismo, sí lo hace un desarrollo poco interesante, repleto de personajes planos y sin gracia, y una protagonista sin demasiada personalidad que nos da una de cal y otra de arena. El hecho de que Patel vaya desentramando los diferentes acontecimientos acaecidos en el emplazamiento a la vez que intenta salvar la vida de su hija en una misión a contrarreloj difiere de lo que luego vemos como jugadores, ya sea por su tono variable en cada escena o sus graves altibajos en cuanto a ritmo. Y no dudo de las buenas intenciones del estudio, sin embargo el apartado narrativo es la parte más tosca de la obra.
Enigmas lunares
Pero aquí hemos venido a resolver puzles, y Relicta tiene unas mecánicas jugables que explota correctamente durante todo el juego, tal vez demasiado, aunque luego iremos a eso. La protagonista cuenta con unos novedosos guantes que actúan como modificadores de la gravedad y el magnestismo de los objetos, en este caso, cubos. Como ocurre con los mejores acertijos, Relicta nos ofrece unas herramientas muy fáciles de entender, con los gatillos cambiamos la polaridad de los cubos y con un tercer botón modificamos su gravedad. No hace falta ser un cerebrito para entender que polos iguales se repelen y los contrarios se atraen. Pues esta es prácticamente la totalidad de las mecánicas del título, aunque no serán tan fáciles de dominar que de entender sobre el papel.
Los primeros niveles nos servirán como campo de pruebas para experimentar con nuestro nuevo juguetito, transportando cubos de un lado a otro en puzles simples donde habrá que accionar mecanismos y abrir puertas. Poco a poco, los rompecabezas se irán volviendo más complejos, hasta llegar a puntos donde necesitaremos varios minutos e intentos antes de poder completar una zona. Además, con el paso de las horas, se agregarán nuevas formas de usar nuestros guantes, como usar los cubos para desplazarnos, calcular trayectorias, portales transportadores de cubos o nuevas placas con las que interactuar. Sin embargo, el objetivo no variará en ningún momento y la experiencia se torna repetitiva fácilmente. Los puzles dejarán de ser divertidos y se volverán una barrera —más o menos complicada— que nos impide avanzar.
Y es que, Relicta sufre de un exceso de duración. Sí, has leído bien. Más no es mejor, y mucho menos en una experiencia como esta. El juego puede llegar a durar casi 15 horas, demasiadas para unas mecánicas que llegados a un momento, no dan para más. El ritmo de juego se vuelve torpe debido a sus diferenciadas partes de historia y jugabilidad, y el diseño de niveles solo consigue crear picos de dificultad exagerados en ciertos momentos solo por hacer cada vez un puzle más largo y pesado.
Gráficos y sonido
Visualmente, Relicta sorprende por su calidad técnica, que sin llegar al top de los últimos años, logra destacar en el panorama indie más humilde. En lo artístico es muy variado gracias a su propuesta de Luna terraformada, por lo que veremos multitud de entornos a lo largo de nuestra odisea espacial, desde frondosos bosques a cuevas heladas, instalaciones futuristas y desiertos. Gráficamente es llamativo, más cuando su paleta de color se vuelve más amplia en según qué entornos.
La banda de sonora del juego pasa casi por completo desapercibida debido a que prefiere dejar paso al silencio, o más bien al sonido ambiental, en casi todo momento. Puede ser algo de agradecer en los puzles, ya que una melodía repetitiva en momentos de mucha concentración podrían sacar de quicio al jugador. Sorprendentemente, el título viene completamente doblado al inglés y subtitulado al castellano, y he de decir, que las actuaciones de voz no terminan de convencerme.
Conclusión
Relicta es el debut de Mighty Polygon y se notan las ganas del estudio valenciano, sin embargo, como su temática, deja un sabor tanto positivo como negativo. Buenas ideas, una jugabilidad en principio divertida, una historia de ciencia ficción que nunca llega a despegar y una duración excesiva, una de cal y otra de arena. Si sois amantes de los puzles, probablemente os guste a pesar de sus errores.